Entonces, ¿quién redactó la carta-renuncia de Adán Augusto?

Por Francisco Javier Ruiz Quirrín

LO QUE ha trascendido en fuentes cercanas a palacio nacional es que Adán Augusto López Hernández y Ricardo Monreal Ávila, están sufriendo el mismo dolor.

¿Por qué el coordinador de la bancada de MORENA en la Cámara de Diputados hizo valer su agravio enviado desde palacio nacional al negarse a asistir a la reunión de consejo nacional de su partido?

¿Por qué Adán Augusto se hizo para atrás en el último momento y finalmente asistió a la sesión de este domingo?

La verdad es que ambos personajes han recibido frialdad e indiferencia desde las altas esferas de poder y no solo eso. Son vulnerables a cualquier señalamiento relacionado con sus colaboradores de antes y de ahora.

Se necesita ser muy ingenuo para no pensar que el escándalo protagonizado por el exsecretario de seguridad en el Tabasco de Adán Augusto (su exsecretario de seguridad, Hernán Bermúdez, acusado formalmente y con orden de aprehensión en su contra por estar ligado a “La Barredora”, brazo del Cartel Jalisco Nueva Generación) envolvió completamente al aún coordinador de la bancada de MORENA en el Senado con un eco tan extraordinario que solo se explica con el impulso de alguien muy poderoso o poderosa.

Por su lado, Monreal sintió la necesidad de declararse públicamente como un sujeto que camina rumbo a su jubilación en la política, lo que es más falso que un billete de dos pesos.

El aún coordinador de la fracción de MORENA en la Cámara de los Diputados utilizó esa estrategia para evitar ser un blanco de alguien muy poderoso, o poderosa, que le creara una narrativa vergonzante.

Adán Augusto López Hernández, luego de pensarla durante una semana redactó su renuncia a la titularidad del grupo parlamentario de MORENA en el Senado, así como a la jefatura de la Junta de Coordinación Política, la que estuvo a punto de hacer efectiva, hasta horas antes de la sesión del consejo nacional, al que finalmente se presentó sin añadir mayores declaraciones ante los medios de comunicación.

Dicen los que aseguran estar enterados que fue el mismo Adán Augusto quien hizo circular el texto de su renuncia y fue él mismo quien se encargó de declararla “fake news”.

Y es que aunque se intente negarlo, la mano de Andrés Manuel López Obrador sigue pesando muy fuerte en palacio nacional.

El también exgobernador tabasqueño recibió otra oportunidad, aunque su destino está más que “cantado”.

LA PRESENCIA de Adán Augusto en esta sesión del consejo nacional de MORENA, se arropó con gritos de ¡No estás solo!, al igual que sucedió aquella vez con Cuauhtémoc Blanco, cuando Ricardo Monreal giró la instrucción de protegerlo ante el inminente desafuero del también exgobernador de Morelos, que buscaba sentarlo ante tribunales para que pagara por sus abusos contra mujeres… En épocas pasadas, lo ocurrido en Tabasco con Bermúdez y su extensión a quien fuera su jefe en el Gobierno del Estado, hubiera sido suficiente para decretar la renuncia, tal y como fue redactada por el mismo Adán Augusto… Pero en la 4-T no son iguales a ese “deplorable” pasado… Ahora se perdona a todo priísta pasado por la pila bautismal de AMLO.

TRATANDO de aligerar las cosas, la diputada Diana Karina Barreras informó que ha solicitado al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TRIFE) que reduzca o desaparezca la sanción convertida en disculpa por 30 días consecutivos a Karla María Estrella por haberla “ofendido en razón de género”…Es una acción con efecto retardado y, además, el Tribunal no puede desdecirse de una de sus “serias” sentencias… La verdad, es que este escándalo observado ya por todo el mundo (literalmente) acompañará a Diana Karina toda su vida, aunque en su futuro haya una candidatura.

POR CIERTO, el gobernador Alfonso Durazo ha dado cumplimiento a una agenda personal muy agitada… En los días redientes le ha dado la vuelta al Estado entregando beneficios a la población y como presidente del consejo nacional de MORENA, presidió la sesión del consejo el día de ayer alá en el centro del país… Vaya energía.