El más repudiado de los nombramientos

Hay quienes ven detrás del nombramiento de Barttlet una astuta estrategia de AMLO para neutralizar al poderoso sindicato de la CFE

Por Feliciano J. Espriella

El pasado viernes Andrés Manuel López Obrador ofreció una rueda de prensa para anunciar proyectos en materia energética, además de confirmar la llegada de Manuel Barttlet Díaz a la CFE y una inversión de 75 mil mdp en proyectos petroleros.

De entonces a la fecha tanto al presidente electo como al futuro director de CFE les ha llovido en sus milpitas. Y a cántaros. Ésta, es sin duda la más polémica y repudiada designación que ha hecho el tabasqueño, incluyendo las candidaturas de Napoleón Gómez Urrutia y Nestora Salgado.

Bartlett Díaz, a pesar de que salió del PRI hace ya varios lustros y en su vida pública ha evidenciado una ideología de izquierda, continúa en la mente de los mexicanos como el artífice del mayor fraude electoral que se haya orquestado en el país. Estigma que lo ha acompañado en la multitud de importantes cargos públicos que ha desempeñado posteriormente y que seguramente lo seguirá hasta el último de sus días.

Es visto además, como uno de los más connotados símbolos de corrupción en el país.

El hombre que calló al sistema

Desde que sucedió hace 30 años, en el año de 1988, Manuel Bartlett quedó indeleblemente ligado a la famosa “caída” del sistema que presumiblemente ocultó el fraude electoral en contra de Cuauhtémoc Cárdenas.

En varias ocasiones el controvertido personaje se ha referido al acontecimiento para negar que él haya argumentado supuestas fallas técnicas en los equipos que compilaban la información para ocultar lo que sucedía.

En realidad, afirma el Senador, que el entonces presidente Miguel de la Madrid le pidió no dar información la noche de la elección, ya que si se oficializaba en ese momento —con datos parciales— que Cárdenas Solórzano iba ganando, al final nadie aceptaría un resultado distinto.

Entonces no se cayó el sistema, Bartlett lo calló.

Sin embargo y parafraseando a otro de nuestros ínclitos personajes, haiga sido como haiga sido, a partir del próximo 1 de diciembre, Manuel Bartlett será ungido como Director de la paraestatal Comisión Federal de Electricidad (CFE)

¿Qué busca AMLO con esta designación?

Como sucede siempre con las decisiones controversiales de las figuras públicas, han surgido multitud de hipótesis para tratar de entender qué hay detrás de este nombramiento, las cuales van desde el pago por méritos en campaña a posibles contubernios con fines inconfesables.

Se le ha criticado mucho por su desconocimiento técnico y no tener experiencia en el sector energético, sin embargo, uno de sus antecesores, Enrique Ochoa Reza, cojeaba del mismo pie y no acabó con la paraestatal.

Hay quienes ven detrás del nombramiento una astuta estrategia de AMLO para neutralizar al poderoso sindicato de la CFE, el cual ha sido en múltiples ocasiones señalado como corrupto.

La realidad es que el tabasqueño es de sobra conocido que no da paso con huarache y hoy por hoy la monopólica paraestatal es enormemente deficitaria. En el presente año ha registrado pérdidas en el primer semestre por el orden de 39 mil 864 mdp.

Los Clouthier también lo rechazan

En las mencionadas elecciones presuntamente fraudulentas del 88, además de Cuauhtémoc Cárdenas contendió Manuel “Maquío” Clouthier por la Presidencia de la República. Es por la tanto comprensible y natural que a sus descendientes el apellido Bartlett les duela más que un puñetazo en el estómago.

Primero Tatiana Clouthier, integrante del equipo de transición de López Obrador, declaró que había mejores opciones que Bartlett para la CFE. En realidad fue bastante mesurada. Por su parte, Andrés Manuel salió en defensa de Bartlett, señaló que respetaba la opinión de Tatiana pero que no la compartía.

Al siguiente día su hermano, el ex candidato independiente al Senado, Manuel Jesús Clouthier Carrillo, manifestó su molestia por la decisión de Andrés Manuel López Obrador, de colocar en la dirección general de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) al expriista Manuel Bartlett, señalado por el supuesto fraude en las elecciones presidenciales de 1988.

El independiente arremetió contra Bartlett Díaz. En su cuenta de Twitter publicó “Pinche viejo decrépito tanto chingó a mi padre, a la democracia y al país, que ahora no puedo chingarlo yo señalando sus verdades y atrocidades porque se enojan los chairos! Como llegamos a esto???”.

Será el sereno, pero conforme se acerca la fecha de la toma de posesión, algunos nombramientos siembran dudas sobre si el siguiente gobierno federal será en verdad la cuarta transformación de México o se hundirá en la ineficacia.

Se ha dicho hasta la saciedad de Andrés Manuel López Obrador que lo más inquietante son sus acompañantes, entre los que hay muchos de dudosa reputación, otros de reputación conocida y muchos más, de ineficiencia y desconocimiento probados. Bartlett encaja en varios de estos calificativos.

Por hoy fue todo. Gracias por su tolerancia y hasta la próxima.