La bandera de Sonora Ciudadana, el combate a la impunidad: Leticia Cuesta

Por Imanol Caneyada /

Como comunicadora y periodista, cuenta con el respeto y la admiración de la comunidad; ya hace algunos años que desde las trincheras de la comunicación ha denunciado y criticado al sistema. Su reciente designación como directora de Sonora Ciudadana cayó de sorpresa a propios y extraños, teniendo en cuenta que apenas llevaba ocho meses en la organización.

Es Leticia Cuesta, la nueva directora de la organización civil con más solera en el estado; vehemente y apasionada, nos recibe en su oficina para charlar sobre el reto de llenar los zapatos de su antecesor, Guillermo Noriega, un referente en el activismo social en Sonora y en el país, y sobre los retos de la organización.

¿Y cómo te sientes con este gran desafío?

Me siento muy contenta, la verdad, muy animada, también con ese reto personal de hacer algo diferente pero dentro de lo que siempre he querido hacer; siempre me ha gustado ser un agente de cambio, siempre he sido crítica con el sistema. Esta vez se me presentó la oportunidad y no la pensé dos veces. Hace poco leía una frase, no recuerdo de quién, era mujer, que decía: mi gran reto es que siempre tomo el puesto que me parece imposible y lo he logrado. Es una barrera tuya interna la primera que tienes que vencer; sí es grande el reto, sí es pesado, pero así me siento, emocionada y con mucho trabajo por delante.

¿Cómo lo ha tomado el entorno?

Ha tenido una respuesta positiva, no he tenido ningún señalamiento hasta ahorita, tal vez porque yo trabajaba desde otra trinchera, pero me conocían y siempre he tenido buena aceptación pública, tanto entre colegas como entre los usuarios de las redes sociales, creo que aquí la gente identifica muy bien a quienes nos vamos involucrando en este tipo de asuntos, sea como periodistas o como activistas o como políticos, y más allá de las instituciones o partidos que representemos, conoce el prestigio de cada quién; en ese sentido, a pesar de no tener tantos años en esto, creo que tengo buena aceptación y buen perfil, al grado que Sonora Ciudadana se fijó en mí. Hasta ahora no he tenido ningún cuestionamiento, ni dentro ni fuera de la institución; es algo que medimos antes de tomar la decisión de lanzarme, un escenario que analizamos a fondo.

¿Cómo fue la elección?

La elección la realiza un Consejo local y uno Consejo nacional; también influye la opinión de las financiadoras internacionales que nos otorgan los recursos (Open Society Foundation y Hewlett Foundation); su recomendación es fundamental; para las financiadoras es muy preocupante las transiciones al interior de instituciones como la nuestra, cuidan mucho que la organización no se pierda, se corrompa, se desvirtúe, se venga abajo o se vaya por otro camino para la que fue creada. Por eso se les pone a su alcance los perfiles de los candidatos, los pros y los contras de cada uno y ellos emiten recomendaciones y orientan en el proceso de elección. Guillermo (Noriega) tenía ya tres años preparando su salida pues iba a cumplir 10 años al frente y eso no es bueno, ni está bien visto por el Consejo ni las financiadoras, pues no les gustan las organizaciones unipersonales. Ya era el tiempo de un cambio en el organismo.

Un sonorense, Álvaro Obregón, decía que nadie resiste un cañonazo de 50 mil pesos; ¿y tú?

Jajajaja, sí, claro, lo tengo que resistir, la razón de ser de Sonora Ciudadana es ésa, servir a la ciudadanía, ser una organización imparcial, un contrapeso; nosotros también somos un ente susceptible de ser fiscalizado por lo que tenemos una enorme responsabilidad en ese sentido.

Sonora Ciudadana ha emprendido grandes batallas y ha tenido grandes logros, como el monitoreo legislativo y la rebelión de los enfermos. ¿Cuál es la nueva agenda?

Continuar con el tema de transparencia y acceso a la información, que es lo que hemos trabajado hasta últimas fechas; ahora hay que trabajar en la creación de más ciudadanía, encaminarse hacia la exigencia de la rendición de cuentas y la lucha contra la impunidad. Ya no es suficiente que nos transparenten los recursos públicos, ahora queremos que rindan cuentas sobre cómo utilizan los gobernantes los presupuestos, por qué los vas a invertir aquí o allá, cuándo y cómo, y es algo a lo que los gobernantes están resistiéndose mucho. Hay una resistencia total, porque eso tiene que ver con la toma de decisiones; si un gobernante tomó la decisión de usar determinado recurso en algo y de repente lo cambia, bueno, tenemos derecho a saber por qué tomaron esa decisión, de qué manera beneficia a la población, cuál es el impacto del uso de este presupuesto, esto, independientemente de la corrupción descarada y el robo. Necesitamos crear un frente de exigencia de que tienen que rendir cuentas sobre ese dinero que la ciudadanía les confió para gobernar. Cuando anuncian, por ejemplo, que se invertirán 180 millones de pesos en los municipios; bueno, deben explicar cómo va a hacerse llegar ese recurso, cuánto tiempo tienen los municipios para ejercerlo, qué partidas y fondos usaron o afectaron para ello, qué obras van a llevar a cabo y en cuánto tiempo… eso es la rendición de cuentas, eso es nuestro gran reto.

Entiendo entonces que, mientras que en transparencia ha habido avances, en el tema de rendición de cuentas estamos en pañales.

Totalmente, si no es que menos que en pañales. Vemos cómo cada año los recursos se desvían de uno a otro programa, o hay déficit presupuestal, cuando tenían calculado el egreso conforme al ingreso presupuestado; todo esto tiene que ver con las decisiones que toman los gobernantes, sobre las cuales están obligados a rendir cuentas; el gran reto de Sonora Ciudadana ahora es desarrollar los mecanismos para esa rendición de cuentas. Por eso es clave que aumente la participación ciudadana a través de comités y consejos, los cuales los contempla la ley, el problema es que ninguna de estas figuras está vinculada a la toma de decisiones. Ya no queremos que los gobernantes usen la palabra ciudadanía a modo, nada más están desgastando y desfigurando su contenido.

¿Como el recién formado Comité Ciudadano para la Seguridad en Hermosillo?

Ése es un caso. No hubo claridad en el proceso de elección, no se dieron a conocer los mecanismos de selección, no hubo una convocatoria abierta, no sabemos si los perfiles son los adecuados, si hay expertos en el tema de seguridad, si van a ser críticos con las decisiones del presidente municipal. Por ello creo que los gobiernos están desgastando la figura de la transparencia y de ciudadanía, por ello debemos centrarnos en que la ciudadanización en la toma de decisiones sea real.

Esta táctica los gobiernos la han utilizado mucho en nuestro país, la de simular, aparentar, hacer como, pervertir iniciativas originalmente ciudadanas y partidizarlas, etcétera.

Totalmente. Es un problema muy serio que tenemos, este consejo es un ejemplo de ello. Pero me queda claro que la gente debe empoderarse, participar en la vida pública, tanto virtual como realmente, y que la acción en las redes sociales sea vinculante, organizada; cuanto más gente se involucre, los gobernantes tendrán más en cuenta la opinión de los ciudadanos. En ese sentido, Sonora Ciudadana debe crecer al resto del estado, capitalizar y capacitar a los talentos existentes en otras ciudades del estado, a líderes que puedan replicar organizaciones como ésta que trabajan con planeación y de forma organizada. Este es un reto muy personal que espero alcanzar pronto.

Ya para terminar, el otro gran reto que dices tener en tu nueva tarea es el del combate a la impunidad, el gran cáncer que nos consume.

Sonora Ciudadana pertenece a una red de muchas organizaciones civiles de todo el país, y tenemos muy claro todas ellas que nuestra principal agenda debe ser el combate a la impunidad. Tenemos claro que mientras haya impunidad, no podemos acabar con la corrupción. Todas estas organizaciones, incluida Sonora Ciudadana, estamos armando una propuesta integral, muy grande, y va a ser nuestra bandera; es muy difícil, es muy duro, pero la única forma de acabar con esto es entrar a las entrañas del sistema, el combate a la impunidad va a ser la constante de todas las organizaciones civiles, es el único camino para acabar con la corrupción, no hay más.