Plata con resplandor de oro

La noche del 24 de agosto de 2004, México se unió en el silencio. La atleta sonorense, Ana Gabriela Guevara Espinoza obtuvo la medalla de plata en los Juegos Olímpicos de Atenas; tras una racha de 29 competencias ganadas, lo que le ha merecido ser reconocida como una de las mujeres más rápidas del mundo.

A 10 años de distancia, la hoy Senadora de la República agradece el apoyo incondicional que siempre ha recibido de los mexicanos; así como a los medios de comunicación el interés de mantener vivo, en el corazón de una Nación, la esperanza para que las nuevas generaciones impulsen el desarrollo del atletismo en México.

“Aquella noche fue mágica”, recordó en entrevista Ana Gabriela Guevara, “mi primera participación en una competencia mundial fue en Atenas y, sin saber que sería mi última competencia, en 2004 regreso a Atenas y obtengo una medalla de plata que me ha sabido a gloria, una presea que ha sido histórica para México”.

Para la legisladora, lo sucedido la noche del 24 de agosto de 2004, fue el inicio de 4 días inolvidables para México. Ante 75 mil espectadores que abarrotaron el Estadio Olímpico de Atenas y más de 90 millones de televidentes, a Ana Gabriela Guevara le quedó claro lo que implica representar a su País.

Por primera vez en la historia del deporte en México, el atletismo despertó gran expectación y una pasión indescriptible. En el lugar la algarabía se hizo presente, cientos de mexicanos aplaudían y entonaban porras en apoyo a su velocista.

“Era un momento que exigía de máxima concentración, ya que cualquier distracción emocional podría arrojar resultados fatales. Me veo en el monitor, me llevo el dedo a la boca y pido silencio. Todos se callan, se hace presente la solemnidad de la competencia y en lo único que pensaba era en ser la primera en atravesar la meta en menos de 50 segundos”, narró Ana Gabriela Guevara.