Lecho del río Sonora, visiblemente teñido de cobre
Por Daniel Sánchez Dórame/
A 22 días del derrame que contaminó el Río Sonora, el lecho del caudal luce una cubierta de sedimento con el característico color cobrizo que alertó a los habitantes de la ribera respecto a la peor contingencia ambiental en la historia de México.
Flora y fauna muerta en los márgenes; piedras manchadas; sedimento; y una atípica ausencia de organismos vivos en el torrente; saltaron a la vista durante un recorrido realizado por periódico Excélsior, la mañana del jueves a la altura del municipio de Baviacora.
La víspera, unos 500 trabajadores distribuidos en 25 cuadrillas iniciaron con los trabajos de remediación y limpieza del arroyo, para retirar excesos y concentración de químicos tóxicos, piedras manchadas, maleza, azolve, flora y fauna muerta; donde los trabajadores constataron la presencia de residuos en excavaciones de hasta 50 centímetros de profundidad.
Fue el miércoles 6 de agosto cuando el derrame de un represo utilizado en la operación de la mina Buenavista del Cobre Grupo México, dejó una mancha cobriza con tornasol que avanzó a lo largo de 226 kilometros desde Cananea hasta la presa Rodolfo Félix Valdés «El Molinito», a través del Río Sonora donde la conagua detectó niveles de metales pesados por encima de la norma permitida para consumo humano.
Excélsior