DE PRIMERA MANO

De Primera Mano

Por Francisco Javier Ruiz Quirrín

 

Martes, 21 de Octubre del 2014

 

“49 Razones para no Olvidar”

 

HAY RAZONES también para augurar que el libro “49 Razones para no olvidar” de la periodista Lourdes Encinas Moreno, será la publicación de mayor trascendencia histórica sobre el Caso ABC, la tragedia infantil más grande de México.

Lourdes se encargó de recopilar horas y horas de cobertura informativa desde el momento de aquellos horribles hechos del 5 de Junio del año 2009 y, además, hurgar e ilustrar sobre todos los expedientes abiertos en tribunales y la implicación de cada uno de los actores, tanto funcionarios públicos como particulares, hasta nuestros días.

Es un excelente trabajo reporteril que realizó desde la redacción de “Ehui.Com” y el Semanario “Primera Plana” y que describió en 250 páginas sus propias emociones vividas con intensidad.

La autora admite que escribir este volumen era un compromiso impostergable para ella misma y si aparece a poco más de cinco años de aquellos hechos, es que se guardaba la esperanza de que la autoridad competente ofreciera resultados contundentes acerca de los responsables de los hechos.

Lourdes Encinas muestra entonces, el rostro de la impunidad y de un sistema político mexicano envuelto en sus intrínsecos intereses por el tráfico de influencias y la ambición por el poder.

El libro “49 Razones para no Olvidar” será un instrumento de referencia obligada para toda aquella y todo aquel observador y analista que sienta la necesidad de obtener sus propias conclusiones sobre aquel incendio que acabó de la manera más injusta, con la vida de 49 pequeñitos que dormían la siesta en una estancia infantil, dejando además a 104 con secuelas de por vida ante sus heridas.

Y aún más. Las consecuencias de consciencia y las heridas del alma. Las que parece que nunca desaparecerán y que abrazamos muchos de esta generación que sentimos el profundo dolor de unas muertes que no debieron ser.

Nos da mucho gusto que este trabajo anunciado por Lourdes Encinas y el Semanario “Primera Plana”, está ya a disposición en la versión digital de Amazon para todo interesado, sin dejar de reconocer que además de irrumpir con esta moderna tecnología, pronto se podrá tener en las manos, la edición impresa.

COMO UNA pesadilla cargadísima de terror, así se siente el caso de los 43 estudiantes normalistas de Ayotzinapa, Guerrero, desaparecidos desde hace casi un mes, sobre todo, después de que ayer trascendiera la versión del sacerdote activista de aquella región, Alejandro Solalinde, de que todos habían sido apilados e incinerados según testigos presenciales y cuyas versiones hicieran llegar a ese religioso, quien se ha puesto a disposición de la Procuraduría General de la República para ofrecer la información recabada… En los primeros comentarios de Solalinde, establece que ha detectado “un interés de la autoridad” por tratar de ocultar estos hechos… Aquí no hay de otra… El gobierno federal encabezado por el Presidente Peña Nieto está obligadísimo a hacer justicia y ejemplar sobre estos tenebrosos hechos, porque las comparaciones con la matanza de estudiantes en Tlatelolco de 1968, podrían traer como consecuencia la aparición de una nueva guerrilla en nuestro país y descomponer el poco tejido social que queda en nuestro suelo.

PARA QUIEN no lo sabe, déjeme decirle que ya ha trascendido que el señor José Guadalupe Curiel, nuevo dirigente del Partido de la Revolución Democrática en Sonora, siguiendo la “línea” de Dolores Padierna (una cabecilla de su “tribu” al interior de ese partido) ha iniciado con la organización de algunos foros en ciudades de Sonora, aparentemente para conocer la problemática de la región… En realidad, lo que busca son perfiles para llenar las candidaturas a cargos de elección popular rumbo al 2015… En el caso de la gubernatura en competencia, la “línea” es encontrar destacados sonorenses de la sociedad civil para acercarlos y “tentarlos” con el poder… Y no diga quién se lo dijo, pero buscarán en cualquier momento a Servando Carvajal… Desde luego, éste último tiene sus convicciones muy propias y no está a la oferta de nadie.