De Primera Mano| Un verdadero calvario de trabajadores con COVID en el IMSS

Por Francisco Javier Ruiz Quirrín

LA INSENSIBILIDAD no es una moda, sino una forma de ser de la burocracia mexicana desde hace muchos años. Lamentablemente, los servidores públicos sensibles (aquellos que están obligados a tomar las decisiones) se pueden contar con los dedos de una mano.

El “disparo” de contagios de COVID-19 por la presencia de la variante “Ómicron”, ha provocado todo un calvario, no para cientos, sino en miles de trabajadores que han acudido a alguna de las clínicas del IMSS buscando aplicarse una prueba y salir de dudas sobre su posible contagio y, al toparse con pared, se ven obligados a aceptar una cita en los días siguientes.

Gran porcentaje de estos trabajadores derechohabientes del Seguro Social, optan por acudir a un laboratorio privado ante la urgencia y la presión de sus patrones en las empresas, que exigen una incapacidad médica para evitar ser despedidos.

Sin embargo, una vez que tienen la prueba COVID con resultado positivo en sus manos, el trabajador que no tiene acceso al Internet, tiene qué atenerse a hacer una fila donde el límite de atención sólo llega a 20 personas por turno.

En las últimas horas se han difundido videos en los que se pueda corroborar las largas filas de personas en espera de ser atendidos para lograr una incapacidad por estar contagiados y así justificar en sus empresas tal situación.

La semana pasada, la secretaria del Trabajo y el director general del IMSS, Luisa María Alcalde y Zoé Robledo, enviaron un mensaje por redes sociales en la que solicitaban a los patrones o empleadores, admitir la incapacidad por COVID que el IMSS está emitiendo a través de su página www.tuimss.gob.mx.

Sin embargo, las altas cifras de nuevos contagios por día en todo el país rebasan ahora los 40 mil y las ausencias en los negocios y empresas se ha ido incrementando, con el evidente deterioro no sólo en la economía regional, sino en las relaciones laborales de los empleados con sus jefes.

Urge que surja entre los servidores públicos y empresarios, la capacidad para sentarlos en una mesa y acordar lo mejor para tratar de pasar este duro escenario.

El gobierno debe hacer su parte y no le está alcanzando. Se advierte muy limitado. El empresario también debe hacer lo que le corresponde, pero recibiendo también estímulos especiales de parte de instituciones como el IMSS y otras relacionadas con el beneficio a la clase trabajadora.

Esta falta de capacidad en ambas partes sólo está afectando a la fuerza laboral.

Debe atenderse de inmediato.

“No me envenenen el alma”: Luis Donaldo Colosio

DURANTE LA conferencia de prensa de los martes, presidida por el gobernador Alfonso Durazo, quedó la percepción en los reporteros que de ninguna manera el titular del Ejecutivo sonorense quedó complacido con la designación de Claudia Pavlovich como nueva cónsul de México en Barcelona, España… Y es que el tema más recurrente en todos los espacios de participación ciudadana, es que este anuncio permite envolver en la impunidad posibles actos de corrupción del pasado sexenio, abre la puerta a la probabilidad de haberse llevado a cabo un “pacto” de la exgobernadora con el Presidente López Obrador, lo que pudiera haber sido utilizado para ayudar en el triunfo electoral de Durazo en la pasada elección por la gubernatura… No sólo eso… Las voces difusoras de la “cuatroté” en Sonora, adueñada de varios espacios en las redes sociales y algunos medios electrónicos de comunicación, se quedaron sin argumentos para defender su causa… Alfonso Durazo negó rotundamente cualquier pacto de impunidad: “Por favor, a estas alturas de mi vida, no estoy yo para andar protegiendo a nadie que haya cometido una irregularidad en el cumplimiento de su responsabilidad… Sí tengo la decisión de no imputar irresponsablemente, de respetar la presunción de inocencia, de no lastimar reputaciones, de no impulsar campañas mediáticas; las padecí, después del asesinato de Luis Donaldo, impulsadas por Zedillo, las recibí de Vicente Fox y de Marta Sahagún; las sufrí cuando renuncié al PRI y cuando me uní a López Obrador, en la campaña del 18 y en la campaña del 21 y eso enferma la vida política del Estado… Decía Luis Donaldo: No me envenenen el alma; por eso he optado por no entrar en conflicto, por la armonía, lo que no significa que no deba tomar decisiones para romper con los vicios del pasado”… Estableció que si existen irregularidades, éstas surgirán de las auditorías que practica la Contraloría y que en caso de confirmarse actos ilegales, se actuará en consecuencia y con contundencia.