Desfalco en Nogales por 853 millones: ISAF
El último año de la administración del priista Ramón Guzmán, obtuvo calificación reprobatoria de 5.4; resultado de las auditorías se encontró un posible daño patrimonial que asciende a 853 millones pesos
Por Gerardo Moreno
Las autoridades municipales tienen el primer contacto con los ciudadanos, son los encargados resolver las principales demandas, sin embargo algunos Cabildos resultaron ser una verdadera pesadilla. Señalamientos de corrupción, malos manejos financieros y desorden administrativo que terminó afectando la calidad de vida de las habitantes.
Así quedó evidenciado en los informes de las Cuentas Públicas que realizó el Instituto Superior de Auditoría y Fiscalización (ISAF). En ese sentido Primera Plana analizó reportes de diferentes Ayuntamientos de Sonora, comenzado con uno de los más reprobados en el 2015: Nogales.
El último año bajo la administración del priista Ramón Guzmán, sumó un total de 123 observaciones sin solventar, por las cuales se señala un posible daño patrimonial que asciende a 853.6 millones pesos, obteniendo una calificación reprobatoria de 5.4.
En la auditoría del ISAF destacan desde recursos ejercidos sin comprobar, dinero perdido, fondos federales, descuentos de nómina, obras inconclusas pero pagadas en su totalidad.

Entre ‘nómina fantasma’ y desvío de ISR
El municipio fronterizo pagó 7.6 millones de pesos a funcionarios públicos que ya no laboraban para la administración. Y lo peor es que a Mayo del 2016 aun no se realizaba ninguna acción para recuperar ese recurso.
También pagó un millón 119 mil pesos a proveedores que no fueron localizados en los domicilios fiscales que se registraron en los comprobantes de pago, es decir que no existían. De igual forma el Ayuntamiento ejerció un total de 57 millones de pesos en partidas que no estaban contempladas en el presupuesto de egresos que aprobó el Congreso del Estado.
De la misma forma se encontraron 9.4 millones de pesos que el Ayuntamiento expidió en cheques de la sub cuenta “0070” que después fueron cancelados sin que se reportara el recurso de vuelta.
Un recurso de 8.2 millones recaudó por el Impuesto Sobre la Renta que no fue reportado al Servicio de Administración Tributaria (SAT), es decir que también se perdió.
El Ayuntamiento realizó compras por 3.3 millones de pesos sin presentar procedimientos de adjudicación o licitación necesarios por el importen ejercido. Así como 2.1 millones de pesos en diversos gastos que no fueron justificados. Y 8.8 millones de pesos ejercidos a través de comprobantes del SAT que fueron declarados apócrifos.
Se realizaron gastos de las cuentas del municipio por 68.9 millones de pesos sin que fueran registradas en la contabilidad municipal y de las cuales no se encontró evidencia documental de su destino final. Al igual de 83 millones de pesos registrados en pólizas de egresos del Ayuntamiento pero que no fueron respaldados por evidencia documental.
De la misma forma el ISAF encontró que se pagó un monto total de 17.4 millones de pesos en obras públicas que nunca fueron realizadas. Además un total de 17 obras que no fueron terminadas a tiempo y que no se le aplicó ninguna sanción a la constructora. Y 22 obras que fueron finiquitadas con fallas graves en los contratos.
Estafan a trabajadores

El ISAF señaló que se desaparecieron un total de 2.6 millones de pesos que el Ayuntamiento descontó de la nómina de los trabajadores para su caja de ahorros y que nunca fueron depositados en la cuenta 65-50355456-1 del banco Santander.
De la misma forma no depositó un total de 27.4 millones de pesos que el Ayuntamiento descontó a los trabajadores para sus pensiones, jubilación y el fondo de ahorro “Red Benefit”.
Por otro lado se detectó una diferencia de 20.5 millones de pesos en concepto de sueldos, salarios, honorarios, arrendamientos y seguros, entre lo que se erogó finalmente y lo registrado en los libros de control interno.
Además el Ayuntamiento realizó un programa de Plan Remuneración Total (PRT) bajo el concepto de riesgo laboral sin pedir consulta de la Federación, donde pago discrecionalmente un monto de 45.5 millones de pesos a sus empleados, sin que haya documentación que compruebe que se dio a todos los trabajadores del municipio.
Discrecionalidad con los fondos federales
Por ejemplo, se encontró un monto de más de cinco millones perdidos, que fueron expedidos en cheques de la cuenta 0295634625 de Banorte, donde se depositaban los fondos Federales, sin la estimación correspondiente y que no fueron regresados.
También un recursos que no se ejerció del Programa de Tratamientos de Aguas Residuales por 14.8 millones de pesos que no regresaron a la Federación y que no se encontró en otro lado.
Se ejercieron cuatro millones del programa de contingencias económicas de los recursos del Ramo 23, en conceptos que no están autorizados por las reglas de operación del programa.
Además se pagó 1.1 millón en operaciones “aparentemente inexistentes”, ya que los proveedores que emitieron los comprobantes fiscales incumplieron con las leyes federales en la materia.
También se realizaron pagos por 1.2 millones de pesos del Fondo para la Infraestructura Social Municipal (FISM) justificados con documentos apócrifos del SAT. Además que se traspasaron 6.8 millones de las cuentas del mismo fondo a otras cuentas bancarias que nunca se regresaron.
De la misma forma se detectaron 4.2 millones de pesos que fueron traspasados de la cuenta 65504809294 (donde se administra el Fondo de Aportaciones para el fortalecimiento municipal FORTAMUN) a la cuenta 65505138463 (de los recursos del Ramo 23), que nunca fueron restituidos.
Por otro lado se detectaron un total de 119.6 millones de pesos que fueron traspasados de fondos federales directamente a cuentas a cargo del municipio y que nunca fueron regresados a su origen.
Desorden administrativo
El ayuntamiento de Nogales tuvo un completo desorden administrativo, ya que en el 2015 se gastaron 181 millones de pesos más de lo que pudieron ingresar a las arcas municipales. Pues en total ingresó 824 millones pero se gastó mil seis millones de pesos.
Sin embargo, este sobre gasto no se explica pues el informe del ISAF señala que en obra pública realizada estrictamente por el municipio solo se destinó el 3.16% del presupuesto, es decir que por cada peso gastado en Nogales solo tres centavos fueron para obra, y la mayor parte (36%) se perdió en gasto corriente.
Todo lo anterior ya han terminado en denuncias administrativas y procedimientos resarcitorios en la Contraloría del Estado y procesos penales en la Fiscalía Anticorrupción, por el momento los procedimientos siguen abiertos, sin embargo, el desorden financiero sigue ahí y reto de cómo librar el “bache financiero”, le corresponde la actual administración.