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El desafío de la seguridad en la era digital

En un mundo que se ha movido rápidamente, el sistema de gobierno también tiene qué hacerlo. Al frente de la seguridad se requieren  hombres y mujeres con una visión de presente y de futuro, no de pasado

Por David Figueroa

La inseguridad parece imparable y el ciudadano comienza a reaccionar de manera, más que inesperada, desesperada ante los pocos resultados del esfuerzo de las autoridades.

Hace unos días se hizo viral en redes sociales el caso de un grupo de mujeres que fueron exhibidas totalmente desnudas en el sur del estado, supuestamente por cometer un delito en un acto desesperado de los afectados por mandar un mensaje a los delincuentes y parar la ola de robos y asaltos.

El 2016 quedará en la memoria colectiva como el año en que los ciudadanos dijeron basta, se unieron, se organizaron y están saliendo a defender su patrimonio, a sus familias y hasta sus vidas en algunos casos ante las acciones insuficientes de las autoridades. El año de los famosos ‘vengadores’.

Esto sucede con mayor incidencia en grandes ciudades donde el descontrol y la inseguridad han alcanzado niveles literalmente insostenibles como Jalisco, Guerrero, Estado de México o el mismo DF donde se han presentado casos de mutilaciones, asesinatos y linchamientos; pero igual comienza a pasar en nuestro estado.

Definitivamente el esfuerzo en materia de seguridad no alcanza un nivel de satisfacción razonable, por el contrario la percepción es que cada vez hay menos control.

Una de las razones es que entre otras cosas como la impunidad, corrupción, mala economía, falta de empleos, etcétera, hay un elemento que pocos están viendo: seguimos haciendo lo mismo que hace diez años en la nueva era digital.

Mientras los delincuentes o asaltantes ya utilizan buena parte de la tecnología para investigar a sus víctimas, para coordinarse y evadir la justicia, las medidas de solución que proponen las autoridades, son las mismas que proponían los gobiernos en los 90’s.

Incremento al sueldo de policías, mejores condiciones de trabajo, inversión en equipamiento, más patrullas, un número telefónico para emergencias o denuncia, etcétera.

Todo esto es bueno, es necesario e imprescindible; es un esfuerzo que no debe dejar de hacerse, pero hay una nueva realidad y nuevos retos.

Hoy el mundo cabe prácticamente en la mano en un aparato celular, tableta o cualquier artículo digital básico en trabajos de rastreo, investigación y hasta respuesta rápida al ciudadano.

Seguramente este razonamiento no es nuevo y pareciera simplista, pero lo cierto es que no se ha concretado en acciones o mejores resultados.

Por poner sólo un ejemplo están las redes sociales como Twitter o Facebook  que en materia de denuncia, monitoreo, coordinación y respuesta rápida, puede tener mucho mayor alcance que el 911; sin restar el objetivo específico de este medio.

Si existiera una cuenta en redes sociales operada las 24 horas por la autoridad correspondiente en comunicación permanente y en tiempo real con los ciudadanos, no sólo podría haber más y mejor respuesta en menor tiempo, sino que también sería una herramienta para contar con un mapa geográfico de incidencia del delito al instante, sin tener que esperar el famoso semáforo delictivo que se presenta cada tres meses.

En pocas palabras a veces es más importante la voluntad y la creatividad, la vocación por supuesto que las grandes soluciones.

No existe una varita mágica que vaya a venir a resolvernos el problema de inseguridad en el que convergen tantos elementos como la economía, la drogadicción y la falta de empleo.

En un mundo que se ha movido rápidamente, el sistema de gobierno también tiene qué hacerlo. Al frente de la seguridad se requieren  hombres y mujeres con una visión de presente y de futuro, no de pasado.

El desafío de la seguridad en la era digital es el diseño de políticas públicas quizá más sencillas o más comunes de lo que pensamos; no es encontrar el hilo negro sino saber ver en lo que ahora tenemos y antes no teníamos, la mayor oportunidad para hacer las cosas diferentes.

Agradezco sus comentarios y retroalimentación a través del correo electrónico [email protected]; y  en redes sociales: Twitter @DavidFigueroaO /Fb David Figueroa O.

*David Figueroa Ortega es empresario, Ex Cónsul de México en Los Ángeles y San José California; Ex Diputado Federal; Ex Alcalde de Agua Prieta; Ex Dirigente del PAN en Sonora.