El Papa ataca a la derecha católica y apuesta por una Iglesia más liberal

El papa Francisco asegura que “Dios en la creación nos ha hecho libres” y que “no es posible una injerencia espiritual en la vida personal”, en una entrevista con la que se desmarca abiertamente de la ortodoxia conservadora de sus antecesores, Benedicto XVI y Juan Pablo II.

En una entrevista concedida a la revista de los jesuitas Civiltá Cattolica, el Pontífice se refiere al papel de la mujer en la Iglesia y considera “necesario ampliar los espacios para una presencia femenina más incisiva”.

Repudia el machismo. Francisco especificó que la solución para el encaje de la mujer en la Iglesia no es la del “machismo con faldas”, porque explicó que “la mujer tiene una estructura diferente al varón”, pero lamentó que “los discursos que oigo sobre la mujer a menudo se inspiran en una ideología machista”.

Sin hacer referencia concreta a la entrada de las mujeres en el sacerdocio, el Papa recordó que “las mujeres están formulando cuestiones profundas que debemos afrontar”.

“La mujer es indispensable para la Iglesia”, declaró, y añadió: “en los lugares donde se toman las decisiones importantes es necesario el genio femenino”.

Sobre otros temas sociales, considerados tabú para sus antecesores, Francisco habló abiertamente: “No podemos seguir insistiendo solo en cuestiones referentes al aborto, al matrimonio homosexual, los divorciados o al uso de anticonceptivos. Es imposible. Yo he hablado mucho de estas cuestiones y he recibido reproches por ello. Por lo demás, ya conocemos la opinión de la Iglesia y yo soy hijo de la Iglesia, pero no es necesario estar hablando de estas cosas sin cesar”.

Y añadió: “Hay que tener siempre en cuanta a la persona. Dios acompaña a las personas y es nuestro deber acompañarlas a partir de su condición”, por lo que hay acompañarlos “con misericordia”.

“Una vez una persona, para provocarme, me preguntó si yo aprobaba la homosexualidad. Yo entonces le respondí con otra pregunta “Dime, Dios cuando mira a una persona homosexual ¿aprueba su existencia con afecto o la rechaza y la condena?”, recordó.

“Soy un pecador Sobre la Iglesia, dice que “es la casa de todos, no una capillita en la que cabe solo un grupito de personas selectas. No podemos reducir el seno de la Iglesia universal a un nido protector de nuestra mediocridad”.

Y, en un tono cercano y sencillo, el Papa se define como un pecador: “Soy un pecador en quien Dios ha puesto los ojos”.

CRÓNICA