Cierre de la frontera pegó más duro al ‘otro lado’

Después de 20 meses de permanecer “cerrada” la frontera entre Estados Unidos y México, finalmente anunciaron la próxima reapertura; Presentamos el balance de ¿Quién ganó y quién perdió?
Por Gerardo Moreno Valenzuela
El estado de Sonora y el de Arizona son co-dependientes económicamente, por eso durante casi 20 meses que mantuvieron cerrada parcialmente la frontera a causa del Covid-19, hubo afectación para ambos lados, pero el golpe duro fue para los comercios y empresas que está en Estados Unidos.
El vicepresidente del Colegio de Economistas de Sonora, Marco Antonio Córdova, detalló que esta decisión tuvo

varios efectos en muchos niveles, el principal que se logra ver es que al no poder visitar los Estados Unidos benefició de manera importante al sector comercial de Sonora.
Detalló que hay estudios de la Universidad de Arizona, que marcan que los sonorenses y los mexicanos gastan en promedio entre 2 mil 300 y 2 mil 600 millones de dólares al año en sus visitas a Estados Unidos, en compra de productos, hoteles, restaurantes y servicios, pero al estar cerrada la frontera ese dinero se quedó circulando del lado mexicano.
“De cierta forma se quedó aquí en la entidad, se empezaron a hacer más compras en establecimientos comerciales, tanto los sonorenses que residen en la frontera como Nogales, San Luis, Naco, Agua Prieta, como aquí en Hermosillo, Cajeme y Navojoa; al no poder ir a Estados Unidos a hacer sus compras habituales, pues las tuvieron que hacer aquí en la entidad”.
Explicó que esto se vio reflejado en un crecimiento notable en la actividad comercial, que se puede ver más claro en la creación de empleos generados; donde en septiembre se dio a conocer la tasa de crecimiento del empleo en Sonora que es del 4.4% y se generaron más de 27 mil nuevos empleos.
Aquí, dijo, el sector servicios, y específicamente la actividad comercial que aportó cerca de 11 mil empleos nuevos. Además, durante el último año se crearon 150 nuevas empresas del sector comercio en Sonora.
Por otro lado, en cuanto al efecto negativo del cierre de la frontera, aclaró fue directamente al comercio informal, específicamente a los tianguis, ya que muchos se abastecen de insumos que compran en Estados Unidos, a donde van directamente en carro y los traen, y como no podían realizar ese viaje, su actividad comercial disminuyó significativamente.
También, dijo, hubo una afectación en la economía familiar de los residentes de las ciudades fronterizas, porque ellos están acostumbrados a ir a hacer sus compras diarias o surtir gasolina a las ciudades estadounidenses, porque allá los precios son más bajos y representan ahorros directos para su hogar.
“Se tuvieron que quedar a comprar aquí en la entidad, y si bien es cierto que eso benefició a la actividad comercial de Sonora, afectó a los compradores finales, porque tuvieron que asumir un costo adicional, porque en Estados Unidos tiende a ser más barato hacer el super y comprar gasolina”.
Por otro lado, aun y cuando los residentes de Estados Unidos sí podían cruzar a México libremente, existía una incertidumbre con la frontera cerrada, que también afectó de manera significativa la actividad turística del estado, principalmente en playas como Puerto Peñasco, pueblos mágicos y de localidades de tránsito.
“El cierre de la frontera genera incertidumbre, genera nerviosismo, de tal manera que la población de Arizona que viene a hacer turismo a Sonora, ya no viajó de manera frecuente, y de cierta forma podemos percibir que el sector se vio afectado por un menor flujo de turistas; hablamos de hoteleros, restaurantes y demás”.
Donde aclaró que sí hubo una afectación importante fue al sector comercial e incluso de turismo de Arizona, específicamente en Nogales, Yuma y Douglas; ya que tienen su principal mercado en el consumidor sonorense, entonces al no estar llegando los visitantes a estos establecimientos, bajó drásticamente el ingreso de esos negocios y la economía local de esas ciudades.
“Así como a nosotros nos favoreció en los negocios comerciales, la contra parte en Arizona se vio afectada de manera negativa… Ese cierre parcial de la frontera que implementó el Gobierno de Estados Unidos, en materia económica, si les afectó a ellos, sobre todo a los establecimientos y empresas dedicados al ramo comercial, hotelero y al ramo restaurantero, que están acostumbrados al turista sonorense”.
Hubo buena política gubernamental
El presidente de la oficina de “Vamos a Tucson”, Felipe García, aclaró sí se percibió una afectación muy fuerte en los negocios locales de Arizona con el cierre a raíz de la pandemia, sin embargo, fue posible sobrellevarla gracias a las políticas especiales implementados por el Gobierno de Estados Unidos, de apoyar tanto a las empresas locales como directamente a las familias.
“Hubo un colchón muy fuerte debido a dos cosas: uno, los incentivos económicos del Gobierno Federal a las

empresas, con eso muchas empresas pudieron tener recursos extraordinarios muy importantes que les ayudó a sobrepasar estos días; y número dos, el incentivo económico que se dio a las familias y que se sigue dando a las familias, gente que todavía a la fecha hay muchas familias que están recibiendo 700 a 800 dólares mensuales, depositados en su cuenta de banco”.
Entonces, señaló, ha habido mucho circulante y recursos en las comunidades para el consumo, entonces la falta de las compras de los mexicanos tuvo un colchón por ese dinero circulante que hubo en la economía, pero esos programas federales ya empiezan a disminuir.
Sin embargo, reconoció que, sí existieron negocios que tuvieron un impacto muy fuerte, sobre todo los más pegados a la franja fronteriza como los ubicados en Nogales, Douglas y todas estas ciudades, incluso algunos que no pudieron sobrevivir ni siquiera con los apoyos, pero la gran mayoría salió adelante.
“Si no existieran estos apoyos hubiera sido catastrófico, porque una fuente importante de turismo y de comercio, viene de los visitantes del turismo de México, y único que logró que sobrevivieran. Sí hubo algunos negocios que ni con estos apoyos pudieron sobrevivir, pero muchos, la gran mayoría, sí pudieron salir adelante y seguir trabajando y operando gracias a estos incentivos”.
Por eso dijo, es importante el anuncio de la reapertura de la frontera entre México y los Estados Unidos, con las ciertas limitantes que se plantearon, pero que regrese ese flujo del comercio binacional constante servirá para reactivar todos los sectores de Arizona y apoyar también a los sectores de Sonora.
“Muy contentos después de tanta espera, donde cada mes ampliaban el plazo y ‘pateaban la lata’ un mes más y otro mes más, y pues es muy buena noticia que se reabre o se cambia esta política de entrada y a partir del ocho de noviembre empieza un primer grupo de personal de México que podrá entrar a Estados Unidos y muy contentos por esta noticia”.
Por otro lado y más allá del tema económico, Felipe García aclaró que uno de los factores que más afectó con este cierre de frontera fue la cuestión social, personal y familiar, ya que en la frontera las familias viven en ambos lados de la franja, y se visitan mutuamente, pero al estar cerrada, pues muchos miembros llevan ya casi 20 meses sin verse.
“Familias que se separaron por estas restricciones, donde los familiares que viven en México no podían cruzar a ver sus hijos o hijas, o que ellos no podían regresar a México, y eso creemos que es muy importante, y que bueno que con esta primera parte ya vamos a avanzar un poquito más”.
Ahora las familias ya podrán frecuentarse, verse para ir a comer o cenar, o incluso acudir a fechas importantes para las familias como cumpleaños o ahora que viene navidad y año nuevo, pues podrán estar juntos y eso es muy importante.
Por esto, dijo ya están listos para recibir a los visitantes sonorenses a partir del nueve de noviembre, están con mucho optimismo y a la espera de todos los visitantes mexicanos, quienes serán muy bien recibidos, ya que es algo que esperaban desde hace mucho tiempo.
“Claro que estamos listos y el mensaje es, no saben el gusto que nos da, extrañamos ver las plazas y las calles de la ciudad de Tucson con gente, ir a restaurantes y escuchar a familias reunidas platicando, extrañamos ir a la tienda y que la mamá le diga a la hija que salga para ver cómo se le ve la ropa que se está probando, lo extrañamos y estamos muy contentos de regresar y yo estaré recorriendo las calles y viendo todos. Estamos listos y con mucho gusto para recibirlos”.
Un doble fenómeno en Sonora
Por otro lado, para el estado el cierre de la frontera tuvo un doble fenómeno, ya que por un lado benefició de una manera muy importante al comercio local, sobre todos a los pequeños negocios, pero por otros muchos empresarios no podían acudir a las grandes proveedoras de Estados Unidos, informó Ario Bojórquez.
El presidente en Hermosillo de la Cámara Nacional del Comercio (Canaco) explicó que en los sondeos hechos con

sus afiliados, una buena parte de los comercios establecidos en la ciudad celebran la reapertura de la frontera porque ahora podrán ir directamente a las fábricas de productos y negociar los precios.
“Podrán ir directamente a las fábricas que están en Los Ángeles y alrededores, en California, a ir directamente a ellos escoger, a negociar, los productos que nos gustan a la gente de Hermosillo y la gente de Sonora, y no estar sujetos a las compras que tiene que hacer a distribuidores nacionales, con un poco más alto el costo y a lo mejor otros gustos”.
Entonces señaló que hay varios factores que tomar en cuenta con el cierre, sin embargo, en el balance y el impacto final si fue positivo para los negocios locales.
Ahora, señaló, que se vienen los mejores meses del año para el comercio, que es noviembre y diciembre, con el programa de “Buen fin” y todas las fiestas decembrinas, y aunque esperan una merma con la reapertura de la frontera, saben que será mínima y por eso tienen buenas expectativas.
“La apertura de frontera si va a traer una merma en las ventas, es algo natural de aquí de nuestra entidad, porque muchos de nosotros tenemos familiares en las ciudades vecinas de Arizona, vamos a saludarlos, tenemos algún negocio y aprovechamos para hacer alguna compra, entonces si va haber alguna merma, pero es mínima en las ventas”.
Explicó que se espera entre un 15 y un 25% de baja en las ventas por la reapertura de la frontera en los negocios locales, sin embargo, agregó que estos casi 20 meses que la frontera estuvo cerrada el comercio demostró que hay buenos productos, buenos precios y garantías.
“Ya como que nos sirvió para hacer un encuentro con nuestros productos, nuestros comercios y nuestros clientes, y darnos cuenta también que muchos de los negocios de aquí de Hermosillo ya están en línea, y muchas veces ni siquiera necesitas ir, porque te lo mandan directamente a tu casa”.
El llamado es que sigan consumiendo local, obviamente que sopesen si vale la pena exponerse a un viaje, sobre todo que dicen algunos que van a ir como estampida a saturar estas ciudades, entonces debe haber mesura y lo importante que sepan que aquí hay muy buenos productos.
Camino a la recuperación
Marco Antonio Córdoba, aclaró que la reapertura de la frontera es positivo, porque se viene a restablecer el flujo de personas y eso genera confianza en ambos lados de la frontera; beneficiando, sin duda, a los dos estados que verán mayor crecimiento económico.
“Eso va a impulsar a la actividad económica, tanto a nuestros vecinos de Arizona se animen a visitarnos y se animen a venir a Puerto Peñasco y a los pueblos, y de esta forma visiten los hoteles, restaurantes y que dejen una derrama económica. Y también el sonorense ya tendrá una mayor oferta al estar abierto el mercado norteamericano, y eso va a resultar positivo al consumidor al poder adquirir productos a menor precio”.
Lo único donde podría afectar es una disminución en las ventas de los negocios comerciales locales, ya que habrá mayor competencia, sin embargo, aseguró que esta afectación será mínima y los negocios podrán continuar, porque seguirán creciendo, solo que a un menor ritmo.
“Esta apertura anunciada indiscutiblemente es positiva en todos los ámbitos de la vida económica de la entidad, porque restablece un flujo de personas que puedan transitar libremente entre ambos países y eso reactiva la vida de los negocios que requieren de este flujo… Hay un grado de dependencia de la economía sonorense y la de Arizona, tanto en lo que les compramos, pero también en lo que exportamos”, añadió.