DE PRIMERA MANO

De Primera Mano | FAOT: Del alto nivel al concierto popular

Por Francisco Javier Ruiz Quirrín

rq-columnaSIN DUDA, si en el Gobierno del Estado se impuso una opinión apostándole a que en esta edición 33 del festival “Alfonso Ortiz Tirado” se establecería marca de asistencia, la verdad es que fue muy acertada. Sin embargo, el costo pudo haber sido muy alto.

Es muy probable que para la siguiente edición en el año 2018, se piense más de dos veces en llevar a Álamos a un grupo de tanta popularidad que provoque el extraordinario caos vehicular que obligó a la autoridad a cerrar la carretera Navojoa-Álamos a las 21:00 horas y meter en el poblado a fuerza de desorden, más de 40 mil almas y con ello, generar un nuevo récord en los anales de las fiestas populares en Sonora: La cantina más grande, en la que corrió alcohol entre grandes y chicos, sin control alguno.

Desde luego, el “jalón” numérico que implica la presentación de un grupo musical como los Ángeles Azules, o Julión Álvarez, o los Tigres del Norte, invitando a un baile popular y completamente gratis, es previsible hasta para el inexperto en la organización de estas concentraciones.

Mientras tanto, a los asistentes tradicionales al FAOT que ya habían disfrutado horas y días antes de Ariadne Quijano, Manzanero, Filio, Paul Poots y tuvieron la tentación de ver y escuchar a los Ángeles Azules, no les quedó otro remedio que salirse de aquel enorme tumulto alrededor del escenario y de la plaza de armas, excepto que hayan reservado la terraza de alguno de los hoteles aledaños.

El último de los estelares tenores, De la Torre, no pudo disfrutarse a placer porque los miles de visitantes que esperaban a los Ángeles Azules ya estaban armando un tremendo alboroto en la Plaza.

Dentro de todo esto, hay un registro positivo: No se dieron mayores reportes a seis choques entre automóviles, heridos leves y un par de jovencitas intoxicadas por el exceso en el consumo de alcohol. Ambulancias de la benemérita Cruz Roja tuvieron mucho trabajo la madrugada de este domingo.

La idea, se dice, no fue mala. Lo negativo fue no calcular que aquel mar de gente invadiría un espacio reducido en un pueblo donde hay una sola entrada y ésta misma, es la salida. No calcular que el alcohol correría como el Río Mayo, que muchas personas llevarían sus carpas para quedarse a dormir y que aquel caos paralizaría a los habitantes del pueblo porque sus cocheras fueron utilizadas por los alegres fanáticos del baile popular.

Las felicitaciones sí deberán ser para los organizadores de esta edición 2017 del FAOT, porque podrán presumir para la historia que la asistencia en Álamos llegó al mágico número de 100 mil personas. Para la versión venidera, con este antecedente se corren dos riesgos. El primero, reducir el concepto de todo un festival del más alto nivel, a una concentración popular animada por el mismo gobierno.

El otro riesgo es que ocurra una desgracia y alguien pudiera sucumbir aplastado por la tromba humana. Entonces sería muy probable que el prestigio logrado por tantos años se venga abajo. Pregunta, ¿habrá alguien capaz que pudiera prevenir esto?

 

TUVE LA oportunidad de asistir a la Misa por el eterno descanso de Adalberto Rosas López en la Catedral de Ciudad Obregón… Por lo tanto, fui testigo de un templo repleto donde, desde luego, el Valle del Yaqui despidió a uno de sus hijos más distinguidos… Ahí estaba Bethina y sus hijos Adalberto y Bethina, recibiendo las condolencias de familiares, amigos y mucho, mucho pueblo… Gente humilde, grupos de indígenas y líderes de todos colores y sabores… Panistas de viejo cuño como Javier Castelo Parada y Carlos Amaya Rivera, recordaban al amigo desaparecido, poniendo énfasis en las anécdotas que retrataban perfectamente la integridad mostrada siempre por el popular “Pelón” Rosas… El alcalde Faustino Félx Chávez y otros expresidentes municipales… En realidad, la élite obregonense estaba presente, así como algunos funcionarios del gobierno estatal como el secretario de gobierno, Miguel Ernesto Pompa y el director del Isssteson, Enrique Claussen Iberry… Al día siguiente, viernes, la Gobernadora Pavlovich viajó para dar personalmente su pésame a los familiares del hoy caballero desaparecido… Descanse en paz el buen Adalberto.

 

POR CIERTO, me encontré con un Ciudad Obregón muy distinto… Ya quedó atrás aquel pueblo tranquilo… En sus calles del primer cuadro gran tránsito vehicular y la necesidad de una señalización mayor para automovilistas que conducen a la ofensiva y nunca a la defensiva… La semaforización es deficiente… Me tocó ser testigo de un choque y un atropellamiento… Evidentemente hay mucho trabajo por hacer.