Max va por gusto a manejar Nürburgring, como novato

Por Manuel Gutiérrez
Para los que creen que Max Verstappen ha sepultado sus operaciones en este campeonato de F-1, hará bien en observar lo realizado por el campeón en Monza. El prodigioso récord de más veloz en esa catedral, el haber ganado la prueba imponiéndose con una ventaja formidable en términos de F-1, de 22 segundos sobre los favoritos de McLaren cuando tenía cuatro fechas sin obtener podios.
Max incluso se burló en charla en plena carrera con su ingeniero, de la decisión de los directivos de McLaren, de ceder a Lando Norris, el sitio que tenía Oscar Piastri, para compensar los errores de pits, algo absurdo que sorprendió y abrió la mancha de favoritismo del equipo para el piloto inglés en lugar del australiano, sin considerar la posición de Piastri en el campeonato mundial lo que expone por la forma de intentar ganar a esa ambición. Zak Brown, otra vez es Zak Brown.
Por la forma en que ganó Max, dejó en claro que en Bakú, no va a regalar nada y que el RB puede quedar a punto, sin tantas exigencias aerodinámicas, para obtener un buen resultado.
Si Max logra otra victoria, el campeonato que sintió el equipo papaya en el bolsillo, pueden comprometerse con alternativas matemáticas y Max, no deja de agotar ninguna posibilidad, todo dependerá del resultado de Bakú. El principal riesgo es que Max es un cazador incluso solitario capaz de dar todo individualmente.
El piloto de los Países Bajos con los blasones necesarios para ser reconocido en cualquier categoría y actividad automovilística, “descendió” de su torre campeona de la F-1 para tomar un curso de principiante en la Nordschleife o anillo norte, el circuito largo de 20.887 kilómetros que se usa para las 24 Horas de Nürburgring, circuito agosto angosto, una carretera normal, con desniveles y cambios de superficie, pero hay datos que puede alcanzar los 26,002 kilómetros en su totalidad, integrado por carreteras de uso en Alemania.
El circuito de Gran Premio, es de 5.1 kilómetros, se usa en DTM (Gran Turismo Alemán) y en la posibilidad de albergar F-1 (que la rechaza por estimarla de alto riesgo) o en circuito especial carreras de motociclismo.
Es un reino de autos deportivos y súper deportivos, que en el caso de BMW puede gestionarse con 8 minutos y 15 segundos por vuelta, logrado con el 1M Coupe, que curiosamente superó el tiempo del M-3. La disputa por tener esta marca como en Nardo, Monza, Imola, Jarama, LeMans, nunca termina, pero este circuito por su geografía es especial.
Unas 24 horas significan para un equipo por tanto representan un esfuerzo máximo de correr a fondo en etapas de 4 horas, en la carrera de Endurance Series (resistencia) en que obligaron a Max a seguir los pasos de un principiante. Tuvo que seguir incluso un auto insignia tripulado por pilotos expertos en el circuito antes de dejarlo correr con su equipo.
Este lugar fue el escenario del accidente muy peligroso de Niki Lauda en que sufrió daños pulmonares y quemaduras, en 1976 en F-1. Alemania lo suple con el circuito de Hockenheim.
Desde 1927 este circuito mítico ha ocasionado 127 muertes y múltiples accidentes. Un choque entre el Aston Martin y un Porsche, que se desbarataron sin que los conductores sufrieran lesiones, es el más reciente y llamó la atención por lo costoso que fue.
Los conductores aficionados que cumplen los requisitos y que poseen autos de gran poder buscan este lugar para probarse, aunque la responsabilidad de un piloto que cause un accidente, puede generar pagos de gastos de asistencia, así como de daños a la pista.
La pista en su tiene exigencias técnicas altas para los conductores, por lo que los errores, excesos o titubeos pueden generar una pesadilla, lo mismo que una estrategia inadecuada para adelantarse, dado que se combinan autos como un Porsche GT3 RS, Ferraris, Lambos, Aston y toda clase de superautos, contra vehículos de menor rendimiento, por lo que la concentración por menguar un momento, puede ser mortal.
Por lo tanto, ¿Qué fue a buscar Max cuatro veces campeón de la F-1 a ese lugar?
Fue a buscar y encontró la verdad del automovilismo, el gusto y la pasión, el desafió que supone manejar en condiciones cambiantes, seco, lluvia y manejar noche y día, amplifica el sentido de esta prueba, que puede considerarse un Le Mans alemán, pero más peligroso todavía.
Max obtuvo con su séptimo lugar logrado con un Porche Cayman 718, con solamente 300 caballos, mejores resultados que competidores que tuvieron motores con 435 caballos entre 19 competidores de una competencia de resistencia.
Para Max, fue una prueba relajante, sin nervios, sin presiones, el gusto de correr y mostrarse a sí mismo sus reales capacidades, para poder correr luego en la prueba infernal de 24 Horas en algún equipo. Para el holandés fue un fin de semana de “descanso” porque ama conducir a altas velocidades y se relaja al hacerlo, sin compromisos.
Los pilotos de F-1 en sus tiempos libres realizan actividades diversas, los hay que hacen ciclismo, como Leclerc que hace también natación a mar abierto; otros la pasan en sesiones de gimnasio, y algunos en tiempos invernales hacen esquí, como gustaba hacerlo Michel Schumacher. Algunos juegan futbol.
Como sea no deja de haber la posibilidad de un accidente, por lo que la F1 es muy severa en los entretenimientos de su veintena de ases, porque un F1 pone siempre el listón más alto dado que son atletas de alto rendimiento.
Conducir en la F1 supone una condición física y mental, y una capacidad de concentración superior que te da acceso a superlicencias como en Indy. Un conductor aún con experiencia deportiva que pretenda manejar un bólido de la máxima categoría como un F1 sin la preparación adecuada se expone a un desastre en todos los sentidos.
Es una preparación y vocación de vida, que se expresa en ese deporte.