Abre Profepa tres procesos contra Padrés
La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) abrió tres procedimientos al Gobernador de Sonora, Guillermo Padrés Elías en relación a la presa que había construido en el rancho particular «El Pozo Nuevo» de la familia Padrés, y la siembra de nogales de unos cinco años a la fecha.
Un procedimiento tiene que ver con la falta de un Manifiesto de Impacto Ambiental de la Semarnat para construir la presa; el segundo tiene que ver con la falta de un manifiesto para el cambio de uso de suelo, de pecuario a agrícola, por la siembra de nogales.
El tercer procedimiento también tiene que ver con la falta de un permiso ambiental emitido por la Semarnat para modificar el ecosistema, ya que el rancho que 5 años atrás era un agostadero, se convirtió en los últimos años en decenas de hectáreas de nogales.
La Profepa informó que ya notificó a Padrés Elías del emplazamiento jurídico, bajo el expediente PFPA/32.3/32.3/2C.27.5/0068-14.
«Como resultado de una serie de inspecciones realizadas a dicho predio, propiedad del Gobernador de esa entidad, (Sonora), esta dependencia federal emplazó a un procedimiento administrativo para que los dueños amparen las obras y actividades respecto a una construcción hidráulica y a una siembra de nogal», informó la dependencia federal.
El Gobernador de Sonora y su familia deberán entregar tres permisos federales, dos emitidos por Semarnat y uno más por la Sagarpa, para demostrar la legalidad de la infraestructura en el rancho.
«La Profepa ordenó al inspeccionado presentar en un plazo máximo de 10 días hábiles la autorización en Materia de Impacto Ambiental que otorga la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), así como abstenerse de realizar obra alguna en el lugar».
Apenas el 26 de noviembre, el titular de la Conagua, David Korenfeld, informó que la dependencia inició un proceso sancionatorio contra los propietarios del rancho «El Pozo Nuevo», en el Municipio de Arizpe, debido a que la presa construida sobre un cauce federal, no contaba con permisos.
A los pocos días de darse a conocer la existencia de una presa en el rancho «El Pozo Nuevo», la presa colapsó entre el 17 y 18 de septiembre de este año, presuntamente por una crecida del Río Manzanal, lo que provocó una segunda inspección de Conagua para verificar si ésta fue destruida por causas naturales o provocadas.
Rolando Chacón / Reforma