Operaba el narco en sede de Alcaldía
José Luis Abarca Velázquez, ex Alcalde de Iguala, pagaba de 2 a 3 millones de pesos mensuales a la organización criminal Guerreros Unidos, de la cual su esposa María de los Ángeles Pineda Villa era una de las principales operadoras.
El grupo delincuencial, informó el Procurador Jesús Murillo Karam, a su vez usaba de esta renta una suma de 600 mil pesos para cubrir sus gastos de «nómina» con la Policía Municipal de Iguala, a la que tenían cooptada al grado de decidir quién podía ser admitido como agente.
«Este grupo delictivo, de acuerdo con las declaraciones de los detenidos y del propio líder del grupo (Sidronio Casarrubias, detenido el pasado jueves), recibía del Presidente Municipal de 2 a 3 millones de pesos de manera regular, mensual, bimensual, semanal, de los cuales, cuando menos 600 mil, según declaran los propios operadores financieros, eran destinados al control de la policía local, además de que el grupo delincuencial decidía los nuevos ingresos de los integrantes como policías municipales.
«Este líder del grupo delictivo Guerreros Unidos señaló a la señora María de los Ángeles Pineda Villa, esposa del ex Alcalde de Iguala, como la principal operadora de actividades delictivas desde la presidencia municipal, desde luego, en complicidad con su esposo, el señor José Luis Abarca y el Secretario de Seguridad, Felipe Flores Velázquez», dijo el titular de la PGR.
Murillo Karam dijo que el grupo delincuencial autodenominado Guerreros Unidos había tejido una red de complicidad en varias alcaldías de la entidad, la cual incluía a policías y autoridades municipales.
Relató que, con base en declaraciones de presuntos miembros de Guerreros Unidos y de agentes policiacos, hoy pueden decir que los autores intelectuales de la desaparición de los normalistas son Abarca, su esposa y los jefes de las policías municipales de Iguala y Cocula, Felipe Flores Velázquez y César Nava.
El Procurador informó que los 43 estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa fueron detenidos por órdenes del ex Edil, pero entregados a miembros de los Guerreros Unidos, porque los criminales creían que los normalistas estaban relacionados con Los Rojos, el grupo delictivo rival.
De acuerdo con la investigación, el móvil del secuestro fue un acto de disuasión, donde policías evitarían que sabotearan el informe de labores de María de los Ángeles Pineda Villa, presidenta del DIF municipal e identificada como la principal operadora de Guerreros Unidos en Ia localidad.
El Procurador señaló que Sidronio Casarrubias declaró que cuando los estudiantes fueron entregados por policías de Iguala y Cocula a sus huestes, uno de sus lugartenientes lo contactó para informarle que todo lo ocurrido en el Municipio era obra de la banda enemiga.
REFORMA