Célida hace a un lado el Naranja y el reglamento
Por Javier Flores
Los dos camiones recolectores de basura donados al Ayuntamiento de Hermosillo generaron polémica entre los hermosillenses, luego de que se exhibiera en redes sociales las fotografías de las nuevas unidades, las cuales fueron rotuladas con colores alusivos al partido Morena, violando el Acuerdo por el cual se institucionalizó como Naranja el color oficial de Hermosillo.
El Acuerdo, fue aprobado el 15 de agosto del 2009 en sesión de Cabildo y publicado en el Boletín Oficial el 7 de septiembre de ese mismo año.
El artículo del Acuerdo 2o apunta:
“El Ayuntamiento de Hermosillo, las Dependencias y Entidades de la Administración Pública Municipal, utilizarán el color naranja en la papelería oficial del Ayuntamiento; en la señalización y dispositivos de tránsito; en señalamientos de áreas deportivas, juegos infantiles y demás muebles e inmuebles de los parques y jardines públicos; en uniformes; vehículos utilitarios, patrullas; en los bienes de dominio público y privado Municipal y en todos aquellos que sean susceptibles de pintura, así como en la promoción y difusión cultural y artística municipal y en general en las actividades de comunicación social…”.
Antes, en 2008 mediante una iniciativa de la fundación “Habitantes del Pitic” se propuso reglamentar el uso de los colores institucionales del Ayuntamiento con la finalidad de eliminar los gastos innecesarios que se realizaban, cuando el gobernante en turno, reemplazaba rotulaciones de materiales, vehículo, y edificios municipales, beneficiando al partido político de dónde procedía.
El presidente que dirigía entonces la fundación, Jesús Ruiz Gámez, explicó que la propuesta era necesaria, ya que no se tenía reglamentado la imagen del Ayuntamiento, y los alcaldes cambiaban arbitrariamente los colores a su conveniencia y por cuestiones de marketing político.
“Queremos que los gobernantes en turno no cambien los colores al gusto. En cada administración se nota como cambian todas las rotulaciones en los edificios, en el interior de las oficinas, papelería, logotipos, etc. Y eso genera gastos, que la verdad, no se tienen cuantificados”, comentó entonces durante un foro público que se organizó, donde participaron historiadores y sociedad en general.
Inteligente iniciativa ciudadana
En septiembre del 2009, el entonces presidente municipal de Hermosillo, Ernesto Gándara Camou, reconoció en su discurso del tercer informe de gobierno, la inteligente propuesta realizada por los integrantes de “Habitantes del Pitic”, ya que con esta reglamentación aprobada por el Cabildo, se evitaría el uso de matices con fines políticos.
En ese mismo acto, el ex alcalde resaltó la participación de hermosillenses distinguidos, como: la Dra. Leticia Varela, María Antonieta Noriega, Don Fortino León Almada, Don Armando Escalante López Portillo y la memoria de Don Arnoldo Salazar Woolfolk, quienes formaron parte de ese Consejo promotor de la iniciativa ciudadana.
Buscan justificarse
En declaraciones recientes a los medios, la alcaldesa de Hermosillo, Célida López Cárdenas, mencionó que el motivo por el cual las unidades fueron pintadas de color guinda, es porque fueron donadas por el sector privado, y dijo no violar ningún reglamento con ello, ya que “el acuerdo establece respetar el logo y el escudo” y explicó que “el Ayuntamiento puede pintar del color que le parezca”.
Posturas encontradas entre regidores
Por su parte, el regidor Carlos León, exhortó a la alcaldesa hacer las cosas bien y a poner el ejemplo cumpliendo con los reglamentos institucionales acordados, ya que de no hacerlo, estaría beneficiando al partido Morena, como malamente se acostumbraba hacer en las antiguas administraciones.
“Aquí no caben las excusas de que porque fueron donados por la iniciativa privada están pintados de ese color, existe un Acuerdo que se aprobó en Cabildo, y son temas que ni siquiera deberíamos de estar discutiendo”, mencionó.
Mientras que la regidora María Engracia Carrasco Valenzuela opinó que lo más importante para los ciudadanos es tener un Ayuntamiento que preste buenos servicios, con calidad y eficiencia, y que los colores pasan a segundo término.
“Sé que a la oposición les genera malestar, tienen que recordar que lo mismo hacían ellos en trienios anteriores, donde los colores siempre fueron rojos y azules, hasta en los uniformes de los servidores públicos. Al fin de cuentas, que los camiones estén pintados así, no es una decisión que debe de tomar el Cabildo propiamente, la Alcaldesa también tiene sus facultades”, manifestó.
En una entrevista para el periódico Expreso, el titular de Servicios Públicos Municipales, Norberto Barraza Almazán, detalló que los camiones fueron donados por el Patronato Pro-Obras del Centro Histórico de Hermosillo y la empresa Millenium Construcasa, mismos que serán integrados al trabajo junto con lo que ya contaba la dependencia, sumando 35 unidades en total.