GeneralPrincipales

Cancelación del Programa de Mantenimiento de Carreteras en México

¿Cómo puede existir una voluntad general única producida por voluntades individuales distintas?
¿Cómo puede existir una voluntad general única producida por voluntades individuales distintas?

Mientras que el gobierno argumenta que busca combatir la corrupción, el sector de la ingeniería civil y la construcción advierten sobre las posibles consecuencias negativas en la calidad de la infraestructura

 

Por Guillermo Moreno Ríos

En un movimiento sorpresivo, el Gobierno de México ha decidido cancelar el programa de mantenimiento y conservación de carreteras federales, lo que ha generado una serie de preocupaciones y reacciones tanto en el sector de la ingeniería civil como en la sociedad en general.

La Federación Mexicana de Colegios de Ingenieros Civiles (FEMCIC) expresó su alarma por la cancelación de más de 500 licitaciones de obras de mantenimiento de carreteras por parte de la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT). Esta decisión, tomada en conjunto con la reserva de los 11,000 millones de pesos destinados a este fin, ha provocado inquietud debido a las graves consecuencias que implica la falta de mantenimiento en la infraestructura carretera del país.

La FEMCIC ha instado a las autoridades competentes a retomar los procesos de licitaciones y contratos para realizar las obras necesarias, conforme a la ley de obras públicas y servicios relacionados. Argumentan que la cancelación de estas licitaciones no solo pone en riesgo miles de empleos, sino que también amenaza el adecuado funcionamiento de la infraestructura, lo que impacta en la calidad de vida de las personas y en los índices de bienestar social.

La Sociedad Mexicana de Ingenieros también ha manifestado su preocupación, resaltando que esta decisión implica la detención de 380 proyectos de obras públicas. Consideran que se trata de un recorte de gasto por capricho del gobierno, lo que podría tener efectos negativos en la economía y en la infraestructura del país.

Además, la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) se ha sumado a las voces de preocupación. Representando a más de nueve mil empresas del sector, la CMIC ha destacado que la cancelación del programa de mantenimiento agrava la falta de inversión y conservación de las vialidades, situación que ya venía deteriorándose en los últimos años. Advierten que una red de carreteras en mal estado no solo incrementa los costos de transporte y reduce la eficiencia logística, sino que también afecta la seguridad vial y disminuye la atracción de inversiones, tanto nacionales como extranjeras.

En respuesta a esta situación, el presidente Andrés Manuel López Obrador asignó a la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) el mantenimiento de las carreteras federales. Esta medida, según el presidente, busca combatir la corrupción y optimizar los recursos, ya que las fuerzas armadas incrementarán su participación en tareas de infraestructura en el país. Sin embargo, esta acción ha generado críticas y preocupaciones por la cada vez mayor participación del ejército en tareas de construcción e infraestructura pública.

En resumen, la cancelación del programa de mantenimiento de carreteras y la asignación de esta tarea a la SEDENA ha generado una serie de preocupaciones y reacciones encontradas. Mientras que el gobierno argumenta que esta medida busca combatir la corrupción y optimizar los recursos, el sector de la ingeniería civil y la construcción advierten sobre las posibles consecuencias negativas en la calidad de la infraestructura y el empleo. La situación continúa en desarrollo, y será importante monitorear cómo evolucionan estas decisiones y su impacto en el país a largo plazo.

Como Consejo Integrador de la Construcción, la Industria y el Desarrollo (INCIDE) nos es latente el sentir de las organizaciones gremiales en donde sus posicionamientos, con grandes dosis de verdad, pero sin querer tapar el sol con un dedo al tocar el tema de la corrupción que tantas veces hemos mencionado en estos artículos y que nosotros como miembros de este sector, hemos visto de cerca y que si, tanto afecta a nuestro país, sin dejar de mencionar y como ciudadanos hemos padecido el mal estado de las carreteras y no de pocos años para acá .

No podemos también dejar de reconocer que la ingeniería militar tiene capacidad para esto, no, no se discute, pero lo que sí es imperativo es poder llegar a una solución que brinde lo que todos los profesionistas, empresarios y sociedad pedimos, trabajo, no se puede dejar a la deriva a miles de trabajadores, deben de existir otras soluciones menos radicales para darle solución al desarrollo, oportunidades a jóvenes profesionistas y acabar con la corrupción.

La corrupción es como la rabia, pero no debe ser tratada igual.