Alarma la sequía al País
La situación de sequía que afecta a varias regiones de México tiende a empeorar.
De acuerdo con el pronóstico del Servicio Meteorológico Nacional, el País recibirá en mayo la mitad de la lluvia promedio para el mes de los últimos 40 años.
El organismo prevé que las entidades más afectadas serán Sonora, Baja California Sur, Baja California, Sinaloa, Tamaulipas, Chihuahua e Hidalgo, en donde se registrará menos de 20 por ciento de la precipitación promedio.
El director de la Comisión Nacional del Agua, David Korenfeld, señaló ayer que, si bien el País se encuentra en la etapa final del estiaje, prevalecen condiciones de sequía en diversas regiones.
«Tenemos un número importante de regiones que tienen condiciones iniciales de sequía (…) Los estados de Tamaulipas, Coahuila, Chihuahua y una parte de Nuevo León tienen los indicadores de sequía más altos, que van en congruencia con lo que está viviendo la parte central de Estados Unidos», detalló en rueda de prensa.
En su última edición, publicada a mediados de abril, el Monitor de Sequía de América del Norte alerta sobre el impacto del déficit de lluvia en el noreste de México.
Las presas del País, señaló Korenfeld, se encuentran actualmente a 30 por ciento de su capacidad.
«(En mayo) vamos a tener una tendencia de seguir con lluvias por debajo de la media en gran parte del territorio nacional», agregó.
Estimó, sin embargo, que la precipitación se recuperará a partir de junio.
«El seguimiento mensual (de las condiciones de sequía) nos dará la oportunidad de ejercer acciones que garanticen en todo momento el tener el recurso hídrico para las ciudades, que van desde recomendaciones voluntarias hasta recomendaciones obligatorias para efecto de guardar una cantidad de agua importante», remarcó.
De enero a marzo de 2013, indica, se observó un incremento progresivo de las áreas con sequía extrema y excepcional, principalmente en Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas.
En Tamaulipas, apunta, la sequía ocasionó la pérdida del 10 por ciento de la superficie sembrada con sorgo.
En entrevista, Óscar Javier Lara, subdirector de Infraestructura Agrícola de Conagua, explicó que las grandes extensiones de riego ubicadas en Sonora y Sinaloa ya resintieron el impacto de la sequía de 2012.
«Tuvieron un impacto por la sequía del año anterior, que implicó que se redujeran las superficies de siembra y para el ciclo primavera-verano que inició en abril ya también se dieron algunas reducciones (de abasto de agua para riego), pero el impacto más grande está dado en las tierras que son de temporal», comentó.
REFORMA