El gobierno de Sonora promovió campaña racista contra yaquis: Alberto Solís, de Serapaz A.C.
Por Rigo Gutiérrez E./
La Misión Civil de Observación de Consulta a la Tribu Yaqui, advierte sobre la política de confrontación social azuzada por las autoridades de gobierno estatal y de Hermosillo, en contra de la etnia yaqui, en medio del conflicto por el acueducto Independencia.
Y es que tras la decisión del Juez Octavo de Distrito, primero en darle la razón a la etnia de cerrar la llave del tubo que traslada agua desde la presa El Novillo a la capital sonorense, las autoridades locales alertaron por una “emergencia” ante tandeos y colonias que dejarían sin agua. (Como se recordará a los días un Tribunal Colegiado dio la razón a Hermosillo).
Es en este contexto que Alberto Solís, coordinador del área de acompañamiento a procesos en Serapaz A.C.—una de las 100 ONG parte de la MCO—, no duda en señalar que las autoridades maquinaron una campaña de odio.
“Hay una dinámica que en realidad lo que nosotros creemos que genera, de salir a decir eso públicamente —tandeos en las colonias—, puede ser sumamente irresponsable, puede generar discriminación y odio hacia la gente perteneciente al pueblo yaqui. En ese punto hemos sido muy enfáticos, esta es una campaña que está mal manejada, que puede ser discriminatoria, racista, y nosotros la señalamos como una cuestión muy grave”, apunta en entrevista para Primera Plana.
Solís, recuerda que Misión Civil de Observación, desde octubre de 2013 ha monitoreado de cerca todo el proceso de consulta para reponer el estudio de Impacto Ambiental para la obra del Acueducto. Los últimos acontecimientos, refiere, pueden afectar los estándares generando presión y una mala imagen de la tribu frente a otro tipo de actores.
“Consideramos nosotros que puede ser un tema de manipulación y puede generar presión de la población en contra del pueblo yaqui. Lo cual además es terriblemente racista porque confronta los derechos de la población de Hermosillo, principalmente mestiza, a los derechos de agua que también tiene un pueblo indígena, como si unos fueran más valiosos que otros”.
Precisa que la comunidad yaqui está conformada por cerca de 40 mil personas, que no tienen tubería, drenaje y por igual, tienen el derecho de tener agua potable, a pesar de que a las autoridades nunca les ha importado dársela.
El representante de Serapaz, hizo un llamado a los hermosillenses a no caer en los engaños y no aceptar este tipo de planteamientos, promovidos por la misma autoridad.