“Jóvenes Hermosillo” cumple con difícil misión: Ayudan a salir de las drogas

En la ciudad los muchachos se enganchan con el alcohol, la mariguana, pero el cristal es el que de plano los atrapa; “La depresión y la adicción son enfermedades silenciosas”
Por Miguel Gálvez
Ramsés M., integrante del grupo de autoayuda de Alcohólicos Anónimos división Juvenil explica a “Primera Plana” cómo las adicciones se presentan en los jóvenes hermosillenses y el nivel de afectación que pueden causar.
“Ahorita, en los jóvenes lo que está perjudicándolos desde las mentadas tachas hasta el cristal junto con la marihuana, pero lo que tiene a estos jóvenes atrapados, es el cristal”.
De inicio, “hay que entender que la adicción es una enfermedad”, definido por la Organización Mundial de la Salud (OMS), como una enfermedad emocional, física y con predisposición genética. Otras organizaciones como National Institute of Drug Abuse y la American Society of Addiction Medicine, que también definen la adicción en sus propios términos.
Sabiendo que es una enfermedad, platica Ramsés, es necesario la ayuda, para poder readaptarse a la sociedad, acudir a estos centros. “A mí me hubiese gustado encontrarme con un grupo a temprana edad y no haber perdido tanto tiempo”, lamentó.
Para identificar a una persona que está enferma de adicción, se logra notar en las actitudes, la rebeldía de los jóvenes como en los grupos sociales, en los amigos con los que se relaciona, muchas veces los padres se dan cuenta, pero se hacen de la vista gorda.
El origen de las adicciones se debe a distintos factores, desde situaciones familiares, sociales, de trabajo, en cualquier lugar se puede dar, así como las emociones influyen mucho en las decisiones de esta índole.
“Hay que observar dónde está el problema, el cómo viven en casa, ahí es donde se refleja el problema mayor mente. En mi caso, mi problema estaba en casa, el hecho de que mi mamá no viva conmigo y la rebeldía se me dio para empezar con las drogas, escapar de la realidad, arreglar los problemas”, detalló.
La enfermedad del alcoholismo es una enfermedad incurable, imposible y mortal, no hay un medicamento que la cure, explica. Son una enfermedad progresiva, que empieza con poquitas dosis, aumentando día tras día, el cuerpo te va pidiendo más, viéndolo cada vez normal, como también la enfermedad es emocional, altera mente cuerpo y emoción.
“Si te drogas es para sentirte feliz y olvidar esa emoción y de todas las cosas” describió Ramsés quien tuvo que pasar por una amarga experiencia en el mundo de las drogas que silenciosamente fue afectando su percepción.
“En mi caso personal, mi adicción me quitaba los problemas a tal grado que no se cuándo y dónde esto se me fue de las manos y empezaron los problemas en la escuela, mi alrededor y en la sociedad”.
“Personalmente fue a los 12 años cuando tuve contacto con esto, cuando yo le pare fue a los 19 años cuando fui a un grupo de Jóvenes Hermosillo de Alcohólicos Anónimos, ahí es donde se me ayudo a reintegrarme con la sociedad”. Los servicios de autoayuda son totalmente gratuitos, con una estancia voluntaria, ubicada en Calle Pitic, Edificio 52, departamento #99 en la colonia Fovissste, donde brinda la ayuda necesaria para poder contrarrestar esta enfermedad, la cual “no respeta niveles económicos, sociales, se presenta en todos lados”.