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Bolivia sigue sometida al Castro Chavismo

Luis Arce, presidente electo de Bolivia del partido Movimiento al Socialismo, junto con el ex presidente Evo Morales.

Las elecciones se realizaron con un sistema donde no hay democracia, no hay estado de derecho, sin división de poderes, y donde el órgano electoral y el gobierno son rehenes de la dictadura

 

Por Dr. Jorge Ballesteros

Un retroceso muy importante para la democracia en Bolivia, fue la supuesta victoria del Socialismo Castro Chavista, con el triunfo electoral del Movimiento al Socialismo (MAS).

Las elecciones de Bolivia fue un resultado sorpresivo para muchos, sin embargo se esperaba algo así, ya que a pesar de haber derribado al dictador cocalero Evo Morales, se dejó intacto al MAS ya que en el gobierno de transición de Jeanine Áñez no se desmanteló este movimiento, el cual dominaba parte de las instituciones y del gobierno de Bolivia.

El año pasado se produjo un fraude, que la propia OEA ratificó y se generó la renuncia de Evo Morales y se dio un período de un gobierno de transición, ahora ¿Por qué se repite una situación, en los mismos términos con esta elección?

La respuesta es que no ha habido transición, la presidente Jeanine Áñez, tenía que hacer la transición a la democracia y transitar quiere decir cambiar, no ha repuesto el respeto a los derechos humanos y libertades fundamentales, no hay estado de derecho en Bolivia porque sigue rigiendo la constitución de la dictadura y sus leyes, hay plena impunidad para la gente de la dictadura, no hay un solo proceso que haya avanzado.

No hay independencia ni división de poderes porque todos los poderes incluyendo el ejecutivo, ella es la cúpula, están controlados por la dictadura, una asamblea que hace las leyes que quiere y las promulga, un poder judicial que protege y da impunidad a Evo Morales y sus cómplices y habilita al candidato Luis Arce, hay una fiscalía que en lugar de perseguir a los criminales de la dictadura, está persiguiendo a los defensores de la democracia.

No ha habido transición y por eso el gobierno de Jeanine Áñez no es un gobierno de transición, sino un gobierno de contubernio.

Cuando sale el Movimiento al Socialismo diciendo en la propaganda “hemos ganado en las encuestas en primera vuelta” ella sale y los reconoce inmediatamente aun cuando solo estaba computado el 30 por ciento de los votos.

El triste papel de la presidente Jeanine Áñez, que teniendo que ser un presidente de transición, se queda como una presidente interina, lanza su candidatura a la presidencia en base a las leyes y a la constitución de la dictadura, no repone la república de Bolivia ni el estado de derecho, porque bajo la constitución de la república ya no puede ser candidata siendo presidente, tiene que esperar un período.

En las leyes de la dictadura además utiliza los mecanismos para una gran corrupción que en estos meses le hace olvidar al pueblo Boliviano toda la corrupción de Evo Morales y su dictadura de 14 años, o por lo menos la disimula de tal manera que la dictadura pasa al ataque con Jeanine Áñez y su gobierno, mal gobierno, como si esa fuera la representación de la democracia en Bolivia.

El favor ha sido totalmente negativo y el tema de no haber hecho transición, de no haber repuesto la república para recuperar el estado de derecho y para recuperar la división e independencia de poderes y entonces recuperando el sufragio universal en elecciones, ha sido el pecado mortal de Jeanine Áñez. Si tú vas a alecciones en una dictadura, vas a perder, te van a hacer fraude, que es lo que están haciendo.

El año pasado cuando sale Evo Morales, 70 al 75% del pueblo boliviano lo repudiaba y a su dictadura, y en estos 11 meses, Evo Morales ha hecho bloqueos, ha hecho masacres. La fecha de la elección del 18 de octubre se fija después de que Evo Morales por dos semanas dirige el bloqueo del oxígeno en plena pandemia y mata a decenas de personas, a más de 40 personas por falta de oxígeno, de alimento, de combustible y obliga al gobierno a aceptar la fecha del 18 de octubre como la fecha de la elección.

Con todos esos elementos, de pronto ¿el 75% del repudio popular se vuelve 52% de votación a favor de la dictadura? Eso es imposible, por eso el pueblo boliviano hoy en día se está movilizando para denunciar el fraude.

Ese pueblo boliviano que ya ha sido traicionado por Jeanine Áñez, por Carlos Meza, que ha dicho que ya perdió la elección. Se está movilizando primero para demostrar el fraude y segundo para decir que el tema no ha acabado, una elección en dictadura no le puede dar el derecho a la dictadura de poner un operador del dictador como presidente.

El foro de Sao Paulo amenazaba en las redes sociales “Ganamos Bolivia vamos por Ecuador”. No hay que olvidar que el Foro de Sao Paulo, es el brazo y la careta política de la delincuencia organizada internacional, liderada por Cuba y asentada en Nicaragua, Venezuela, Bolivia, México y Argentina, que se llama Castro chavismo.

El foro de Sao Paulo que es la careta política, ya está desgastada, por eso crearon el Foro de Puebla en México, para disimular y tratar de hacer político un grupo trasnacional criminal.

El Castro chavismo es un grupo de la delincuencia organizada, que opera como si fuera un grupo de izquierda del Socialismo del siglo XXI para oprimir a los pueblos, para violar sus derechos humanos, detentar indefinidamente el poder y operar crímenes como el narcotráfico o el terrorismo, la desestabilización, la extorsión, la corrupción y toda clase de delitos, por eso es un grupo delictivo.

Esa definición del Castro chavismo nos ayuda a entender el rol del Foro de Sao Paulo, es su brazo operativo con apariencia política, antes han desestabilizado a Bolivia lo más que han podido, han amenazada, han bloqueado, han matado gente, han producido masacres lideradas por Evo Morales, desde el exilio, financiado y protegido por el gobierno de Fernández Kirchner, bajo la dirección del G2 cubano,  que es el creador de este gran fraude que han sido las elecciones de Bolivia, y que han dado como ganador a Luis Arce, testaferro de Evo Morales.

Las elecciones en Bolivia se realizaron en un sistema donde no hay democracia, no hay estado de derecho, con perseguidos, presos y exiliados políticos, sin división de poderes y donde el órgano electoral y el gobierno son rehenes de la dictadura, en consecuencia solo puede ganar con fraude la dictadura. Otra maniobra del crimen organizado.

En México ya se vive una dictadura Castro chavista, igual que en Bolivia, con el control del poder ejecutivo, legislativo y judicial en las manos del presidente, la destrucción de los contrapesos al Ejecutivo federal, está mermada la división de poderes, se viola repetidamente la Constitución.

Las torpes políticas de López Obrador y las tropelías y corruptelas de su gente de Morena, han provocado el desgaste de su popularidad y de su partido, como lo hemos constatado en las recientes elecciones en Hidalgo y Coahuila donde la gente manifestó su descontento y hartazgo del gobierno de AMLO,

Asimismo la falta de apoyo popular se ha hecho patente ante el fracaso de la marcha del supuesto millón de seguidores del presidente para sacar a las gentes de FRENAAA del Zócalo y que no juntaron ni siquiera 5 mil personas, a pesar de las dádivas y pago en efectivo a los acarreados.

Esto se ve claramente en la gente que manda todos los días al Zócalo, para que insulten y amedrenten a los

La presidenta boliviana Jeanine Áñez, ha encabezado un gobierno de contubernio, no de transición.

ciudadanos de FRENNNA que ocupan esa plaza, AMLO tiene que echar manos de porros, vagos, y Centroamericanos, porque ya no tiene seguidores, y tiene que recurrir a mercenarios, que por 100 o 200 pesos lanzan insultos vulgares y groserías a gente que no conocen y que no les ha hecho daño alguno.

En la reciente visita a Nuevo Laredo, AMLO sale huyendo como rata ante los ciudadanos de FRENAAA, que le reclamaban airadamente la falta de resultados de su desastroso gobierno, no lo dejaron hablar ni siquiera 4 minutos, se disculpó, que por la pandemia, la sana distancia, etc. Esto se está viendo ya en todos los sitios a donde va López, la gente lo abuchea, lo increpa y tiene que salir corriendo, como pasó en Veracruz y en su propia tierra, Macuspana, Tabasco.

Es tanto el rechazo de la gente y el miedo que siente, que llegó a Tamaulipas con un grueso abrigo con el cuello levantado, a pesar del calor, para ocultar el chaleco antibalas de cerámica que ha empezado a portar.

AMLO ya no tiene pueblo, han dejado de creer en él, ya no jala a la gente como lo hacía antes, entonces lo único que le queda para conservar el gobierno, es hacer un gran fraude electoral como lo hizo Evo Morales en Bolivia, y como lo hace Daniel Ortega en Nicaragua, o Nicolás Maduro en Venezuela, que es la única forma en que los dictadores que son odiados por el pueblo pueden perpetuarse en el poder.