Colapsa transporte público; choferes bloquean el Centro

Por Daniel Sánchez Dórame/

Miles de usuarios del transporte y clientes del Centro de esta capital de Sonora, resultaron afectados al estallar el conflicto entre concesionarios, operadores de las unidades y el Gobierno del Estado.

Al ser 14 de febrero, los comerciantes del centro esperaban tener ventas extraordinarias, sin embargo, toda la actividad económica resultó trastocada en el primer cuadro de Hermosillo porque decenas de camiones dejaron de prestar el servicio y bloquearon calles aledañas al Mercado Municipal.

El complejo conflicto en el transporte público de Sonora tiene varios frentes, por un lado los concesionarios acusan al Gobierno de retener el dinero del prepago y negarse a pagar el subsidio al pasaje; en tanto que la Dirección de Transporte acusa a los concesionarios de ser éstos quienes mantienen un adeudo con el Ejecutivo; y el sindicato de choferes acusa a patrones y gobierno que por sus problemas los empleados han dejado de percibir su salario y prestaciones de Ley.

El conflicto hoy ha llegado a su clímax y el servicio de transporte público en Sonora está a punto de colapsar en detrimento de la ciudadanía.

Por la madrugada, la Ruta 18 que es una de las principales dejó de prestar el servicio por lo que los usuarios abarrotaron las paradas de autobuses como un presagio de lo que vendría más tarde.

A las 9:00 a.m. un grupo reducido de concesionarios ofreció una rueda de prensa para anunciar la conformación de una nueva empresa transportista disidente de la Sociedad Integradora y Consentradora del Transporte Urbano en Hermosillo S.A. (Sictuhsa), empresa que agremia a la mayoría de los propietarios.

Una hora más tarde el titular de Sictuhsa, José Luis Gerardo Moreno denunciaba que el Gobierno del Estado retenía el recurso del prepago y subsidio al pasaje para ahogar las finanzas de los concesionarios y favorecer a la nueva empresa transportista auto denominada SIENTE o Sociedad Integradora en Transporte Efectivo.

Al mismo tiempo, Carlos Espinoza, director del área Jurídica del Ejecutivo Estatal, llamaba a los concesionarios del Sictuhsa a retomar el diálogo, pero amagó a los dueños con la necesidad de que cubran un supuesto adeudo de 708 millones de pesos derivado de créditos para la compra de nuevos camiones; el representante legal advirtió que sí no existe buena voluntad de los dueños para mejorar el servicio, el gobierno procederá al retiro de las concesiones.

En medio del conflicto quedan miles de usuarios que padecen la falta de servicio de transporte público digno, y ahora, los comerciantes y clientes del primer cuadro atorados entre el tráfico vehicular y el bloqueo de los transportistas.