Secretaría de Salud obstruye altruismo en hospitales denuncia Red Solidaria Sonora
Por Daniel Sánchez Dórame/
Con una inspección de salubridad amenazó el secretario de Salud, José Jesús Bernardo Campillo García, a un grupo de ciudadanos que se organizaron para todas las noches llevar alimentos a familiares de pacientes e indigentes que pernoctan en los alrededores del Hospital General de esta capital de Sonora.
Se trata de la Red Solidaria, un esfuerzo inspirado en el documental «26 personas para cambiar al Mundo» de Jorge Lanata, donde 120 voluntarios de lunes a domingo, los 365 días del año, llevan una cena caliente a decenas de personas que por azares de la vida requieren el apoyo; ellos iniciaron su labor humanitaria el 22 de diciembre del 2013 y desde entonces funcionarios públicos han buscado la manera de impedirlo.
«Las personas que conocen el trabajo de la Red Solidaria se enamoran e involucra, nosotros ya pertenecemos a una red de redes a nivel mundial y cuando en otros países se enteran de las trabas que nos quieren imponer desde la Secretaría de Salud estatal se sorprenden de la falta de sensibilidad, no pueden creer como las autoridades pretender detener una labor solidaria y humanitaria», explicó Diana Coronado Gutiérrez, fundadora e integrante de la Red en Sonora.
El primer argumento para negar el acceso de los voluntarios a la explanada del Hospital General «Dr. Ernesto Ramos Bours», fue que dejaban mucho cochinero, así que se organizaron y los mismos beneficiarios les ayudan a recoger la basura y dejar limpio después de cenar; pero la presión continuó con el argumento de que su labor atraía vagos a la zona, «para que le dan de comer a los indigentes si al otro día van a tener hambre otra vez», refutó un funcionario estatal.
«El director del Hospital General tuvo una reunión con miembros de la Red junto con otros altos funcionarios, ahí les dijo que para eso estaban los albergues aunque éstos no se dan abasto; el Secretario de Salud (Bernardo Campillo) declaró que nos va a mandar una inspección sanitaria a la comida que preparamos y regalamos para evitar una intoxicación masiva», afirmó Diana Coronado.
Las presiones oficiales han continuado y los voluntarios de la Red Solidaria no cesan su labor, así que la semana pasada un operativo policíaco realizó redadas deteniendo a indigentes e inmigrantes que se acercaron al hospital público para recibir alimento; José Rubén Soqui de 72 años, quien utiliza una silla de ruedas, atestiguó el arresto de al menos 10 personas que esperaban la llegada de la Red Solidaria.
«Yo vi como los estaban levantando arbitrariamente sin estar bebiendo, los levantaron nomás, y los subieron a las patrullas, es una injusticia, la falta de criterio de los funcionarios», afirmó.
El problema de indigencia en el centro (primer cuadro) de la Capital de Sonora aumentó en el verano del 2012 cuando el Ayuntamiento de Hermosillo decidió construir un cerco perimetral alrededor del Parque Madero, jardín que todas las noches se llenaba de inmigrantes y personas en situación de calle que aprovechaban el césped para pernoctar, además que a escasos metros hay un albergue donde les daban alimentos; con la instalación de la valla que costó más de 38 millones de pesos, el Gobierno no pudo resolver la problemática, sino que dispersó a los indigentes por todo el sector.