De Primera Mano | Las deudas de López Obrador con Sonora

Por Francisco Javier Ruiz Quirrín
ES INNEGABLE que a partir del año 2019, (a partir del segundo mes de la llegada del Presidente López Obrador a Palacio Nacional) los recursos de la federación que en Sonora se aplicaban a varios proyectos y programas se vinieron abajo.
1.- El Hospital General de Especialidades, en Hermosillo, una obra que requería ser terminada con un 30 por ciento más de la programación inicial, -con recursos desde el Centro-, se aplazó y tuvieron qué pasar tres largos años para que, aún en partes, se concluyera una obra que a la fecha se mantiene en el proceso de equipamiento con la esperanza de que comience a operar en enero del 2022.
2.- La carretera de cuatro carriles de Estación Don a Nogales, ampliada con concreto hidráulico… El Presidente López Obrador se comprometió cuando menos en tres fechas para terminarla e inaugurarla. Es hora que esas fechas aún no se cumplen.
3.- Antes de la llegada de la “cuarta transformación” al país, el presupuesto del gasto del gobierno federal contemplaba entre 6 y diez mil millones de pesos anuales para el mantenimiento de la red carretera sonorense, aparte de la autorización de varios proyectos de obra pública, necesaria para solventar necesidades de la población. En el año 2019 se recortaron recursos al Estado por casi cinco mil millones de pesos y se suspendió el mantenimiento a los caminos locales. En el año 2020 sólo se autorizó la ampliación del periférico en la ciudad de Nogales y destinar unos centavos para concluir el nuevo hospital en Hermosillo e iniciar los trabajos de la desalinizadora en Empalme, así como concluir con la presa “Pilares”, en Álamos. Para este 2021, sólo la federación autorizó un triste camino de Bavispe a Agua Prieta, un hospital del IMSS en este último municipio y estirar los centavos para concluir con el hospital.
4.- Los municipios se quedaron sin recursos. El Fondo para el Fortalecimiento de la Seguridad Pública desapareció y las y los presidentes municipales debieron acudir al Estado para pedir dinero y cumplir sus compromisos (algo que no pudieron lograr por la ruina también de Palacio de Gobierno) o bien, tomar la decisión salomónica de abandonar sus ciudades. Cajeme, Guaymas, Hermosillo, Caborca y Nogales, fueron ejemplo de ello.
5.- El Presidente AMLO anunció con bombo y platillo que autorizaría 500 millones de pesos para Cajeme y 500 millones de pesos para Hermosillo, para ser aplicados en el arreglo de sus calles… Se alegraron entonces los presidentes municipales, Sergio Pablo Mariscal y Célida López, pero con lo que no contaban era con que la SEDATU intervendría en el manejo de esos recursos… A cada uno le cercenó 200 millones para otros proyectos y sólo se utilizaron 260 millones para tapar baches. Una baba.
6.- El Presidente de la República anunció que el gobierno federal adquiriría los estadios de béisbol “Tomás Oroz Gaytán”, de Ciudad Obregón y “Héctor Espino”, de Hermosillo, para convertirlos en escuelas de béisbol, a pesar de que en cada una de esas plazas, con recursos públicos, ya se habían construido dos grandes y modernos estadios… Por ambos inmuebles la federación depositó casi 1200 millones de pesos, pero ese recurso se fue en el manejo de la pandemia de Covid-19 por la administración estatal. Mientras tanto, dichos estadios fueron demolidos y, sobre sus ruinas, se construye lo que al parecer serán escuelas.
7.- Los municipios en los que tiene influencia la actividad minera en Sonora, contaban con recursos para pavimentación, agua potable, drenaje y otros servicios públicos, gracias al Fondo Minero, una bolsa de recursos que aportaban las empresas mineras del país y que fue resultado de una ardua lucha, de años, de alcaldes y otras autoridades locales, conjuntamente con legisladores federales. López Obrador desapareció ese Fondo y los pueblos están abandonados a su suerte. Entre esos municipios está Cananea.
8.- La remediación por la contaminación del Río Sonora a causa de un derrame de productos tóxicos de Grupo México en el año 2014, quedó a medias y no ha habido autoridad alguna, dentro del gobierno federal, que le dé seguimiento al asunto y reactive el apoyo. No se tiene la menor idea de las consecuencias en la salud de las personas, la flora y la fauna en esa región, que se observará en los años por venir.
9.- En el arranque de su sexenio, el Presidente anunció que en las poblaciones fronterizas con los Estados Unidos, el precio del litro de gasolina se igualaría con el de los vecinos del norte, se reduciría el ISR y se mantendrían las tarifas de energía eléctrica… Es un pendiente que está en la agenda de las promesas presidenciales de la “cuatroté”.
10.- El Presidente López Obrador llegará esta tarde a Sonora, se hará acompañar de todo su gabinete y encabezará una reunión para aplicar un Plan de Justicia y Dignificación para Cananea… Será una espléndida oportunidad, también, para girar instrucciones que le permitan regresar los apoyos que en los años anteriores Sonora y los sonorenses (un pueblo muy politizado que se comportó a la “altura”, según las propias expresiones presidenciales, en los pasados comicios electorales) recibían y que le permitían vivir con mayor dignidad.
11.- El primer mandatario de la Nación tendrá también la oportunidad de mostrar su apoyo al Gobernador Alfonso Durazo… Ya no escuchará las palabras de una Gobernadora que le agradecerá “por todos los apoyos recibidos para el Estado”, pero se encontrará a un Gobernador de su mismo equipo y confianza.