Plogging, el deporte socialmente responsable

Directamente de Suecia llega a Hermosillo una forma de perder kilos y recoger basura
Por Imanol Caneyada
Cuando uno menciona Suecia, de inmediato le viene a la mente un país cuyos ciudadanos, en mancuerna con su gobierno, están en constante creación de formas de convivencia sustentable y armónica.
Estos suecos crearon, por ejemplo, el primer centro comercial en el mundo de productos reciclados, es decir, un Galerías Mall en el que solo se comercia con objetos que no se convertirán en basura.
Suecia es el país en el que el gobierno le paga a sus ciudadanos por arreglar los electrodomésticos en lugar de que los tiren a la basura.
Pero claro, Suecia es Suecia, esos nórdicos nos llevan años luz, viven en otra realidad, etc, etc.
Pues bien, un grupo de locos hermosillenses, encabezados por los clubes atléticos TeamHMO y Gila, piensan que nos podemos hacer los suecos, que el hecho de vivir y ser de Hermosillo no es impedimento para adoptar costumbres tan sanas y limpias como la del plogging, un deporte socialmente responsable.
La palabra es una contracción del término inglés “jogging”, correr, y la palabra sueca “plocka upp”, que significa recoger.
Es decir, que mientras trotas, corres o caminas, vas levantando la basura que te encuentras en el camino, con lo que te aseguras una buena hora de ejercicio y un impacto en el ambiente altamente positivo.
En Hermosillo estamos enterrados en basura; las calles, los parques, las plazas, los solares baldíos se han convertido en basureros permanentes.
El gobierno municipal tiene una cierta responsabilidad, sí, pero la ciudadanía, producto de la falta de cultura cívica que se refleja en muchos aspectos, también es responsable del cochinero que se acumula en las calles.
Podemos quejarnos, clamar al cielo por el destino infausto que nos ha tocado y la irresponsable clase política que nos gobierna, y también podemos estar atentos a las convocatorias que realizan los integrantes de Hermosillo Plogging a través de su página en Facebook.
El pasado 14 de mayo, por ejemplo, 32 voluntarios encabezados por Aarón Montaño fueron a hacer plogging a Isla Tiburón. El resultado después de cinco horas de ejercicio intenso: diez metros cúbicos de basura levantada y separada para reciclar.
Unos días después, el 19 de mayo, un grupo de alrededor de cien personas hizo otro tanto en el primer cuadro de la ciudad.
Y el seis de mayo le tocó al Cerro de la Campana, y el 22 de abril fue el plogging ganadero, en el que los participantes recogieron las toneladas de basura que dejó el paso de la cabalgata de la Expo Ganadera.
El primer plogging que se realizó en esta ciudad fue el 8 de abril en el parque Madero.
En cosa de un mes se ha ido sumando gente de todas las edades, sexo y condición, quienes con sus coloridos uniformes deportivos se lanzan a una tarea esplendorosa y por unas horas nos hacen sentir que estamos en Suecia.
De nosotros, del resto, depende que nos asumamos como una sociedad capaz de cambiar nuestro destino o sigamos quejándonos en la comodidad del hogar.
Por lo pronto, Aarón Montaño, Rigo Flores, Mauro Sotelo y otros más están poniendo el ejemplo, y la ciudadanía poco a poco responde.