Analizan cómo entregar ayuda a afectados por derrame sin violar veda electoral
Con más de un mes de atraso en la entrega de recursos del fideicomiso creado para resarcir los daños de los derrames causados por la mina Buenavista del Cobre en siete municipios de la zona del Río Sonora, será hasta entrada la siguiente semana cuando de nuevo se de una reunión entre los alcaldes y representantes del gobierno federal con la finalidad de verificar sí existen posibilidades de que el dinero se entregue sin violar la veda electoral.
Pedro Armando Lugo López, alcalde de Aconchi, uno de los municipios afectados, dijo que a pesar de que los siete presidentes municipales se reunieron como estaba previsto, no hubo quórum por parte de quienes integran el Comité Técnico del citado fideicomiso que se estableció con 2 mil millones de pesos aportados por la empresa Grupo Méxicoa fin de pagar por los daños que causó el derrame de sulfato de cobre.
El alcalde dijo que de parte de la Secretaría de Gobernación y de la Secretaría de Medio Ambiente se les citó para otra reunión el 7 de abrilen Hermosillo.
Aunque dijo confiar en que ahí se dará una resolución favorable a la petición de los pobladores de la zona afectada, lo que implica que se reanude la entrega del dinero, de no tener respuesta, se buscarán otras alternativas como la movilización, la posibilidad de hacer bloqueos carreteros y otras medidas de presión.
Rodolfo Lacy, presidente del Fideicomiso, canceló desde el 4 de marzo pasado la entrega de recursos argumentando que la veda por el arranque de las campañas a gobernador en Sonora impide que funcionarios de cualquier orden de gobierno aparezcan entregando recursos, sin embargo el propio Instituto Nacional Electoral ha respondido que no hay violación a la Ley Electoral con la entrega de recursos, siempre y cuando esta actividad no se publicite o no aparezcan funcionarios entregando los cheques respectivos a los pobladores.
Los derrames en en el Río Sonora se reportaron el 8 de agosto del 2014 y de entonces a la fecha la población afectada ha debido transcurrir un largo viacrucis en búsqueda de que se les repare el daño, pues la contaminación del Río Sonora con metales pesados paralizó las actividades económicas y cotidianas de más de 27 mil habitantes de la región.
EL FINANCIERO