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¿Cómo se puede ayudar a un adicto?

La verdadera rehabilitación está afuera de los centros, en donde la persona puede usar de su libertad para consumir o no

Por Guadalupe Rojo

El túnel oscuro de las adiciones tiene una luz. ¿Pero cuáles son las alternativas y cómo hacerle para enfrentar esta grave enfermedad?

1.- Ármese de paciencia, esta es una enfermedad de por vida, no pretenda lograr adelantos inmediatos, piense además que las recaídas son siempre probables.

2.- Los adictos necesitan tratamientos médicos, grupos de apoyo o centros de rehabilitación, no pretenda lidiar de forma empírica con el problema, su ser querido necesita un psiquiatra, un grupo de apoyo como alcohólicos anónimos, medicamentos y muy probablemente un periodo de desintoxicación en un centro de rehabilitación.

3.- Deje que la persona adicta se haga responsable de sus actos, no la rescate constantemente de sus deudas, o dé la cara por ella en los problemas a los que se tiene que enfrentar, de por sí su voluntad está quebrada, mucho más lo estará si usted asume la responsabilidad que le toca a él.

4.- Es bueno para los adictos contar con el amor firme de sus seres queridos, que lo apoyan y lo impulsan, pero que le marcan límites que debe respetar.

5.- Infórmese lo más que pueda sobre la enfermedad, hay mucha información que lo puede ayudar a comprender mejor la adicción.

6.- Amor con firmeza es lo más adecuado para ellos.

¿Son buenos los centros de rehabilitación?

Un centro de internamiento para la rehabilitación es la única forma de que un adicto que está enganchado en el abuso de las drogas, deje de consumir. Pero dejar de consumir adentro del centro no significa necesariamente que la persona se va a rehabilitar después del tratamiento, pero al menos sí se logra la desintoxicación.

Si el adicto después de estar en un centro de rehabilitación no acude a sus citas médicas y a un grupo de apoyo, es muy probable que la recaída llegue en poco tiempo sino es que de inmediato. La verdadera rehabilitación está afuera de los centros, en donde la persona puede usar de su libertad para consumir o no.

Desenmascarando mitos

Mito: Soy un adicto funcional, trabajo, compro la droga con mi dinero y puedo llevar una vida normal.

NO HAY ADICTOS FUNCIONALES, hay adictos que están en un proceso menos avanzado de la enfermedad, pero todo vicio no reprimido se convierte en uno mayor, la drogadicción es una enfermedad progresiva y mortal si no se detiene.

Mito: Sólo consumo marihuana y la marihuana es natural.

La marihuana puede ser una droga menos dañina que el cristal, pero también es una droga que produce mucha adicción que envejece prematuramente, y que daña el cerebro.

Cuando la marihuana es usada de modo medicinal, hay que saber que esta se trata de diferente manera que la que se usa de forma recreativa, se extraen de ella solo los ingredientes que pueden ayudar a aliviar los síntomas de algunas enfermedades. En nuestro país no hay este tipo de tratamientos.

La marihuana es la puerta de entrada al mundo de las drogas, la gran mayoría de los adictos empiezan a consumir otro tipo de drogas más peligrosas después de la marihuana, no hay que ser ingenuo pensando que los adictos se quedan solo consumiendo marihuana.

Mito: No le hago daño a nadie.

La drogadicción es una enfermedad sistema, afecta a la familia, afecta al grupo de trabajo y afecta a la sociedad, una persona adicta no es lo productiva que debe, se calcula que un adicto afecta alrededor de veinte personas de su entorno.

Mito: Voy a dejar las drogas pero el alcohol no.

Este engaño es muy común, a los adictos a las drogas les cuesta mucho entender que el alcohol también es una droga, y que para ellos es el detonante que desencadena el consumo sin control. Para ellos solo hay dos opciones, sobriedad total o consumo sin control, es por eso que tan importante asistir a un grupo de apoyo como el de alcohólicos anónimos, o narcóticos anónimos.

Es muy importante que el adicto encuentre un grupo de apoyo en el que se sienta cómodo, para que pueda compartir sus experiencias y nutrirse de las experiencias de los compañeros y de quien guía el grupo.

Al respecto San Juan Pablo II dijo que para él, el mejor invento del Siglo XX es Alcohólicos Anónimos.

Quien conoce el túnel oscuro y doloroso de las drogas tiene en AA una luz.

Busca incansablemente la verdad.