DE PRIMERA MANO

2017: La incertidumbre

Por Francisco Javier Ruiz Quirrín

 

rq-columnaEL NUEVO AÑO es probablemente el año que más incertidumbre ha generado en México. Los mexicanos no tenemos certeza en nuestro futuro en lo económico, en lo político, en lo social. Todo lo demás que se desprende de esos aspectos, están envueltos en el misterio.

Hay infinidad de preguntas en el aire, sin respuesta. Existe asimismo un temor fundado de caminar rumbo a una ingobernabilidad porque el crimen le está ganando la lucha al Estado Mexicano, a la Ley y a las distintas corporaciones encargadas de la seguridad pública en nuestro país.

La historia nos ha enseñado que cuando los intestinos de Juan Pueblo comienzan a crujir por falta de alimento, es carne de cañón que facilita la presencia de los movimientos armados.

No es para menos, si podemos corroborar todos los días través de las redes sociales que la difícil situación en que ha puesto al país el gobierno del presidente Enrique Peña Nieto, es caldo de cultivo para quienes quieren acceder al poder con el sólo propósito de hacerlo, sin importarles el caos y la anarquía que pueden originar.

Diariamente a través de las redes sociales, somos testigos de la alimentación de escenarios catastróficos con miras a lograr el desprestigio de personas, pero jamás imaginando siquiera el abono que generan avivando la llama del desorden, la desunión y el odio entre los mismos mexicanos.

Parte de esa incertidumbre es la llegada de Donald J. Trump a la presidencia de los Estados Unidos. Hasta este momento ese hombre ha sostenido sus amenazas contra México y los mexicanos.

No se necesita tener dos dedos de frente para concluir que se requiere de un urgente llamado a la unidad de los mexicanos, por encima de su color de preferencia o ideología, anteponiendo los grandes intereses de la Nación por encima del interés personal o de grupo.

Si un abierto enemigo declarado del país va a cumplir sus amenazas, será mucho más fácil para él lograrlo entre una comunidad dividida. En cambio, si se encuentra con una Nación unida, difícilmente alcanzará su propósito.

Es la hora, entonces, de la unidad nacional, como jamás se ha logrado en casi 200 años de Estado independiente, donde nos hemos desangrado, primero entre liberales y conservadores y después entre panistas y priístas, con invitaciones a la fiesta política de la aún incipiente izquierda mexicana.

Con este tipo de reflexiones, tenemos qué concluir que la actual crisis nacional también es una oportunidad de oro para crecer como mexicanos y como país.

Alguien escribió hace poco que se advierte increíble que el gobierno juegue con gasolina en una Nación que utiliza cohetes en sus fiestas. Y tienen mucha razón.

Ahora, habrá qué ver cuantos grupos se conforman en México, donde destacarán aquellos que aman inmensamente a su país y quienes, a río revuelto, buscarán la mejor raja a sus pasiones.

 

EL DÍA 20 de Enero Mr. Trump asumirá la presidencia de los Estados Unidos. ¿Cumplirá su promesa desde el primer día de su mandato de renegociar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte?

¿QUÉ Reacciones “populares” se registrarán a lo largo y ancho de México, en protesta por el aumento en los precios de las gasolinas?

¿CÓMO ACTUARÁ el comité ejecutivo nacional del PAN, tratando de separarse del compromiso asumido por el gobierno federal de “liberar” el precio de las gasolinas en el país, si esta medida no es consecuencia de la aprobación de la Reforma Energética?

¿CÓMO viviremos la “cuesta de Enero” con el alza generalizada en los productos de primera necesidad como consecuencia del aumento al precio de las gasolinas?

¿ESTARÁN conscientes los “críticos” de Peña Nieto, de que desapareciendo el Impuesto Especial sobre Productos y Servicios en las gasolinas se eliminarán del presupuesto del gobierno apoyos a los servicios de salud y combate a la pobreza en México?

¿LUIS Videgaray seguirá siendo el “hombre fuerte de México” ante Donald Trump, lo que sin duda alguna lo encaminará a una candidatura presidencial para el 2018?

¿ESTARÁ listo el gobierno para hacer el anuncio de que México aumentará considerablemente el número de pobres?

¿HABRÁ aún algún liderazgo en quién creer en nuestro país, o ya se perdió toda credibilidad y lo que viene es la ingobernabilidad, el caos y la anarquía?