Mesa del Seri, entre el hartazgo y temor

Por Gerardo Moreno/

“Aquí la mayoría ya ha sufrido un robo, han agarrado parejo y a plena luz de día. Incluso durante las mañanas y casas donde están presentes sus habitantes”

¡Ya no es posible! ¿Qué vamos a hacer? Actuar por nuestra cuenta, si no resuelven nada

A pocos minutos del casco urbano de la ciudad de Hermosillo se encuentran decenas de poblaciones rurales que muchas veces se ven abandonadas y lejos de los ojos de las autoridades así como programas gubernamentales, quedando en la indefensión ante robos y drogadicción. Algunos aguantan por temor, pero otros, como sucedió en la Mesa del Seri, la situación se vuelve insoportable.

El fin de semana pasado surgió la noticia que los vecinos del Ejido La Mesa del Seri —comunidad ubicada a 18 kilómetros al oriente de la ciudad— habían llegado al límite y al hartazgo, ante la gran cantidad de robos a casas y asaltos. Lanzaron la advertencia: si no había respuesta tomarían la vigilancia ellos mismos.

El pasado lunes Jesús Villalobos, Secretario del Ayuntamiento, declaró ante los medios de comunicación que sí se había tenido “un poco abandonadas las comunidades rurales de Hermosillo”. Primera Plana realizó un recorrido por la Mesa del Seri para corroborar que el ambiente del lugar realmente se ha vuelto tenso.

Situación insostenible

El señor Mario y sus dos hijos, suben a un remolque los pocos muebles que le quedan. Lo que antes era su hogar (ubicado en los límites del Ejido), el refugio de su familia, ahora, por los constantes atracos, es un lugar inhabitable.

La vivienda luce desolada. Les rompieron vidrios y puertas, robaron láminas, desmantelaron máquinas de trabajo y hasta un automóvil, del cual solo quedó chatarra para vender y un motor inservible en medio del patio.

La gota que derramó el vaso fue cuando le robaron el transformador de la luz, que con las altas temperaturas, ocasionó estuvieran a punto de deshidratarse y por eso hoy suben sus cosas a un carro para mudarse.

Igual ven la situación la mayoría de los vecinos de Mesa del Seri, (lugar donde según el último censo viven cerca de mil personas), ¡ya no es posible! ¿Qué vamos a hacer? “Actuar por nuestra cuenta, si no resuelven nada”, se responden a sí mismos.

Ambiente tenso y de amenazas

El señor Salvador Díaz Holguín, vocero de la comunidad, nos recibe en el lugar y nos da un recorrido por la Mesa del Seri para ver la situación y el por qué los pobladores de ese sitio decidieron hacer un reclamo público y fuerte a la autoridad.

“Aquí la mayoría ya ha sufrido un robo, han agarrado parejo y a plena luz de día. Incluso durante las mañanas y casas donde están presentes sus habitantes”, platica mientras avanzamos por las calles de la zona, donde se respira un aire a pueblo.

Explica cómo algunos han sufrido hurtos constantes, hasta cinco, ocho y quince veces seguidas. Al platicar con los habitantes, todos dicen saber quiénes son y dónde viven los ladrones, pero los que se han atrevido a denunciar han sido amenazados con causarles daño y hasta de muerte.

Hay varios casos, algunos rayan en la burla y descaro. Primero, salvador Díaz, comenta que a él le desmantelaron un carro dentro de su mismo porche, a puerta cerrada y a plena luz de día.

A otro vecino le han robado ocho veces, la primera se llevaron solo leña, después lo que encontraban en el patio, luego le abrieron un “boquete” en la pared para entrar a la casa. Taparon el hoyo pero los maleantes lo volvieron a hacer. Y lo último, se llevaron parte del cerco.

A otra vecina le robaron el mandado dentro de su misma casa, mientras ella estaba barriendo el patio. A un señor le robaron su pensión, de solo 2 mil 500 pesos, que es su único sustento.

A otro vecino los hurtos descarados y las amenazas de hacerle daño fueron tan fuertes que lo obligaron a salirse de su casa dejando todo atrás, vehículos desmantelados, un patio lleno de basura y una carcasa de casa.

Incluso, hay casos donde asaltan a los niños que van a la escuela. Al señor Mario, además de robarles el transformador de luz, llegaron al colmo que le trataron de robar y le patearon la puerta estando sus hijos dentro de casa.

El ambiente que se vive en la localidad es realmente tenso y caliente. Se palpa el coraje y rabia de los habitantes.

Había respuesta, pero quedó rebasada

La señora Teresa Altamirano, enlace del Ayuntamiento en la Mesa del Seri, comentó que personalmente le consta que cuando los vecinos le hacían una denuncia rápido marcaba a la comandancia y los agentes acudían de inmediato y así lograban recuperar lo robado. El problema era cuando tardaban días en denunciar, ya no podían hacer nada.

Explicó que siempre recibía entre dos o tres denuncias diarias, pero últimamente si fueron bastantes. Aclaró que los delincuentes saben quién es y la han amenazado, incluso se “hacen vivos” pasando frente a su casa para gritarle. Aseguró que seguirá, pues sabe que lo hace por el bien de los niños, jóvenes y toda la comunidad.

Drogas, el fondo del problema

La conclusión de los vecinos de la Mesa del Seri es casi la misma, el problema se origina porque los jóvenes que no tienen muchas cosas qué hacer en la comunidad y se enganchan en las drogas que les surten alrededor de siete “tiraderos” que hay en todo el pueblo.

Casi todos saben dónde están ubicados estos centros de narcomenudeo. Entonces, explican, al necesitar dinero para mantener su vicio, buscan donde sea y a como dé lugar; incluyendo robarle a sus mismos vecinos.

El problema creció al ser desatendido el lugar por las autoridades, al no llegar a esta comunidad programas de atención, prevención y para alejar a los jóvenes de las drogas.

Los habitantes reconocen que, los últimos días, las autoridades han realizado operativos en la comunidad donde hay detenidos y que se hacen recorridos constantes. Pero viendo el ambiente, esperan que no se relajen las acciones pues puede pasar algo peor. Una solicitud fue que se instale una caseta de la Policía Municipal.

Coordinación un factor importante

Por otro lado el Comandante en Jefe de la Jefatura de Policía Municipal, Daniel Aguilar Delgado, comentó que al municipio de Hermosillo les corresponden varias zonas rurales, desde San Pedro y el Tajazal hasta la Mesa del Seri, San Bartolo y el Molino de Camou, entre otras. La forma de trabajo con estos Ejidos es a través de un enlace del Ayuntamiento en cada una de ellas, esta persona tiene los teléfonos directos de los comandantes a quien le toca.

Cuando sucede un imprevisto, como un delito, los enlaces hacen el reporte policial y se mandan unidades, que dependiendo la lejanía del ejido tardan en llegar, y atienden la denuncia inmediatamente.

Por otro lado también realizan recorridos constantes a estos lugares, pero muchas veces sin el apoyo de los ciudadanos el agente no sabe realmente si hay problemas o no. Por esto, dijo el Comandante Aguilar, es de suma importancia la coordinación entre policía y ciudadanos.

Aclaró que precisamente esto fue lo que ocurrió en la Mesa del Seri, donde a falta de denuncias no se podía actuar. Fue cuando los vecinos decidieron interponer las quejas, que se atendió el reclamó, ya se habló con los vecinos y se instalará un Comité Ciudadano de Seguridad para trabajar de manera conjunta en resolver la problemática, atender las quejas y llevarán los programas del Ayuntamiento y de la Secretaría de Seguridad Pública.

El Jefe policiaco agregó que continuarán con los recorridos constantes tanto en la Mesa del Seri, como en el resto de las comunidades rurales. Además que pone a disposición su número telefónico (6621018199) para quien desee hacer una denuncia o se instale un Comité Ciudadano de Seguridad en su colonia (también dentro de la ciudad) lo puede hacer.