Peña Nieto entrega premio Carlos Fuentes a Sergio Ramírez
El presidente de México, Enrique peña Nieto, entregó el lunes el Premio Internacional Carlos Fuentes a la creación literaria en idioma español al escritor nicaragüense Sergio Ramírez Mercado.
«Es un premio que pesa 10 kilos. Es pesado, para dejar constancia del peso de la obra de quien recibe el premio», dijo Peña Nieto, que ha sido cuestionado en el pasado por su escasa formación en materia literaria, poco después de fundirse en un abrazo con el escritor nicaragüense.
El premio, que tuvo su primera edición en 2012 y se entrega con carácter bianual, fue otorgado previamente al peruano Mario Vargas Llosa.
Peña Nieto glosó la figura de Ramírez, nacido en Masaya, Nicaragua, en 1942 y nominado al premio por la Fundación para el Nuevo Periodismo Iberoamericano. El presidente mexicano recordó que el premiado fue líder y vicepresidente de la Nicaragua sandinista durante la década de los 80 e hizo hincapié en su contribución a la política y la revolución así como a la literatura en español.
«La obra de nuestro galardonado es heredera del realismo mágico y del boom latinoamericano», dijo Peña Nieto, que estuvo en el centro de una fuerte polémica cuando visitó, aún como candidato presidencial, la Feria Internacional del Libro de Guadalajara y a preguntas de un corresponsal extranjero no fue capaz de señalar tres libros que le habían marcado como político y persona.
En su discurso de recepción del galardón, Ramírez, cuyas obras más reconocidas son la novela «Margarita, está linda la mar», de 1998 y la autobiográfica «Adiós Muchachos», publicada en 1999, recordó que escritores e intelectuales deben implicarse en la realidad que les ha tocado vivir.
El escritor, que ha recibido con anterioridad galardones como la Orden de las Artes y las Letras de la República Francesa, el José Donoso o el premio Casa de las Américas, señaló que «la historia debe estar sometida a una revisión crítica incesante. Enfrentarla y juzgarla, nunca quedarse como testigo pasivo», dijo Ramírez quien evitó cualquier referencia a la compleja realidad que vive el país que le premia.
«Las viejas parcas se visten hoy de sicarios», señaló, para referirse después a la historia de América Latina como una «anormalidad permanente» y proponer que para que el continente pueda entrar en el siglo XXI «debe dejar atrás el siglo XIX»
Los novelistas «somos testigos de cargo», dijo el galardonado, cuyo trabajo es «levantar piedras». No es su culpa, del novelista, «si bajo las piedras aparecen monstruos».
Durante la ceremonia estuvo presente la viuda de Fuentes, Silvia Lemus, quien se mostró animada saludando a la concurrencia junto a Ramírez.
Tanto Enrique Peña Nieto como Rafael Tovar y de Teresa, Presidente del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, aprovecharon la entrega del premio a Ramírez para resaltar «la importancia de respaldar a nuestra democracia y sus instituciones», dijo el Presidente.
También felicitaron a los cineastas mexicanos Alejandro González Iñárritu y Emmanuel Lubezki, triunfadores en la gala de los Oscar celebrada el domingo en Los Ángeles pese a la polémica levantada por el director.
Iñárritu dijo ante millones de espectadores que veían los premios de Hollywood: «rezo porque podamos encontrar y construir el gobierno que merecemos».
La frase comenzó de inmediato a ser interpretada por varios como una crítica al gobierno de Peña Nieto, que ha sido blanco de críticas en los últimos meses por casos como la desaparición de 43 estudiantes de magisterio y escándalos de presunto conflicto de interés por compra de viviendas de lujo a contratistas de su administración.
AP