La UniSon ¿fuera de la política?

Por Francisco Javier Ruiz Quirrín

ME DETENGO con gran interés en el comentario expuesto por el analista Juan Jaime Sánchez Meza, en su espacio en TVD PRIMERA PLANA, al lanzar un reproche a la rectoría de la Universidad de Sonora, por negarse a que el campus de la máxima casa de estudios sea considerado un foro para candidatas y candidatos de todos los partidos en la presente campaña electoral.

Y más me detengo cuando diariamente tenemos la oportunidad de enterarnos de la presencia, participación y debate de las y el candidato a la presidencia de la república, en varias instituciones de educación superior del país.

Sánchez Meza es mucho más certero aún, cuando lamenta la frialdad e indiferencia de la población de la Alma Mater, ya que ni un solo estudiante levanta la voz para hacer sentir la inquietud política, natural, de su participación en la vida pública del Estado.

En la UniSon se están preparando –formando y forjando- las generaciones que en el futuro tomarán las decisiones por Sonora y su gente.

Cuando existe el criterio de que la política no es del interés de alguna persona o de alguna comunidad, se está alimentando a quienes sí participan en la política y llegan a imponer su voluntad, por encima de quienes mostraron desinterés, pero que sí se ven afectados o beneficiados por las decisiones tomadas desde el gobierno.

Universidad es “universalidad de ideas” y sin duda, debería de convertirse en un espacio para la exposición y debate de ideas.

Es muy probable -ante la negativa de la rectora Rita Plancarte a recibir candidatas y candidatos de los distintos partidos políticos en la presente campaña electoral- que exista el temor de “despertar al tigre de la agitación en el campus”.

Lo anterior podría tener algo de certeza, pero más allá de eso, se está perdiendo la oportunidad histórica de generar protagonistas del quehacer sonorense y aún más, se está evitando gran parte de la formación humanista que deben tener las y los estudiantes, precisamente para su formación integral.

Lo que queda firme en ese criterio “ranchero”, es que existe la garantía de fomentar en la población estudiantil, la idea de obtener un título con la esperanza de convertirse en empleados.

Una verdadera pena.

SOLO subrayar dos ejemplos que fijan precedente de que la impunidad estaría lejos del actual criterio de las autoridades estatales encargadas de procurar e impartir justicia… Primero, la soberbia, ostentación y autosuficiencia mostrada por el cantante NatanaelCano, luego de cometer excesos con su automóvil y sobornar a la policía… Como sea, lo “van a jalar” a declarar ante un ministerio público y esa “monserga” no se la quitará hasta recibir alguna sanción correspondiente a su ilícito… Segundo, Nathan Karim, el irresponsable joven que atropelló a una familia en marzo del 2023, podría recibir una sentencia de diez años de prisión al cargársele varios delitos, entre ellos homicidio culposo en grado de tentativa y abandono de personas… Estos hechos fijan un precedente para quienes, creyendo que no serán sancionados, son capaces de animarse a hacer lo que quieran, incluso fuera de la Ley… Y hay qué decirlo… Caso contrario es el del cantante Carín León, cuyo exceso durante el concierto en el estadio “Fernando Valenzuela”, invitando a “aventarse un perico”, quedó en medio de una impunidad y mal precedente en el ídolo musical que cree que puede hacer todo lo que se le venga en gana, incluso violar la Ley… ¿El mal ejemplo?… Sobre todo es para los jóvenes… Imagínese una reunión social entre chicos de los 15 a los 20 años de edad y uno de ellos saca alguna droga… Y lo peor, ante la negativa de alguno de consumirla, lo pueden motivar diciendo: “¡Éntrale, hasta el Carín León le pone!