DestacadaGeneral

En política económica, más de lo mismo

Por Imanol Caneyada/

El Jefe del Departamento de Economía de la Universidad de Sonora, Joel Enrique Espejel, advierte que si no cambiamos el modelo maquilador no vamos a crecer

A pesar de que ciertos indicadores económicos han mejorado respecto del año pasado, la política económica del actual gobierno del estado le apuesta a los mismos caminos que se han recorrido en los últimos veinte años: atraer a la inversión extranjera (maquiladoras) y la industria minera, advierte en entrevista el jefe del Departamento de Economía de la Universidad de Sonora, el doctor en economía Joel Enrique Espejel Blanco.

2-joel-espejel-blancoMientras que en el penúltimo trimestre de 2015 hubo un crecimiento económico de sólo 0.8% en Sonora; ya en el último trimestre del año anterior y en el primero y segundo de 2016 la economía creció 2.7%, es decir, estamos mejor de cómo estábamos, reconoce el académico.

En el rubro de generación de empleo hubo un notable crecimiento en el primer trimestre del presente año con la generación de 15 mil nuevos empleos, sin embargo, para el segundo trimestre ha habido un decrecimiento de menos 882 empleos, lo que nos indica, explica el doctor Espejel, que también habrá una desaceleración del crecimiento económico, aunque todavía no dan a conocer las cifras.

El entrevistado señala un foco rojo que no ha podido solventarse aún: el de la desigualdad laboral, es decir, la aplicación de la equidad de género en las políticas de contratación. Siguen contratándose más hombres que mujeres en Sonora y los salarios no guardan equidad.

Según Espejel, la reciente aceleración de la economía en la entidad está relacionada con la inversión en infraestructura pública: reparación de carreteras, modernización del puerto de Guaymas, remodelación de aduanas y aeropuertos.

Lo anterior ha permitido generar un aparente crecimiento; no obstante, advierte el economista, ésta no es una solución a largo plazo, pues implica aumentar la deuda pública (ya está en 32 mil 600 millones de pesos) e hipotecar el futuro de los sonorense por veinte o treinta años.

La deuda pública es un problema muy serio que acarreamos sexenio tras sexenio, opina el doctor Espejel; cada inicio de administración se anuncia una reestructuración de la misma, que no es más que la contratación de más deuda; la cuestión aquí es que Sonora está calificada por Standard and Poor´s como 2AB, lo que significa que los intereses de los préstamos que contrae el Gobierno son muy altos, es dinero muy caro que merma el presupuesto anual.

2-joel-espejel-blanco-2Además, agrega el entrevistado, el gobierno de Sonora no ha sido capaz de generar más ingresos vía impuestos, léase renovación de licencias, renovación de placas, traslado de dominio, etcétera; es un tema al que no quieren entrarle porque aquí nadie queremos pagar impuestos.

Ello implica una gran dependencia del gobierno federal, el cual ya ha empezado a aplicar los recortes en educación e infraestructura, por ello este trimestre estamos viviendo una desaceleración económica.

En opinión del entrevistado, las políticas económicas del actual secretario de Economía, Jorge Vidal Ahumada, son más de lo mismo y se remontan a por lo menos 20 años o más. Crear infraestructura para atraer más inversión extranjera a la que llaman industria, cuando en realidad se trata de maquiladoras.

Con ello, ahonda el doctor Espejel, no creamos ningún tipo de valor agregado, únicamente proporcionamos mano de obra capacitada y productiva pero muy mal pagada.

Los centros educativos de la entidad educan a los estudiantes para que se integren a este mercado laboral que únicamente se ocupa de ensamblar diferentes piezas, no de diseñar ni de crear; necesitamos gente que genere nuevo conocimiento que se aplique aquí, en Sonora, para fortalecer la industria interna, crear valores agregados y no seguir dependiendo del modelo maquilador.

En ese sentido, denuncia el académico, el Plan Estatal de Desarrollo establece una serie de ejes y objetivos muy bonitos, pero no está vinculado con el presupuesto ni marca metas ni indicadores ni establece parámetros, no es más que una serie de buenos deseos.

A un año, agrega, aún no tienen listo el diagnóstico ni por sectores ni por regiones económicas, por lo que las diferentes Secretarías están trabajando a ciegas y muchas veces duplicando esfuerzos, sin que haya eso que ahora anuncian tanto: transversalidad en las políticas públicas.

Es urgente cambiar el modelo maquilador por uno que le apueste a la micro, pequeña y mediana empresa sonorense y reforzar el mercado interno, establece el doctor Espejel, quien proporciona una serie de cifras que confirman la dependencia que Sonora tiene del modelo maquilador:

El 70% de las empresas sonorenses dependen del dinero público, su principal cliente son instituciones como el propio gobierno del estado, los municipios o universidades públicas; el otro 30% exporta sus productos.

El otrora poderoso sector primario, agricultura y ganadería, que llegó a representar el 25% del PIB sonorense, actualmente representa sólo el 3.4%; la mayoría de la carne de res y de puerco, los granos que consumimos en Sonora se importan de otros estados o de Estados Unidos.

Ante este panorama, y si no cambiamos de política económica, no vamos a crecer, sentencia el doctor Espejel.