López Obrador, brujo de pacotilla

Reconocidos políticos acuden a brujos y a la magia negra para obtener poder. Acuden a la magia negra para despejar su camino de adversarios y enemigos

Por Dr. Jorge Ballesteros

Pues vaya escándalo que desató Pedro Ferriz de Con, al denunciar a AMLO de ser un brujo de cuarta, un caca-brujo y para demostrarlo presentó el análisis de la fotografía que le tomaron cuando tomó posesión como presidente y que su primer acto fue organizar en el Zócalo, una ceremonia chamánica, de brujos indígenas, en la cual se dice que consagró México a satanás y que los brujos le dieron el bastón de mando de presidente al entregarse a fuerzas oscuras.

En la mencionada foto aparecen los brujos vestidos de blanco y con vestidos negros AMLO, su esposa Beatriz Gutiérrez y Epigmenio Ibarra, los cuales forman un triángulo, Obrador permanece postrado y su esposa con faldas, que según Ferriz significa poder.

Dentro de los significados explica Ferriz, que le están ofreciendo el poder al presidente y le están ofreciendo un Sr. Jesucristo tapado con un paño, solo se le ven los brazos, esto significa que no le ve, que lo ignora, que no lo reconoce, esto es un mensaje.

Luego hay una persona con una flauta, que está propalando que está asumiendo el poder el emperador de México; hay flores que están en la ceremonia justo detrás del crucifijo, son flores de cempasúchil, que se ofrecen el día de muertos y esto es un tributo a la muerte.

Toda la gente que le rodea está vestida de blanco, pero hay tres personas de negro que forman un triángulo perfecto, uno es el que recibe el poder (AMLO), otra (Beatriz Gutiérrez) la que le protege, le pone su mano protectora sobre la espalda para juntos, ella y él recibir el poder que desconoce a Cristo, vestida de falda, la falda es una señal poderosa, está haciendo que esta mujer tenga un contacto con la tierra.

Hay otra persona que está al extremo medio del lado derecho de la fotografía, hace un triángulo y es Epigmenio Ibarra. El que estén vestidos de negro significa la oscuridad desde donde vienen. Hay muchos otros mensajes.

“La clase política mexicana es muy inculta”

En su nuevo Libro “Los brujos del poder 2” (Random House Mondadori, 2009) José Gil Olmos, desveló las costumbres de los políticos que apelan al esoterismo y a fuerzas sobrenaturales para despejar su camino de adversarios y enemigos, así como lograr sus metas personales “cueste lo que cueste”.

Gil destaca que el libro muestra que la clase política “es muy inculta, y en momentos de crisis como éste, tiene mucho más auge el misticismo y esoterismo”.

De López Obrador siempre hemos sabido que es sumamente inculto, ignorante y cerril, y al haber nacido y haberse creado en un lugar como Macuspana, en el que el gusto por el espiritismo y el esoterismo en los tabasqueños, se remonta a la persecución garridista (Tomás Garrido Canabal, gobernador de tabasco entre 1919 y 1934, fundador de las Camisas rojas, que se dedicaban a quemar iglesias y matar sacerdotes) lo que propició que los cultos religiosos se realizaran clandestinamente.

La brujería y la magia negra todavía se siguen practicando, aunque de una forma muy secreta, obviamente. La magia negra es la realización de hechizos con propósitos destructivos o egoístas. Muchas de estas prácticas utilizan distintas versiones de maldiciones, círculos mágicos, muñecos vudú, pociones, y, lamentablemente, sacrificios de animales y hasta humanos.

Reconocidos políticos acuden a brujos y a la magia negra para obtener poder. Acuden a la magia negra para despejar su camino de adversarios y enemigos

Políticos mexicanos y actuales dirigentes como Beatriz Paredes, el ex gobernador Fidel Herrera o el ex ministro de Seguridad, Genaro García Luna, recurrieron a la magia, a los brujos o a chamanes, para lograr poder político, dijo el escritor y periodista José Gil Olmos

El autor contó cómo los brujos los llevan a un “lugar sagrado” en un bosque cercano a Catemaco, en el estado de Veracruz, donde realizan un hechizo de magia negra, e invocan a los “espíritus de los grandes hombres” para que le ayudaran a alcanzar el poder que tanto desean.

Rezan a la Santa Muerte para reforzar los planes políticos. Los llevan a un templo y ahí realizan el rito; sacrifican una gallina negra y lanzan los conjuros necesarios.

López Obrador, cree que el cargo actual y el poder que ostenta es resultado de la intervención de la magia negra.

Se ha hecho hincapié en considerar a la palabra “chamán”, en lugar de brujería, en aras de la claridad; no obstante, estos términos suelen referirse a la magia maléfica que se usa para dañar a otros. A veces hay similitudes, por ejemplo, el símbolo del búho que representa un “espíritu ayudante” para las fuerzas chamánicas oscuras.

Una de las poblaciones más conocidas como sede de chamanes es Catemaco, en el estado de Veracruz, sitio al que han asistido la mayoría de los políticos y funcionarios de diversas posiciones ideológicas como Carlos Salinas de Gortari, José Córdoba Montoya, Pedro Aspe, Beatriz Paredes, Cuauhtémoc Cárdenas y Andrés Manuel López Obrador.

Los políticos y la población en general es creyente y fácil presa de chamanes, hechiceros, espiritistas, brujos y curanderos.

En el Salón Tesorería, López Obrador exhibió un mensaje que Ferriz de Con escribió en redes sociales: “Es un secreto a voces. AMLO recurre a diario a la BRUJERÍA, SANTERÍA, MAGIA NEGRA y RITUALES DE MUERTE, para llegar y acumular PODER. Ya tuvo lo que quiso… ahora va de regreso. Eso se llama KARMA o JUSTICIA DIVINA”.

Toda su estrategia de gobierno está en la confrontación en la búsqueda del mal, en el castigo, en la reprobación de hechos, en la descalificación, en señalar a los demás, en el lado oscuro de los sentimientos de la vida política y su poder piensa que se lo ha dado la magia negra.

López Obrador es un aprendiz de brujo y él, por su desesperación de llegar al poder, insistió en reiteradas ocasiones en celebrar actos rituales, ceremonias de muerte para que lo ascendieran, para reivindicar lo que no pudo ganar en 2006, para revertir la frustración que le dio el perder

López Obrador es un tipo muy ladino y un extraordinario manipulador y en su ruindad, en su oscuridad es un hombre vengativo, que desea el mal para los demás, de sus adversarios, de sus detractores, de sus venganzas personales, lo aplica y lo practica.

Esto es muy grave, para las aspiraciones de perpetuarse en el poder del presidente, porque lo exhibe como lo que es y lo deja callado sin poder negar lo innegable, incapaz de negar la evidencia, pudiera ser este escándalo, lo que marcara el final de López Obrador.

La brujería en México: un negocio ilegal que se mantiene en auge. A pesar de que existe una ley que sanciona a quien lucre con esta práctica, cada vez son más los mexicanos que buscan realizarse una limpia, hablar con los muertos, “amarrar” al ser amado o acumular poder, como en el caso de López Obrador, que es para lo que vive y que sueña con una caca-dictadura en México.