Sobrevivientes de ABC, blanco de ‘bullying’

Por Daniel Sánchez Dórame/

En algunos casos con información y colaboración entre padres de familia, maestros y especialistas, han logrado contener el fenómeno, pero hay otros ambientes donde son víctimas de abusos y maltratos

Como si fuera poco el dolor físico y el sufrimiento emocional que les provocan las heridas a consecuencia del incendio en la Guardería ABC, niños que sobrevivieron a la tragedia que el 5 de junio de 2009, son víctimas de bullying.

Paulina Villaescusa, de siete años, quien sobrevivió al incendio de la estancia infantil y que probablemente es una de las que padece mayores secuelas, como la amputación de una de sus piernitas y quemaduras en más de 50% de su cuerpo, narró que “a veces algunos niños de aquí tengo que explicarles, porque a veces me preguntan ‘¿qué te pasó en la pierna?’, ‘¿qué te pasó en la piel?’, y yo les digo que fue un accidente y que no fue mi culpa”.

“Aunque inocentes, los niños que hacen bullying suelen ser muy crueles”, declaró Adriana Villegas, mamá del pequeño Héctor Manuel, quien sobrevivió al incendio con quemaduras en 80% de su cuerpo, incluyendo la mitad del rostro, y relata lo ocurrido recientemente en una piñata.

“Llegamos a una fiesta infantil y al entrar Héctor se fue directamente al brinca-brinca, se subió y al estar arriba veo que se sienta en el brinca-brinca, dobla sus rodillas y baja su cabeza. No me levanté, no hice nada. Después bajó, vino hacia mí, le pregunté qué le había pasado y me dijo que un niño le estaba diciendo a los demás que no jugaran con mi hijo porque estaba muy feo, ‘que soy un monstruo’”, relató Adriana Villegas, con el rostro compungido por la aflicción al recordar aquel momento.

“Lamentablemente aquí no hay respeto, los padres no lo inculcamos, en México desgraciadamente no tenemos el conocimiento de cómo actuar al ver a un niño con alguna discapacidad o diferencia, no necesariamente un niño quemado sino con cualquier discapacidad no tenemos esa cultura, no hemos creado esa cultura, en consecuencia hay mucho bullying”, recalcó la madre.

Héctor y Paulina estudian en la misma escuela junto con otros cinco sobrevivientes del incendio de la Guardería ABC. Delfina Bueras, mamá de Paulina, explica cómo han logrado contener el abuso y el acoso en dicho plantel educativo.

“Una especialista nos apoya, cada inicio de ciclo va a la escuela y se pone de acuerdo con la sicóloga de la escuela, las maestras, lo platican, van a los grupos y platican con los niños para que los estudiantes nuevos sepan quiénes son los niños especiales, porque están cinco niños lesionados en la misma escuela, entonces eso ayuda a que todos estén enterados”, detalló.

Con información y colaboración entre padres de familia, maestros y especialistas, el fenómeno del bullying se ha logrado contener en las escuelas, pero hay ambientes donde los sobrevivientes del ABC se desenvuelven y donde falta educación de la ciudadanía para que éstos no sufran abusos y maltratos.

Muestra de la efectividad de estas acciones es el caso de Alejandro Martínez. Su mamá Mirna Robles recordó que cuando éste ingresó al colegio los niños lo rechazaban y no querían jugar con él: “Por los comentarios que nos hizo supimos que sus compañeritos lo hacían a un lado, incluso una vez un niño le dijo que él no jugaba porque era del ABC. A Alejandro le dolió mucho, pero después que se platicó con los padres de familia, maestros y alumnos, ahora es uno de los consentidos.

“Identificaron al niño, platicaron con él y ahora es de sus mejores amigos; es muy importante que todos los padres platiquen con sus hijos, y no sólo sobre el caso de los niños del ABC, sino en general hay que inculcarles el valor del respeto y la tolerancia a nuestros hijos”, indicó Mirna Robles de Martínez.

A cuatro años aún persisten las dudas

A cuatro años de haber ocurrido el incendio en las instalaciones de la Guardería ABC que cobró la vida de 49 bebés, aún persisten las dudas sobre la causa de la conflagración de la estancia infantil.

El pasado 21 de mayo padres de los sobrevivientes de la tragedia denunciaron que el incendio fue provocado para esconder la deuda pública que generó la administración del exgobernador de Sonora Eduardo Bours Castelo.

Miembros de Manos Unidas por Nuestros Hijos, agrupación que reúne a padres de los sobrevivientes del siniestro del 5 de junio de 2009, afirman que el incendio fue perpetrado por tres personas comandadas por quien identifican como Carlos Andrés López Meza, chofer y guardaespaldas de Juan Carlos Lam Félix, exsecretario técnico.

Durante la semana, diversas agrupaciones que aglutinan a familias víctimas de la tragedia realizaron ceremonias conmemorativas al cuarto aniversario de la tragedia.