DestacadaGeneral

Buscó Nereo Galileo de la Peña dar a conocer cultura sonorense

A tres años de su muerte, que se cumplen mañana, el muralista, pintor y escultor Nereo Galileo de la Peña es recordado como uno de los artistas plásticos más importantes del norte del país, quien contribuyó en la difusión y el desarrollo del legado cultural de Sonora.

El objetivo de su producción fue contribuir para “acabar con esa idea de que en el norte sólo existe la cultura de la carne asada, y no es así, hay una amplia riqueza histórica y artística”, dijo alguna vez al Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta).

Nereo Galileo de la Peña García nació el 3 de octubre de 1942, en la Ciudad de México, indica su perfil biográfico publicado en el sitio electrónico del Instituto Sonorense de Cultura (isc.gob.mx).

“Nací y crecí entre pintores y escultores”, señaló en una ocasión el creador.

Información del portal del Conaculta recuerda que desde joven se relacionó ampliamente con las artes, ya que su padre sabía pintar, sus hermanos se dedicaron a la pintura y en la familia de su madre había escultores; “supongo que heredé el don de cada uno de ellos, porque lo mismo esculpo que pinto”, comentó.

Nereo de la Peña 1Comenzó su formación artística en la Escuela Nacional de Pintura y Escultura “La Esmeralda”; más tarde estudió dibujo y publicidad en la Universidad de San Diego, California, en Estados Unidos, y asistió a diversos talleres de instituciones artísticas de Trento, Italia.

A partir de la década de 1970 participó en diversas muestras nacionales, en estados como Baja California, Michoacán, Jalisco, Puebla, Veracruz, Tabasco, Chiapas, Quintana Roo y Sonora.

Además, expuso en múltiples recintos internaciones, figuran las ciudades de Los Ángeles y Nogales, en Estados Unidos; así como diversos poblados de la ciudad italiana de Trento.

Entre los más de 100 murales que plasmó en edificios públicos y privados figuran cuatro murales en la Catedral de Nuestra Señora de la Asunción de Hermosillo, Sonora, así como el mural “La vida del ilustre misionero padre Kino” (1987), en el Museo de Trento, Italia.

En su labor como escultor es considerado el creador de la técnica “Uniré Clavis”, que consiste en soldar llaves entre sí para formar una compleja filigrana.

Esta técnica permite ver las llaves, de tal manera que no pierden su esencia y sólo se aprovechan para crear otras formas y dar un nuevo concepto a la escultura.

En una ocasión, el artista comentó que esta técnica surgió a partir de una plática con un amigo sobre Eusebio Francisco Kino (1645-1711), su compañero le pregunto qué haría si lo encontrará y él contestó “darle la llave de mi casa para que pudiera entrar cuando él quisiera”.

Más tarde, dijo, decidió hacer una escultura con las llaves de la gente de sonora y empezó una investigación “sobre los metales y luego la soldadura correcta para unir las llaves sin que éstas pierdan su esencia, que reflejen la confianza y amor, que pueden abrir cualquier puerta”.

Entre sus piezas escultóricas destacan un busto de bronce de Rafael Muñoz, líder campesino; así como dos bustos del padre Eusebio Francisco Kino, uno elaborado con la técnica “Uniré Clavis” y otro de concreto.

Además, realizó monedas conmemorativas por la devolución de Chamizal, en 1963; así como estampillas para el correo de Servicios Aéreos y la dirección artística de la monografía de Celaya, Guanajuato, en 1970.

A lo largo de su trayectoria recibió múltiples distinciones: en 1991 la ciudad de Taio le concedió la ciudadanía honoraria italiana, y en 2007 se dio su nombre al Sendero del Arte contiguo al Mausoleo del padre Kino, en Sonora.

También fue reconocido como Creador Emérito 2008-2009, por el Programa de Estímulo a la Creación y al Desarrollo Artístico del Fondo Estatal para la Cultura y las Artes (Fonca).

Nereo Galileo de la Peña falleció el 12 de septiembre de 2011 en Caborca, Sonora, después de enfrentar una larga batalla contra la enfermedad de Parkinson, que terminó su vida a los 69 años de edad.

Notimex