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Tecolote llanero; adaptando su vuelo al ritmo de la ciudad

Por Jesús Moreno Valenzuela

Juan Manuel Cinco, médico veterinario en el Centro Ecológico

Eran las 10 de la mañana, un día soleado casi asomando la primavera sonorense. En el Centro Ecológico de Hermosillo el clima era fresco. Comenzábamos una aventura para conocer más sobre una especie que se ha ido adaptando e incluso puede llegar a establecer su guarida en diferentes lugares de la ciudad. 

Juan Manuel Cinco Figueroa, médico veterinario, nos recibió en el zoológico.    

Caminamos durante diez minutos desde la entrada principal hasta jaula donde dos amigables tecolotes tienen su madriguera.

Llegando a la jaula, Juan nos empezó a platicar sobre la Athene Cunicularia nombre científico del tecolote llanero o mochuelo. Existen alrededor de 21 subespecies que se pueden encontrar en diferentes regiones del mundo y ésta es una que se encuentra en Hermosillo.

Rescate tecolotero

A principios de febrero del presente año sucedió algo que los especialistas del Centro Ecológico de Hermosillo no se esperaban. Llegó una señora angustiada y muy a prisa con un búho en sus manos que se encontraba muy enfermo, la mujer mencionaba que durante la noche previa escuchaba el canto de unos búhos como si estuvieran platicando y cuando ella se asomó a través de la ventana vio como un búho se encontraba tirado en el patio de su casa, pero no percibió al otro que le contestaba los cantos, entonces esta ciudadana se comunicó a la brevedad con el zoológico de Hermosillo y, con la ayuda del director de dicha institución, un equipo de especialistas fue a la morada de la mujer que reportó el problema.

En la vivienda encontraron a la especie y lo recogieron. Notaron que traía olor a zorrillo y estaba retorciéndose del dolor. Con cuidado se lo llevaron a las instalaciones del Ecológico, le dieron el tratamiento adecuado mediante analgésico, desinflamatorio, fue todo un proceso y como no podía comer se le daba el alimento directamente al pico.

Es un ave muy peculiar porque ha logrado adaptarse y convive en medio del ajetreo citadino.

Poco a poco los cuidados fueron dando frutos, el pequeño búho ya estaba mejorando, ya se lograba levantar por sí mismo, ya se subía arriba de un palo y se mantenía en pie, hasta lograr que la salud del búho volviera en sí.

Después contactaron a la señora que lo llevó y decidió liberarlo en la zona que se lo había encontrado ya que ahí se encontraba la pareja, y al día siguiente el pequeño búho que estuvo al borde de la muerte logró volar alto en vida libre pues su vida había salvado.

“Es una historia muy interesante y muy suave, poder haber logrado que ese búho estuviera en vida libre”, dijo el médico Cinco Figueroa.

Con detalle cuidan al tecolote

Son muchos los cuidados que se les brinda a este tipo de especies en cautiverio. En el Ecológico hay cuatro ejemplares, los cuales mantienen bajo constante cuidado y atención. En el exhibidor cuentan con un tronco de palma con sus respectivas madrigueras para cada uno, y existen varios encargados de área, y el trabajador todos los días, sin falta, va y les quita el agua sucia, les pone limpia, le sirve su comida en los comederos, y siempre está al pendiente por cualquier anomalía que él llegue a notar avisa a las autoridades para checarlo y darle un tratamiento adecuado en caso de que se encuentre enfermo o algún síntoma anormal que pueda llegar a tener.

La dieta que se les brinda diaria es de pollo o carne, aproximadamente una ración de 50 gramos cada uno, y su alimentación en vida libre es de pequeños mamíferos o algunos reptiles pequeños como son las lagartijas

El aseo propio de estos es acicalándose ellos mismos entre las plumas con su piquito y se van limpiando generalmente, y ahí en su hábitat entra el encargado con su escobetilla y limpia lo que viene siendo excretas, tierra, basura que haya caído por accidente o lo que quede de alimento viejo para la hora de volverle a servir la comida este limpia la zona.

También mencionó que cuando algún tecolote se llega a enfermar o requiere desparasitación o algún tipo de medicamento especial, lo que hacen es dárselo mezclado con el alimento, ya si se ocupa algún tipo de antibiótico se le puede poner mediante al agua o directo mediante una inyección y el medicamento es especial para dicho animal.

Cinco, aclaró que en estos momentos el tecolote llanero no se encuentra en peligro de extinción, tiene un estatus de preocupación menor y se mantiene estable. Comentó que la causante principal de pérdidas de ejemplares es por la destrucción de su hábitat porque muchas veces las poblaciones están creciendo, se va invadiendo más su territorio y lo que hacemos es desplazarlas. “Como la población crece, entonces con las construcciones, las casas y todo eso, los tecolotes van buscando otro sitio de anidación, por eso es que muchas veces nosotros los podemos encontrar en casas que están a las orillas de Hermosillo”.

Estos animales son pacíficos, durante el día están en constante actividad y al atardecer se preparan para buscar su alimentación, no son animales muy agresivos, y la invitación es a respetarlos y cuidarlos.