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Inhumanas las Tarifas Eléctricas en Sonora

Por Guillermo Moreno Ríos

Este tema no es nuevo, es recurrente pero no resiliente. Recuerdo desde las llamadas “señoras de blanco” en la época del gobernador Armando López Nogales y el presidente Vicente Fox, desde donde con análisis técnicos y analizados con el apoyo de INCIDE y de la Sociedad Mexicana de Ingenieros, dieron una solución momentánea y la aparición de la tarifa 1F en ese entonces.

Las luchas cada año, cada sexenio son iguales, algunos aportan y otros simplemente estorban para alcanzar el preciado beneficio económico para las familias sonorenses por el alto consumo obligado por las temperaturas que año con año son mayores principalmente por el innegable cambio climático y otros factores adicionales como el desarrollo urbano y que hace que la sensación térmica alcance hasta los 55 grados que hacen que deje de ser un simple capricho que ha cobrado ya 77 decesos por golpe de calor en la entidad en esta temporada.

Sonora, uno de los estados más calurosos de México, se encuentra en medio de una creciente crisis energética. El aumento exponencial en los costos de los recibos de electricidad ha generado una profunda inquietud entre la población, que ahora se enfrenta a facturas impagables. Esta situación ha provocado una reacción en cadena de protestas, debates y llamados a la acción por parte de diversos actores, desde ciudadanos hasta legisladores y empresarios. A medida que los hogares y las empresas luchan por hacer frente a los crecientes gastos de energía, se ha vuelto evidente que se necesita una respuesta inmediata y efectiva para abordar esta crisis y no como promesa gubernamental, electoral y mesiánica para el 2024.

El Problema de las Tarifas Eléctricas

A medida que las temperaturas se elevan y el consumo de energía aumenta para combatir el calor extremo, los ciudadanos se han encontrado con facturas que, en algunos casos, han aumentado hasta un 200%. Este fenómeno ha llevado a un estado de incertidumbre y malestar generalizado en la población, que se siente atrapada en un ciclo de aumentos impredecibles en sus gastos de electricidad.

El Gobierno y la Comisión Federal de Electricidad (CFE) argumentan que estos aumentos se deben al mayor consumo de energía causado por las altas temperaturas y no a un incremento en las tarifas, lo cual es obvio e inocente en sus declaraciones que no ha convencido a la población, que exige respuestas claras y soluciones tangibles.

Para abordar esta situación crítica en Sonora, es esencial considerar algunas propuestas de diversos actores y concentrarlas desde un punto de vista objetivo:

Ampliar el Subsidio: Una de las soluciones inmediatas es ampliar el período de subsidio de la tarifa de verano de mayo a octubre a abril a noviembre. Esto ayudaría a aliviar la carga financiera de los ciudadanos durante los meses más calurosos y reduciría el impacto económico de los aumentos en las facturas de electricidad.

Modificar los Rangos de Cobro: Se debe revisar y modificar los rangos de cobro de manera que se reduzcan los aumentos drásticos en las tarifas cuando el consumo de energía se encuentra en una categoría superior. Esto permitiría una transición más suave entre las diferentes tarifas y evitaría que los ciudadanos se enfrenten a facturas exorbitantes.

Energía Solar: Sonora cuenta con abundante luz solar, por lo que se debería fomentar la adopción de sistemas de energía solar para reducir la dependencia de la electricidad de la red. Esto no solo reduciría los costos a largo plazo, sino que también sería beneficioso para el medio ambiente. A través de subsidios como lo fueron los programas ahorradores en años anteriores y la aplicación de incentivos fiscales de algún tipo.

Diálogo Permanente: Es crucial mantener un diálogo permanente entre los ciudadanos, el gobierno estatal, legisladores y la CFE para abordar de manera efectiva las preocupaciones y necesidades de la población.

Legislación para Proteger los Derechos de los Ciudadanos: Se debe considerar la posibilidad de incluir el acceso a la electricidad como un derecho fundamental y humano en la Constitución de México para garantizar que las tarifas eléctricas sean justas y razonables, ya que incluso dentro de la ecuación del riesgo, ha costado la vida a seres humanos en nuestro estado y país.

Síntesis

La situación de las tarifas eléctricas en Sonora es crítica y requiere una respuesta inmediata. Los ciudadanos se enfrentan a facturas impagables que amenazan su estabilidad financiera, mientras que el gobierno y la CFE argumentan que se deben a un aumento en el consumo debido a las altas temperaturas. Para resolver este problema, es necesario ampliar el subsidio, modificar los rangos de cobro y promover la energía solar como alternativa sostenible.

Además, es esencial mantener un diálogo permanente entre todas las partes involucradas para abordar las preocupaciones de la población y trabajar juntos en soluciones viables. En última instancia, la protección de los derechos de los ciudadanos a un acceso razonable a la electricidad debe ser una prioridad, y esto podría lograrse a través de cambios legislativos. La crisis de las tarifas eléctricas en Sonora es un recordatorio de la importancia de abordar las necesidades básicas de la población y garantizar que los servicios públicos sean asequibles y hoy por hoy, desde el punto de vista de protección civil, debe de enfrentarse como un factor de riesgo importante que pone en riesgo la vida humana en nuestra entidad.