Principales

9 propuestas después del 9

La principal demanda es una estrategia efectiva para frenar la violencia feminicida, pero debe construirse a partir de políticas públicas específicas que vayan incidiendo en todas las problemáticas

Lourdes Encinas Moreno

Las mujeres estamos haciendo historia en México. Las movilizaciones del 7 y 8 de marzo y el paro del día 9 han marcado un hito en este país. Pero ¿y ahora qué sigue?

Me pasé el paro del 9 reflexionando sobre el siguiente paso que las mujeres mexicanas debemos dar, para que este gran movimiento violeta se traduzca en acciones concretas por parte del Estado.

Nuestra principal demanda es una estrategia efectiva para frenar la violencia feminicida, pero creo que esta debe construirse a partir de políticas públicas específicas que vayan incidiendo en todas nuestras problemáticas, ayuden a que seamos menos vulnerables y a avanzar en la igualdad sustantiva.

De esa reflexión me surgen 9 propuestas mínimas para seguir avanzando en nuestra agenda común, algunas que necesitan la intervención de autoridades, otras que pueden hacerse desde la sociedad civil:

1. Reformas legislativas claras que presentemos como ciudadanas (con la figura de la iniciativa popular). Ejemplo: que las lesiones a menores de edad sean considerados delitos graves para que ameriten prisión preventiva. Si se inhiben las lesiones, se inhiben los homicidios.

2. Restitución del programa de Estancias Infantiles, o creación de figuras similares en los estados.

3. Programas educativos que promuevan la inclusión y la equidad de género.

4. Registro público de agresores sexuales.

5. Base de datos de estado por estado de casos de ataques a mujeres, con seguimiento público y publicado de los avances de las investigaciones.

6. Asesoría jurídica y, de ser necesario, presencia permanente afuera de los juzgados para que los jueces se pongan las pilas y no salgan con el cuentito de “pruebas insuficientes” en caso de agresiones a mujeres.

 7. Utilizar la tecnología para evidenciar retrasos e indolencias de la autoridad (plataforma web o app de denuncia pública encriptada o petición tipo change.org)

8. Comités en universidades para investigar (en forma paralela a las autoridades) las acusaciones contra maestros acosadores y abusadores.

9. Constitución de comisiones anti acoso y anti hostigamiento en empresas y sindicatos.

Paralelo a estas acciones, programas de empoderamiento de niñas y adolescentes en el deporte, la ciencia, la cultura… en todos los ámbitos, que sepan desde pequeñas que tienen derecho a una vida plena y libre y que nuestra lucha es porque ellas vivan en una mejor sociedad.

Esta es una propuesta mínima y personal sobre lo que considero debe seguir después del paro del 9 de marzo, que ojalá se vaya enriqueciendo con la participación de otras mujeres.

Hasta ahora el movimiento de las mexicanas ha sido horizontal e integrado por mujeres de todas las ideologías, edades y estratos sociales, haciendo a un lado las diferencias para unirnos en una causa que nos es común a todas. Eso le ha dado mucha validez.

Pero para avanzar debemos dar el paso a la organización y la integración de una agenda concreta que parta de nuestras coincidencias.

Y si en el gobierno federal insisten en ignorarnos, entonces partamos en la promoción de esa agenda desde los estados, a partir de los llamados small wins, es decir, pequeños triunfos con los que vayamos avanzando en el objetivo final.

El momento es nuestro, no podemos dejar que se enfríe.