Acabaron las campañas… virtualmente
El pasado martes se realizó el último debate entre los candidatos a la Presidencia de la República. Era la oportunidad para que al igual que los boxeadores cuando llevan perdida la pelea, los abajeños se tiraran a matar o morir, pero no sucedió
Por Feliciano J. Espriella
Con el inicio del campeonato mundial de futbol Rusia 2018 el día de ayer, el interés de la inmensa mayoría de los mexicanos se orientará al desarrollo del evento y las campañas políticas pasarán a un segundo plano.
El mayor interés del pueblo mexicano por lo menos de aquí hasta el próximo miércoles 27 (fecha en que terminarán los actos de campaña) será en los partidos de nuestra selección y su eventual pase a la siguiente ronda.
El TRI debuta el próximo domingo, fecha que en México festejaremos el Día del Padre. El primer partido será contra el actual campeón Alemania, para enfrentar después a la República de Korea y finalizará contra la selección de Suecia.
Si según estiman los analistas deportivos, gurús y sobre todo el optimista pueblo mexicano la selección mexicana brinca el primer obstáculo y pasa a octavos de final, lo más probable será que se enfrente el 03 de julio nada más y nada menos que contra el favorito para ganar el Mundial Moscú 2018, Brasil. Del anhelado 5º partido mejor ni especulamos. Me parece que será hasta Katar 2022.
De cualquier manera, el 4º partido sería después de pasados los comicios, para los cuales, los momios favorecen muy ampliamente a quien se colocó de puntero desde el inicio de la contienda, quién, contrariamente a lo que suele suceder en los procesos electorales, no sólo se mantuvo, sino que semana a semana fue incrementando su ventaja.
El último tren fue el debate del martes y los abajeños lo perdieron
El pasado martes se realizó en Mérida, Yucatán el tercer y último debate entre los candidatos a la Presidencia de la República organizado por el INE. Creo que era la oportunidad para que al igual que los boxeadores cuando llevan perdida la pelea, los abajeños se tiraran a matar o morir, pero no sucedió.
El evento fue casi tan lite como los dos anteriores y ni siquiera hubo ocurrencias como la de mochar manos o proteger la cartera.
Dados los acontecimientos de los días anteriores en que circuló un video sobre la relación de Ricardo Anaya con los Barreiro y las acciones de lavado de dinero que supuestamente realizaron para apoyo de la campaña del candidato de la Coalición por México al Frente, muchos esperábamos que José Antonio Meade se le fuera a la yugular. Pero no, fuera de un débil manotazo que en el peor de los casos sólo le hizo un ligero rasguñito, se dedicó más que todo a atacar de nuevo a López Obrador.
¡Qué extraño! A estas alturas de la contienda, Meade ya debería saber de sobra que todo el lodo que le avientan al candidato de la Coalición Juntos Haremos Historia le hace lo que el viento a Juárez. En cambio a Anaya lo hubiera agarrado medio atarantado por los mandarriazos que le habían asestado los días anteriores y tal vez lo hubiera mandado a la lona para desplazarlo de la segunda posición.
De hecho Anaya le envió mucha más metralla y fue mucho más contundente, a pesar de que estaba evidentemente nervioso, molesto y no se veía que las traía todas consigo. Lo llamó abiertamente corrupto y lo amenazó con enviarlo a la cárcel junto a su jefe el presidente Peña Nieto.
Meade en picada y Anaya a punto del Knock Out
La tónica de la campaña de José Antonio Meade ha sido muy ambigua. En realidad han sido muy pocos los aciertos y muchas, muchísimas las pifias. La del último debate me parece que fue una más.
Los resultados saltan a la vista, ha venido paulatinamente cayendo en las intenciones del voto y a la fecha según la gran mayoría de las encuestas se encuentra como a 30 puntos de López Obrador. En términos de votos estaríamos hablando de alrededor de 20 millones, distancia al parecer insalvable cuando quedan sólo dos semanas de campaña.
Y en cuanto a Ricardo Anaya quien al parecer ya no siente lo duro sino lo tupido, si no logra desembarazarse pronto de las acusaciones de los últimos videos, es muy probable que caiga hasta el tercer lugar, con las implicaciones colaterales en cuanto al desplome de muchas candidaturas tanto del PAN como del PRD. No incluyo a MC porque el partido propiedad de Dante Delgado ha procurado mantenerse a una sana distancia de las acciones de la Coalición y los otros dos partidos políticos.
A 15 días de los comicios, una contundente victoria de Morena se avizora irreversible, no sólo de la Presidencia de la República, sino en seis de las nueve gubernaturas que se disputan, en las Cámaras de Diputados y Senadores, congresos locales y un buen puñado de alcaldías.
¿Qué pasará con el PRI y el PAN después de los comicios? Quién sabe, pero el panorama luce poco menos que aterrador para ambos partidos.
Nos quedan pocos días para salir de dudas.
Por hoy fue todo. Gracias por su tolerancia y hasta la próxima.