Impone autogobierno pueblo michoacano
Inconformes con su Alcalde, el perredista Miguel Prado, pobladores del municipio indígena de Nahuatzen, Michoacán, decidieron desconocer a sus autoridades y designar su propio gobierno.
De acuerdo con documentos de la comunidad, signados ante notario, la decisión de imponer un autogobierno se determinó durante una asamblea comunal el pasado 4 de octubre.
La autoridad designada por los habitantes se compone de un Consejo Ciudadano integrado por ocho personas, dos por cada barrio que tiene Nahuatzen, replicando el camino que en 2010 siguió el pueblo de Cherán.
«(La asamblea es) con la finalidad de desconocer a las autoridades del H. Ayuntamiento de Nahuatzen, Michoacán, y proclamar un autogobierno», señala el acta levantada por el notario público número 104, Gustavo Herrera Equihua.
En el acto fueron designados como consejeros propietarios los ciudadanos Marco Antonio Velázquez, Luis Manuel Torres, Luis Mier Talavera y Enrique Capiz, con sus respectivos consejeros suplentes.
Además, también desconocieron al director de Seguridad Pública designado por el Edil, un sujeto al que identificaron con el apodo de «El Toro» y quien es acusado de supuestos vínculos con la delincuencia.
En su lugar, el Consejo Ciudadano nombró a Jorge Acuchi Rueda como su propio jefe de la policía, así como a cuatro «primeros comandantes», uno por cada barrio.
Según el acta notarial, en esa asamblea se acordó convocar a una sesión del Consejo Ciudadano el 11 de septiembre en el centro de la localidad.
«(En esa reunión se llevó a cabo) la legal instalación del Consejo Ciudadano como órgano de gobierno para iniciar las acciones correspondientes ante las instancias del ámbito local y federal para su reconocimiento, así como para la creación de reglamentos, manuales y bandos», dice el documento notarial.
Sin embargo, como el Edil se negó a entregar el poder, los pobladores iniciaron la semana pasada un plantón en el centro y la toma del Palacio Municipal.
El pasado domingo, encapuchados irrumpieron en el lugar y golpearon a algunos de los manifestantes, lo que derivó en la retención del síndico y una regidora, quienes horas después fueron liberados.
El miércoles, la violencia estalló nuevamente cuando policías antimotines ingresaron al pueblo para recuperar el Palacio Municipal, con saldo de una patrulla incendiada, varios golpeados y dos agentes retenidos.
Los manifestantes, armados con palos, mantenían hasta ayer varias barricadas en los accesos y calles de la localidad, así como al menos dos patrullas en su poder.
El movimiento exige la intervención del Gobierno del Estado para resolver el conflicto y que se destituya al Alcalde y a sus principales colaboradores.
REFORMA