De Primera Mano

Por Francisco Javier Ruiz Quirrín

 Lunes, 01 de Febrero de 2016

Periodismo y periodistas que siguen viviendo en el pasado

AHORA los periodistas más influyentes de México, requieren de tener presencia en las redes sociales para trascender. Y es que las nuevas generaciones de mexicanos no sólo no están viendo periódicos. Cada vez más se reduce la presencia juvenil entre la audiencia en noticiarios de la televisión.

Los jóvenes y los no tan jóvenes, aquellos hombres que están tomando decisiones, se están informando a través de sus móviles.

La radio es un fenómeno en esto de trascender la barrera del tiempo, si hablamos de ejercicio periodístico. El mundo se sigue escandalizando como lo hizo a mediados del siglo XX creyendo que escuchaba la relatoría de una invasión de marcianos. Horas después se dio cuenta que fue un truco publicitario y muy exitoso a través de la radio, producido por Orson Wells.

En nuestros días, el reporte instantáneo de noticias, extendido en el tiempo y mucho más accesible al bolsillo, sigue permitiendo que no perdamos nuestra capacidad de asombro. La radio, al estar a disposición del oído del humano, aún le gana terreno a la televisión.

Nuestro “Semanario de Sonora”, “Primera Plana”, es una publicación especializada. Llega y es requerido por quienes desean información privilegiada. Sin embargo, la versión electrónica de “Primera Plana”, es decir www.ppdigital.mx, tiene un efecto mucho más masivo.

La transmisión en radio de “ppdigital.mx” goza ya de varios contenidos. Uno de ellos está producido y conducido por tres jovencitas universitarias: Kennia Angélica Gálvez Gárate, Cynthia Karolina Zepeda Cota y María Guadalupe Camargo García. A su espacio al aire le dieron en llamar “Café Recién Colado”.

El pasado fin de semana las jóvenes lanzaron una promoción. Fue algo así como una “ocurrencia”. Si el visitante en la red adivinaba un perfil, se ganaba un regalo. 48 horas después, tan sólo en “Facebook”, había más de nueve mil “likes”. Evidentemente, miles y miles de visitantes más. La tarde de este domingo, ese mensaje lo habían visto 2,465,540. Algo fuera de serie.

Desde luego, ha habido más casos en la red que se convierten en verdaderos fenómenos de la comunicación. La señora que fue víctima del robo de su auto y por no tener fotografía de él, la obligó a hacer un dibujo que luego de registrar más de un millón de visitas, le permitió ganarse una unidad nueva, es otro ejemplo reciente en Sonora.

Total, para todo personaje que desee hacer llegar su mensaje a miles y miles de personas, la red en Internet ya es el vehículo más efectivo para masificar la idea. Los empresarios y los políticos no escapan a ese fenómeno.

El periodista que cree que aún tiene gran peso político y que sigue siendo aún representante del Cuarto Poder, precisamente por quedarse en el pasado, ya no mira la realidad que le rodea.

Periodistas en México como López Dóriga, la Aristegui o Loret de Mola, ya son seguidos por millones de personas en las diferentes redes sociales. Así garantizan su influencia.

En Sonora, medios como El Imparcial que ha perdido su credibilidad y sus suscripciones han colapsado, utilizan también un gran impulso en Internet para no perder vigencia.

Hay otros que se dicen periodistas pero que han seguido una escuela de chantaje para poder sobrevivir. Golpean con dureza a sus víctimas en el papel pensando que aún tienen influencia, pero no se han dado cuenta de que ya la han perdido, precisamente porque no quieren salir de un pasado que comienza a quedarse muy atrás.

El mundo sigue cambiando. Habrá qué admitirlo. Los instrumentos para que las personas se informen ya no son los de hace algunos años.

Los periodistas, como hombres, debemos seguir preocupándonos y ocupándonos de hacer buen periodismo. La sociedad, como nunca antes, exige información, pero documentada y real.

Sin embargo, ahora, en esta segunda década del siglo XXI, estamos obligados además a estar frente a las personas. Éstas no vendrán a nosotros a tocarnos las puertas.

HOY LUNES, 1 de febrero del año 2016, es día inhábil… Si tuvieron capacidad para enviar al olvido la expresión oficial “Distrito Federal”, a ver cuando mandan al archivo aquella reforma Abascal-foxista que institucionalizó los “puentes” en nuestro país, con el grave riesgo de hacer que los jóvenes de México pierdan la memoria histórica… Y nación que pierde la memoria, pierde también el rumbo.