Inicia Célida con una manera distinta de gobernar

La seguridad y los servicios públicos son las responsabilidades primordiales que deben atenderse desde las presidencias municipales, y es allí donde podría encontrar Célida López su talón de Aquiles
Por Feliciano J. Espriella
Después de cuatro semanas de ausencia, retomo mi espacio en este semanario esperando que el descanso, tanto el que me tomé como el que disfrutaron nuestros lectores haya sido de mutuo beneficio.
En el inter sucedieron acontecimientos muy relevantes, la transición de la LXI a la LXII Legislatura en el Congreso Local y el cambio de titular en los 72 ayuntamientos. Bueno, cambio en 65 municipios y continuidad en los siete en los que hubo reelección.
Aunque aún muy lejos de alcanzar la paridad de género en números absolutos, aumentó considerablemente el número de mujeres alcaldesas. Para el trienio 2018- 2021, en las presidencias municipales fueron electos 46 hombres y 26 mujeres y de los seis municipios con más de 100 mil habitantes que hay en Sonora, en tres serán mujeres sus presidentas municipales: Hermosillo con Célida López Cárdenas, Guaymas con Sara Valle y Navojoa con Rosario Quiroz.
Buenos resultados en el tema de la equidad, producto de la decisión de participar de una mayor cantidad de mujeres, pero sobre todo gracias al esfuerzo que se durante varios años vinieron haciendo distinguidas y valientes damas sonorenses para impulsar modificaciones legales que pusieran más parejo el piso entre hombres y mujeres en los procesos electorales. Felicitaciones, aunque todavía falta un buen trecho por recorrer.
En el caso de Hermosillo, Célida López Cárdenas, contra todos los pronósticos y encuestas derrotó a Ernesto de Lucas Hopkings, el gran favorito, a quien superó por más de 8,000 votos. Una gran victoria en la que sin duda alguna tuvo un fuerte impacto la llamada ola López Obrador, pero también por una muy buena campaña política que sin amilanarse por los pronósticos, realizó la hoy alcaldesa.
Una mujer inteligente, valiente y decidida
Desde su campaña política, Célida López Cárdenas hizo evidente que su gobierno, en caso de ganar las elecciones, sería diferente y lo está cumpliendo. Ha abierto espacios a la participación ciudadana y los nombramientos de las posiciones más importantes en el ayuntamiento, fueron producto de ello.
La alcaldesa es evidentemente una mujer inteligente, de carácter, con metas y valiente. No se puede negar que logra lo que se propone y enfrenta con decisión los obstáculos que se le presentan. Su salida del Partido Acción Nacional que la llevó a la posición actual es la mejor prueba.
Otra de las cosas diferentes que está haciendo López Cárdenas en el ejercicio de su mandato, es abrir un amplio abanico de oportunidades a la mujer en los puestos de primer nivel, a pesar de que cuando menos que yo recuerde, no fue una promesa de campaña.
A los nombramientos en importantes dependencias como son Agua de Hermosillo, la Dirección General de la Mujer, Contraloría y DIF Hermosillo entre otras, el pasado martes protestaron María Laso, como titular de la Promotora Inmobiliaria y Zoraida Mesina en Alumbrado Público.
Aunque con excepción de María Laso, las damas incorporadas a la administración municipal por la alcaldesa no son muy conocidas, cuentan según sus currículos, con preparación, capacidad y experiencia para desempeñar eficientemente las responsabilidades que les fueron conferidas.
En general la mayoría de los nombramientos han sido bien recibidos por la ciudadanía y avalados por los medios de comunicación, con una sola excepción, la de Edgard Sallard, para quien incluso se creó un nuevo puesto, sin que (según dicen los que dicen saber) tuviera facultades para ello.
Los miuras que tendrá que enfrentar
La seguridad y los servicios públicos son las responsabilidades primordiales que deben atenderse desde las presidencias municipales, y es allí donde podría encontrar Célida López su talón de Aquiles.
En el tema de la seguridad es muy improbable que se puedan lograr resultados tangibles en el corto plazo. El problema es sumamente complejo y no creo que haya soluciones mágicas.
Y en cuanto a los servicios públicos, iniciar con un retroceso como es el de reducir la frecuencia de la recolección de basura, en lo personal lo estimo riesgoso.
Dicen que no hay una segunda oportunidad de causar una buena primera impresión, y la primera impresión que va a tener la ciudadanía de su alcaldesa, es que sus casas se convertirán en acopios de basura, por medidas tomadas por ella.
Pocas familias tienen la manera de almacenar más cantidad de basura en sus hogares y la mayoría no tienen capacidad económica para adquirir más botes contendores. Además, quienes sí lo puedan hacer, al sacar el dinero de su cartera, seguramente recordarán y no de buena manera a su nueva alcaldesa.
No dudo que la situación financiera del municipio lo amerite, pero la reducción de la recolección de basura además de ser una medida necesaria y valiente, también me parece temeraria. El tiempo lo dirá.
Por hoy fue todo. Gracias por su tolerancia y hasta la próxima.