Así lo veo | Apenas se empieza a conocer la verdadera afectación al Río Sonora

Por Gerardo Moreno Valenzuela

Faltando tres meses para que se cumpla el octavo aniversario del derrame de 40 mil metros cúbicos de lixiviados de Cobre que la mina de Grupo México, propiedad de Germán Larrea, realizó sobre los Ríos Bacanuchi y Sonora; y apenas se comienza a reconocer que la afectación a más de 22 mil personas sí fue grave y todavía impacta tanto a su salud, economía y estilo de vida.

Este mes de abril ha sido clave para la gente de la región, y es que después de años de presionar, ampararse, demandar legalmente y lucha social, se empiezan a tener resultados de estudios “serios” que miden el impacto que les ha generado la mina BuenaVista del Cobre con su irresponsabilidad en su Presa de Jales.

Y es que, como parte del “Plan de Justicia para Cananea”, se está midiendo el impacto en el Río Sonora y para esto en noviembre se realizó un estudio en sangre y orina en una muestra de mil 500 personas de los ocho pueblos del Río y se detectó altos y peligrosos niveles de metales pesados en sus cuerpos.

Los Comités de Cuenca del Río Sonora y la Organización Poder, informaron que se encontró una exposición homogénea y constante a plomo en más del 95% de la población, a arsénico en más del 50%, y cadmio en más del 79%. Además, hay entre un 1 y 10% catalogados como de “Alto Riesgo” y “Muy Alto Riesgo”.

Mientras que en Sangre se reportó exposición positiva y elevada a plomo entre 58 al 90% de la población, a cadmio en 17 a 59%, y manganeso entre 18 y 50%. Esto demuestra una exposición reciente y también crónica a estos contaminantes.

Este resultado por sí solo es altamente alarmante, pues es evidencia que la salud e integridad física de niñas, niños, jóvenes y adultos del Río Sonora ya está en riesgo por los efectos de este derrame, aunque antes trataron de negarlo.

Pero también, se detectó alta concentración de aluminio en el suelo de la región, lo cual cambió el PH o acidez del mismo, afectando las actividades agrícolas y ganaderas. El aire de zonas como Bacoachi se encontraron altos valores de mercurio, y las emisiones de metales como aluminio, manganeso, cobalto y níquel, están reduciendo la diversidad de especies de insectos.

Por otro lado, se calcula que la afectación económica para el 2022 es ya de más de 4 mil millones de pesos, sin contar el impacto a la ganadería, agricultura, comercio, turismo y limitantes por la falta de acceso al agua limpia y afectaciones de la salud.

En fin, apenas estamos teniendo un acercamiento al verdadero impacto del derrame del 2014 de Grupo México, ahora falta ver sí se aplicará un verdadero plan integral de remediación; que incluya atención total a la salud, porque nunca se construyó la clínica de especialidades, también acceso a agua limpia, ya que de las 10 plantas potabilizadoras solo dos sirven y de forma intermitente; y un verdadero plan de rescate ambiental y económico de la zona. Por justicia, la gente del Río Sonora lo merece.

Así lo veo yo, cómo la ven ustedes.