Claroscuros en el desempeño legislativo del Congreso de Sonora

Por Gerardo Moreno /

Un estudio del IMCO considera a los diputados locales entre los más productivos pero también como los más caros

Según el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) el Estado de Sonora cuenta con uno de los Congresos locales más productivos a nivel nacional, en cuanto a número de iniciativas y reformas aprobada, pero también es uno de los que más malgastan su presupuesto y tiene a los diputados más caros.

Según “El Informe Legislativo 2016” del IMCO, donde analizó la estructura de los 32 Congresos Locales del país, el manejo de sus finanzas públicas y el desempeño legislativo, se encontró que el presupuesto del Congreso de Sonora fue el que más creció del 2012 al 2016. Pasó de tener 329.5 millones a más 610 millones de pesos, un aumento del 62%.

Pero, si juntamos el recurso de todo el Poder Legislativo (Congreso y del Instituto Superior de Auditoria y Fiscalización), encontramos que el crecimiento presupuestal fue del 95.83%, al llegar a casi 772.5 millones de pesos. Donde el ISAF se lleva un total de 162.4 millones.

Sonora tiene 33 diputados locales, 21 electos por mayoría relativa, es decir electos por los ciudadanos y 12 plurinominales (ubicado por debajo de la media nacional que son 35), lo que representa que cada legislador cuenta con un presupuesto de casi 18.5 millones de pesos para ejercer este 2016; lo que representaría que cada sonorense saque 205 pesos de su bolsa y se los regale a los legisladores.

El sueldo bruto de un diputado en Sonora se calcula al sumar el sueldo base (96 mil 558.81 pesos) más la dieta legislativa y el bono por riesgo laboral, en suma 177 mil 83 pesos, lo que los convierte en los segundo mejor pagados del país, solo por debajo de Aguascalientes donde ganan 177 mil al mes, pero muy lejos de los 34 mil pesos mensuales que ganan en Tlaxcala.

Además, en el año 2015 los diputados se entregaron una remuneración bruta anual de 54.8 millones entre todos los legisladores, es decir, que cada uno recibió un bono de poco más de 138 mil pesos ese años, sumándole los 40 días de aguinaldo que también reciben.

Con esto, se esperaría que los diputados no tuvieran que realizar gastos innecesarios del presupuesto para que este se usara en ser más eficientes en su labor y mejorar los procesos, sin embargo, el IMCO señala que el gasto público del Congreso de Sonora se utiliza en cosas que podrían considerarse innecesarias.

Por ejemplo, el 44.3% del presupuesto total del Congreso en el 2015 se gastó en el rubro de  servicios generales, el 23.7% en materiales y suministros, y el 17.7% en servicios personales, dejando un 3.7% para transferencias, subsidios, asignaciones y otras ayudas sociales, y un 10% que no fue especificado.

Además, el Congreso de Sonora gastó el 15% de su presupuesto total del 2015 en la realización de “servicios oficiales” (que son ceremonias, actos públicos y gastos de representación), donde erogó más de 112.3 millones de pesos; colocándolo en la tercera entidad, a nivel nacional, con mayor porcentaje de presupuesto gastado en este concepto, solo por debajo de Puebla que gastó el 37% y Chihuahua que erogó el 23%.

También, los 33 diputados del Congreso del estado gastaron en todo el 2015 un total de 5.7 millones de pesos en viajes y viáticos; al igual que casi 26 millones en comunicación social (el 3.5% del presupuesto total), 27.8 millones en ayudas sociales, y 10.5 millones en remuneración a personal transitorio.

Dentro del Congreso se encuentran laborando un total de 290 personas, sin contar a los 33 diputados, pero cada legislador se le permite tener nueve plazas disponibles en promedio.

El IMCO, señala que el Congreso de Sonora no ha sabido realizar bien la planeación de sus gastos ya que del presupuesto autorizado, por ellos mismos, siempre terminan gastando más y amplían varias partidas. Por ejemplo, en el 2015 se habían aprobado 563.8 millones de pesos pero se terminaron gastando 742.5 millones, una diferencia del 31.7%.

Con esto es, de nuevo, la tercera entidad con la peor planeación presupuestal, solo por debajo de Hidalgo que tuvo un ajuste del 55.7% y Guanajuato con 40.5% de diferencia.

Además, los diputados de Sonora tiene dos periodos ordinarios de sesiones al año, que en total son 213 días naturales y deben sesionar dos veces a la semana (normalmente martes y jueves), sin embargo, en el 2015 solo celebraron 69 sesiones del pleno.

Lo positivo, es que Sonora se encuentra en segundo lugar nacional con más leyes y reformas aprobadas en el 2015 con un total de 136 (entre ellas dos reformas constitucionales), ubicándose solo por debajo de Jalisco que tuvo 343 y apenas arriba de Yucatán que tuvo 133.

Sin embargo, el IMCO señala que “el Congreso de Sonora no está cumpliendo con su función de ser un verdadero contrapeso del Poder Ejecutivo”, ya que el Gobierno del Estado presentó un total de 23 iniciativas en el 2015 de las cuales se aprobaron, prácticamente sin modificación, 19 de ellas (poco más del 80%).

De igual forma, el IMCO califica la página de transparencia del Congreso de Sonora como deficiente y de difícil acceso.

Ante este panorama, propone que los diputados deben cumplir con lo que aprueban en el pleno del Congreso, en especial en materia de transparencia, rendición de cuentas y contabilidad gubernamental. También apegarse al presupuesto aprobado y evitar aumentos desproporcionados estableciendo por ley que no se pueda modificar en más del 3% cada rubro.

Ahora, los diputados de la LXI Legislatura tienen en sus manos el aceptar estas recomendaciones que el IMCO les realiza o seguir aplicando las malas prácticas que se viene arrastrando desde el 2012.