
Por Francisco Javier Ruiz Quirrín
EL TÍTULO DE una vieja canción del dueto Simon y Garfunkel, nos acompaña en la realidad que se vive ahora en Sonora con el abandono de una sociedad a su derecho de exigir del gobierno, políticas públicas que le protejan de la tremenda violencia causante de tanta muerte violenta.
El asesinato de tres niñas y de su madre en Hermosillo nos invita a continuar con las reflexiones acerca de lo que debe ser y simplemente, no es. La obligación primordial del Estado es garantizar la paz y la tranquilidad de la población y resulta más que evidente que dicho propósito se ha enviado al olvido.
Los constantes asesinatos en Ciudad Obregón, la considerada “zona de guerra” en la región de Caborca y sus alrededores, la inseguridad para viajar a la sierra sonorense y la imparable violencia en San Luis Río Colorado, han logrado que para el gobierno, la capacidad de asombro haya desaparecido y que todo haya quedado en las cifras.
Ante este escenario, quien puede obligar a la autoridad a actuar de manera efectiva, es la sociedad. Es una verdadera tristeza observar que un acontecimiento en verdad inédito como es el quitar la vida a tres pequeñas, pase al olvido al transcurrir las semanas y que las cosas continúen igual, quizá esperando a la llegada de una tragedia más.
¿Cómo puede comenzar la sociedad a participar de manera abierta en recordar a la autoridad la obligación que tiene de cumplir y hacer cumplir la Ley? ¿Qué le parece fomentar la cultura de la denuncia e incluso, difundir cuando sea el caso, la ineficiencias del 911 ante las tardanzas en sus respuestas?
Ante los registros de llamadas telefónicas al número de emergencias para denunciar –por ejemplo-, violencia intrafamiliar, ¿cuántos de estos casos no trascienden por el silencio de las víctimas?
Y es que detrás de cada acto violento, de cada asesinato, hay una historia de acoso y violencia que al no detenerse, se acerca mucho más a convertirse en una agresión, en ocasiones irremediable para quien por temor, no se atrevió a denunciar.
¿Cómo saber si la madre de esas tres niñas a las que les quitaron violentamente la vida, había interpuesto una denuncia por violencia intrafamiliar? ¿Quién nos lo puede informar ahora, ya con los trágicos hechos consumados? ¿Algún familiar? ¿Algún vecino? ¿Se animarán a sabiendas de que podrían verse involucrados? La respuesta es el silencio.
La Fiscalía General de Justicia ha informado que tiene tras las rejas al responsable de los homicidios, identificado como la pareja de la madre de las niñas. Preguntas, ¿Ahí quedará todo? ¿No buscará el gobierno aplicar políticas públicas más eficaces para evitar que ese tipo de tragedias continúen presentándose? ¿Y la sociedad olvidará pronto la tragedia y ofrecerá como lo ha hecho, el silencio por respuesta?
Ante todo eso, lo único que podemos esperar es que la degradación social que ya se vive, siga su camino sin que nadie la pueda detener.
Y esto último sucederá porque la consciencia social y sobre todo, las instituciones obligadas a manifestarse como las organizaciones opositoras al partido que gobierna y las iglesias, también están ofreciendo cómodamente su mejor respuesta: el silencio.
EL LLAMADO “Grupo Integración”, inspirado en el gabinete e invitados especiales alrededor de la administración municipal en Hermosillo, sostuvo su tercera reunión anual, en una conocida finca en Ures, los días viernes y sábado pasados… El propósito es aportar ideas, intercambiar contactos, dar seguimiento a proyectos expuestos con anterioridad y más allá de eso, enviar el mensaje de una agrupación que busca convocar a la unidad… Cual debe, esta vez la reunión estuvo presidida por el alcalde Antonio Astiazarán Gutiérrez y asistieron alrededor de 200 personas… La ocasión fue especial porque estuvieron presentes los dirigentes del PAN, Gildardo Real Ramírez, del PRI, Lupita Soto Holguín, así como los dirigentes del Partido Sonorense y el Partido de la Revolución Democrática… Sin duda, se buscó ahora acuerpar al presidente municipal de Hermosillo en su objetivo de buscar la unidad de los opositores a MORENA con rumbo al 2027.
NO SOLO eso, el pasado domingo, Astiazarán Gutiérrez asistió a la fiesta con la que se celebró el cumpleaños del dirigente nacional del partido Movimiento Ciudadano, Jorge Álvarez Máynez, a la que también fueron Natalia Rivera, Manuel Scott y Ernesto de Lucas Hopkins, mejor conocido por sus amigos como “El Pato”… El camino se está trazando en Sonora alrededor del alcalde De Hermosillo…