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Falta de mantenimiento en estufa provocó evacuación de guardería

Por Daniel Sánchez Dórame/

La falta de mantenimiento en una estufa industrial generó una fuga de gas por lo que 88 bebés tuvieron que ser evacuados de una estancia infantil ubicada al norte de esta capital de Sonora, donde el 5 de junio del 2009 ocurrió la mayor tragedia infantil en la historia del País, el incendio de la Guardería ABC.

Fuentes del departamento de Bomberos de Hermosillo, explicaron que el piloto de la estufa no quemaba bien el butano y que eso activó la alarma detectora de gas.

«Uno de los quemadores de la estufa industrial en la cocina no estaba quemando el gas adecuadamente por falta de servicio, todo se controló cerrando las válvulas de paso y el cilindro del gas; Luis Enrique Córdova Morales, de la Unidad Estatal de Protección Civil, canceló la cocina hasta que se emita un dictamen técnico que certifique que se dio servicio a la estufa», declaró uno de los traga humo que atendió la alerta.

Éste indicó que en total fueron evacuados 88 bebés de entre 34 días de nacidos hasta 4 años de edad; además de 33 adultos a cargo del cuidado e intendencia del inmueble.

La instalación evacuada fue la ‘Estancia Infantil Kinder El Paraiso, S.C.’, con domicilio en Jesús Siqueiros y Blvd. Morelos de la colonia Jesús García, al norte de Hermosillo, una casa habitación habilitada como guardería con capacidad instalada para atender hasta 122 infantes.

Fue alrededor de las 9:15 a.m. hora local (11:15 tiempo de la Ciudad de México), que la alarma se activó debido a un fuerte aroma a gas; inmediatamente, personal de la guardería comenzó a sacar cunas y portabebés hacia la cochera de una casa contigua donde resguardaron a los niños mientras personal de bomberos y protección civil revisaba las instalaciones para descartar riesgos.

Según el Departamento de Bomberos de Hermosillo, pasaron tres minutos entre la hora del reporte y su arribo al lugar del siniestro; y cuando llegaron todos habían sido desalojados en orden y algunos papás decidieron llevarse a sus hijos.

Una hora más tarde, la fuga de gas quedó bajo control y la estancia infantil reanudó labores, por lo que algunos bebés volvieron a sus salas.

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