Halagüeño panorama para el campo sonorense: Julio Corona
Entrevista con Julio César Corona Valenzuela, secretario de Agricultura, Ganadería, Pesca y Acuacultura
Por Feliciano J. Espriella
“Las expectativas del campo sonorense para 2017 las siento positivas. El mercado de exportación se está fortaleciendo por condiciones obvias de paridad. Somos un estado muy competitivo en los mercados internacionales de exportación. Tenemos salud animal y sanidad vegetal que nos fortalece con muchos otros estados de la república y con muchas otras zonas de otros países”.
Lo anterior nos lo comentó el titular de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Pesca y Acuacultura (Sagarhpa) en el Estado, Julio César Corona Valenzuela, en entrevista exclusiva que nos concedió a Primera Plana. Un funcionario que indudablemente conoce bastante de los temas bajo su responsabilidad y evidentemente le entusiasma su trabajo.
Abundó en el tema:
“Tenemos productores muy comprometidos y muy profesionales. Tenemos una fortaleza en el nivel de organización de nuestros productores. Tenemos organizaciones fuertes gremiales y esas son plataformas muy claras de toma de decisiones que nos facilita mucho el trabajo como gobierno del estado, porque podemos acordar gremialmente con los productores y tomar decisiones. Eso nos hace avanzar a una mayor velocidad.
“Ciertamente también hay retos. Los mercados internacionales de los comodities no están en sus mejores niveles. Sin embargo tenemos que por un lado ordenar las cosechas y por el otro cubrir nuestros precios en la agricultura por contrato y coberturas con sistemas e instrumentos que ya tenemos.
“Creo que todos los años vamos a encontrar oportunidades y vamos a encontrar desventajas. Estimo que va a ser un buen año. Necesitamos estar atentos y en coordinación con los productores, para tener la mayor capacidad de velocidad de reacción ante cualquier cosa que suceda y poder sortear lo que venga. Sonora es un estado fuerte en el sector agropecuario y es un sector estratégico hacia el futuro, con visión global y de largo plazo, actuando en el hoy y en lo local”.
El campo, vocación ancestral del sonorense
Aunque sectores como el automotriz, el aeroespacial, la maquila y el turismo, entre otros, han tenido fuertes desarrollos en el presente siglo y su importancia en el contexto económico se ha incrementado sustancialmente, el corazón y la vocación del sonorense sigue muy ligado al campo, particularmente a la agricultura y la ganadería.
Además, Sonora ha sido durante más de medio siglo un gran productor de alimentos y muchos de los productos de nuestro campo mantienen un liderazgo en el contexto nacional desde décadas. Seguimos siendo una de las entidades que más aportan al suministro de víveres para todos los mexicanos y eso nos confiere un valor estratégico que nos distingue en el contexto nacional.
Secretario, ¿Cuál ha sido la estrategia que se ha seguido desde la dependencia a su cargo en la presente administración estatal para ser un apoyo eficaz para los productores agropecuarios de Sonora?
Lo primero que nos instruyó la gobernadora Claudia Pavlovich fue que las cosas las decidiéramos junto con los productores y lo primero que hicimos fue hacer un acercamiento con el sector. Recomponer las relaciones entre sector y gobierno.

Nos abocamos a caminar a lo largo y ancho del estado, estar con las organizaciones, sobre todo con los temas gremiales, platicar con ellos y retomar la rectoría del estado en el sector agropecuario, de cara a los diferentes sectores para poderlos potenciar.
Vimos tres áreas principales que fueron a las que nos abocamos. Son tres pilares o áreas de interés de los productores. Son los que explican que sean competitivos y sean productivos.
La primera vamos a llamarlo el área de capitalización, es donde vienen todos los activos que ellos crecen y generan para ser más competitivos en sus sectores. En ese sentido, hicimos una planeación de que es lo que teníamos que hacer para poder capitalizar más sus activos.
Por el otro lado están los estructurales, que les llamamos nosotros, que son lo que le da certidumbre a su quehacer, es decir lo que marcan las reglas del juego del sector agropecuario, ya sea de ámbito estatal o federal.
Y la tercera área son las de los bienes públicos. En los bienes públicos o de soporte como le llamamos nosotros es donde existen ciertas acciones que hacen el gobierno federal y el estatal para poder hacer más eficiente el quehacer agropecuario. Entiéndase investigación transferencia de tecnología, lo que es el tema de sanidades vegetales y animal. En esas tres áreas nos abocamos para poder empujar el sector agropecuario.
¿Cómo han apoyado a los productores en sus necesidades financieras en un año particularmente difícil como el presente?
Ciertamente la señora gobernadora ha sido gran gestora en todo esto y pudimos hacer acuerdo con la federación, para por un lado en concurrencia jalar alrededor de 400 millones de pesos operados por el estado y la federación para lo que es el sector agrícola, pesca y acuacultura.
Nos comentaban los mismos productores que había gente que nunca había recibido ningún tipo de apoyo, que no habían sido atendidos por algunos años, que no sabían realmente cómo se tomaban las decisiones.
Entonces, para poder hacer una caja de cristal, lo que hicimos fue formar reglas de calificación de los proyectos sin discrecionalidad de los técnicos. En la actividad agrícola pudimos atender casi el 80 por ciento de las solicitudes totales. Se priorizaron los que nunca habían recibido nada.
En el tema de sanidades bajamos recursos federales pero el estado también le puso recursos muy importantes, porque la sanidad, y lo saben los productores, es el principal activo que tenemos. Sonora exporta a alrededor de 20 países. Gran parte de los cultivos no llegarían a los mercados que se envían si no es por el tema sanitario y también lo fortalecimos.
En suma con lo que manejó el estado, los convenios que hicimos con la federación y los recursos que jalamos por gestión, anduvimos alrededor de 1,540 millones de pesos que transitaron a esas tres diferentes áreas, las cuales vinieron a soportar el qué hacer del sector agropecuario en Sonora.
¿Está perdiendo importancia en la economía sonorense el sector agropecuario? Antes se nos identificaba por nuestra ganadería y agricultura pero ante el importante desarrollo de otras actividades ¿no está perdiendo terreno el campo?
No, definitivamente. Hermosillo tiene un área agropecuaria muy importante que es la Costa, pero te sales de la capital y a lo mejor por ahí en Nogales y un par de municipios más, se ve otra cosa, pero lo demás es meramente agropecuario.
Fuera de estos municipios, donde tú te pares el tema es ganadero, es agrícola, o es integración de la agricultura con la ganadería o son los embalses de agua dulce, el tema de pesca, o son los litorales, pesca y acuacultura. Estamos en un estado agropecuario y también estamos en un estado con mucha población rural.
En los resultados lo vemos, y no lo vemos nosotros sino lo dice el Inegi, el sector agropecuario en Sonora en comparación al 2015 es uno de los sectores económicos más dinámicos.
Si lo comparamos a nivel nacional, el crecimiento de la economía anda entre un 2.0 y un 2.5% y el sector agroalimentario general oscila entre el 4.2 y 4.3%. En cambio en Sonora, según las últimas cifras, el sector agropecuario está creciendo alrededor del 9 % y ciertamente tiene una aceleración muy fuerte.
Somos un estado semidesértico y en ocasiones agricultores y ganaderos han tenido graves problemas por sequía. Ahora tenemos agua pero mañana no sabemos ¿Qué están haciendo al respecto?
En este tema tenemos un gran logro. Se realizó, por gestiones de la gobernadora, un acuerdo con José Calzada Rovirosa, titular de la Secretaría de Agricultura, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa), para avanzar en la tecnificación de riego.
Ciertamente el tema del agua agrícola es uno de los principales que tenemos en el estado. Se hizo un acuerdo y este año se van a tecnificar alrededor de 13 mil Hs, invirtiendo más de 200 millones de pesos. Prácticamente el 100% de las solicitudes calificadas como positivas fueron aprobadas, lamentablemente en algunas solicitudes se integraron mal los expedientes o tienen alguna deficiencia y no se van a poder apoyar.
¿Qué quiere decir esto? Se está tecnificando en el 2016, más en un solo año, de lo que se ha tecnificado en los últimos cinco años, y esto es un avance en una demanda también de los productores por generar cambios en sus unidades de producción, yéndose a la eficiencia y a la productividad.
Se critican los subsidios que se dan a los productores agropecuarios para que sigan produciendo, en virtud de que sus costos son superiores a los precios internacionales ¿No sería más económico importar los productos agrícolas?
No. Primero, ¿por qué los precios son bajos en los mercados internacionales? Sí, tienen que ver las demandas, los inventarios, las ofertas, claro que tienen que ver, pero también hay una distorsión en los apoyos que hacen otros países a sus agricultores y los comodities.
Sobre todo los comodities que cotizan los granos. Los extensivos, salen distorsionados a los mercados y eso le pega a los precios. Por eso los países tienen que compensar esas distorsiones y tienen que bajar las asimetrías que existen entre productores.
Aquí hay dos formas de pensar en el corto y en el largo plazo. En el corto plazo probablemente salga más barato importar que producir, sin embargo eso va a tener un costo que es el desmantelar la planta productiva porque el agricultor va a dejar de sembrar, pues sale más barato traer de otras partes.
Sin embargo en el largo plazo no. No lo digo yo, lo dicen los organismos internacionales. Para el 2050 la población va a pasar 9,500 millones de personas y según estudios de la FAO, para atender las necesidades de subsistencia de dicha población, el crecimiento en la producción de alimentos deberá ser de alrededor del 60%.
No se vislumbra cómo pueda lograrse ese crecimiento en la oferta, lo que significa que nos encaminamos a una carestía alimentaria.
Por ello los países invierten tanto en su agricultura doméstica. Viendo al futuro, alguien se va a quedar sin alimentos. Por eso los países invierten a su planta de producción doméstica, y a esto le llaman los distintos países al igual que en México, seguridad alimentaria.