Baja la inflación en México: pasa de 4.13% a 3.55% y abre la puerta a menor tasa de interés

Por Redacción PPD
Ciudad de México, 24 de Julio del 2025.- Amanece México con la desaceleración de la inflación, que pasó de 4.13% a 3.55% anual; como un avance clave en la estabilidad económica del país y un paso importante para abrir la puerta a mayores inversiones nacionales y extranjeras.
Durante su conferencia matutina, la presidenta Claudia Sheinbaum subrayó que la disminución se debe, en gran medida, al control de precios en productos esenciales como la carne de res, cerdo y pollo, los cuales —dijo— “ya están regresando a su precio”.
“La inflación desaceleró, se ubicó en 3.55%, es una reducción importante, y eso nos habla también del margen para que el Banco de México pueda seguir bajando las tasas de interés, lo que nos ayuda también, pues, a aumentar las inversiones”, informó.
Con este ajuste a la baja, Banxico tiene ahora mayor margen para recortar su tasa de interés, actualmente en 11.00%. Una tasa más baja abarata el crédito, estimula el consumo y puede detonar un mayor flujo de inversiones, especialmente en sectores como vivienda, manufactura, infraestructura y pequeñas empresas.
También destacan que los precios de alimentos, energía y transporte han mostrado una tendencia a la baja o se han estabilizado en las últimas semanas, lo que contribuyó al alivio.
La inflación subyacente —que excluye productos volátiles como energéticos y alimentos no elaborados, y que es clave para las decisiones del banco central— también mostró una reducción, lo que refuerza la posibilidad de un recorte en la tasa en los próximos meses.
Una tasa de interés más baja mejoraría el acceso al financiamiento para empresas y consumidores, algo vital para fortalecer la reactivación económica. Además, México podría volverse más atractivo para inversionistas nacionales y extranjeros, especialmente en el contexto del nearshoring, donde ya hay empresas internacionales trasladando operaciones al país.
A pesar del avance, el Banco de México se ha mostrado cauteloso. En sus últimos comunicados ha reiterado que evaluará “con prudencia” cualquier ajuste en la política monetaria, asegurando que la lucha contra la inflación aún no ha terminado.
La baja en la inflación es una buena noticia para los bolsillos mexicanos y para el crecimiento económico. Si la tendencia continúa, podríamos ver un ciclo de recortes en la tasa de interés en el segundo semestre del año, lo que impulsaría tanto el consumo como la inversión.