DE PRIMERA MANOPrincipales

Ante desabasto de agua, Durazo debe levantar la mano 

Por Francisco Javier Ruiz Quirrín

CUESTIONADO por el desabasto de agua potable este verano en la capital de Sonora, Hermosillo, el presidente López Obrador ofreció todo su apoyo al Gobernador Alfonso Durazo para solucionar el problema.

Lo estableció el primer mandatario en su “mañanera” de este lunes, 30 de mayo de 2022.

¿Y dónde está la solución?

Aquí es cuando los técnicos, los especialistas, los que saben pues, deberán ofrecer sus opiniones y hasta proyectos para –una vez más- intentar dar con la solución más adecuada ante una realidad que padecemos los habitantes de este desierto desde hace años.

Por la experiencia que se ha vivido, Sonora depende exclusivamente de las lluvias para hacer llegar el agua potable a más de medio millón de hogares a lo largo y a lo ancho de esta, la segunda entidad más grande el país.

Por un lado, presas como la “Plutarco Elías Calles”, mejor conocida como “El Novillo”, es el embalse que permite irrigar al sur y parte del centro de la entidad.

Aparte, cada ciudad ha perforado pozos cerca de los ríos, consumiendo las reservas del agua en el subsuelo.

Sin embargo, está confirmado que el agua es un recurso limitado.

Cada vez llueve menos y los pozos se han ido abatiendo.

Las presas, si no reciben agua de la lluvia –como está sucediendo ahora- se secan y ante un escenario así, resultarían inútiles.

Ha trascendido que las principales presas de Sonora, registran ahora un promedio de entre el 16 y 25 por ciento de su capacidad.

El agua de “El Novillo” alimenta el Río Yaqui en su paso por Cajeme y sus 200 mil hectáreas de cultivo, millones más de metros cúbicos para los pueblos yaquis, más 15 millones para Hermosillo.

Eso es limitado.

¿Cuál es la solución?

Siempre, cuando se ha pensado en grande en nuestro Estado, se requiere la ayuda del gobierno federal.

Hoy se está ante una espléndida oportunidad de llevar a cabo un proyecto que nos garantice el vital líquido, cuando menos para los próximos 25 años.

Ya en el año 2002, el gobierno del entonces mandatario estatal, Armando López Nogales, ofreció un plan para construir una desaladora para beneficiar a Hermosillo, pero el asunto se politizó con el alcalde entonces de esta capital, Francisco BúrquezValenzuela.

Al final del día no se hizo nada y se perdió una magnífica oportunidad que, ahorita, es muy probable, estuviéramos reconociendo.

Sonora es desierto y los desiertos en el mundo están solucionando sus problemas de desabasto del vital líquido con agua de mar.

Empalme es un ejemplo vivo. Está a punto de echarse a andar una desaladora que solucionará el problema de desabasto en Guaymas y Empalme.

Ante el ofrecimiento presidencial, el Gobernador Durazo debe levantar su mano.

Desaprovechar esta oportunidad sería un grave error.

MUCHOS comentarios acerca del festejo de Sergio “Checo” Pérez y su triunfo en la Fórmula 1 de Mónaco, al lado del expresidente Felipe Calderón que, dicho sea de paso, estaba en ese lugar por haber sido designado presidente de la Federación Internacional de Automovilismo… Mira que tirarse ambos, en abrazo, a la alberca emblemática… El Presidente López Obrador no le quedó de otra que felicitar a “Checo”, pero en el paquete también incluyó al Atlas y su bicampeonato en el futbol mexicano obtenido por su victoria, en la final, ante el Pachuca… Comentarios de los “chairos”, criticando el festejo Pérez-Calderón “porque el automovilismo es un deporte elitista, donde un mínimo de la población lo comparte, de tal manera que un festejo es un insulto neoliberal a los pobres”… La verdad es que si el festejo hubiese sido con otro personaje, no hubiese trascendido tanto, pero Calderón ha sido el “Némesis” del Presidente… Ante esto, el padre de “Checo” –Antonio Pérez-, diputado federal por MORENA, sacó de su ronco pecho lo siguiente: “Calderón y otros expresidentes son amigos nuestros; nosotros no sudamos gripas ajenas”… ¡Palo!