Lulú y Thaís: Niñas promesa de la Gimnasia

Las hermanas Lulú y Thaís Olea, participarán con el equipo que representará a Sonora en el Campeonato Nacional de Gimnasia Artística en San Luis Potosí; desde los dos años entrenan y tienen sobresaliente resultados

Por Rigo Gutiérrez E.

Lulú y Thaís son atletas de alto rendimiento a su corta edad. Entrenan duro de cuatro a ocho horas diarias. Y cuando no acuden al gimnasio, en su casa siguen dando giros y saltando.

Las hermanas Olea Valenzuela tienen una energía desbordante, flexibilidad impresionante, equilibrio milimétrico, disciplina marcial, pero sobre todo, derrochan alegría.

Acudimos a su centro de entrenamiento en el Centro de Usos Múltiples. Ellas hacían el calentamiento previo de rutina, algo indispensable para ejecutar los complejos movimientos en los aparatos del gimnasio… Con el permiso de Lourdes Valenzuela, su entrenadora y mamá, ambas ponen una pausa a los ejercicios. Se acercan y se sientan sobre unas colchonetas. Van descalzas y portando un conjunto rosa, especial para el adestramiento. Tienen un semblante serio (por lo pronto).

Lulú: Siempre da el 100

Lourdes, es la mayor, tiene 12 años de edad y practica gimnasia desde los dos años. Todos sus amigos la conocen como “Lulú”, siempre le han dicho así y le gusta, por eso también nosotros decidimos decirle Lulú.

En su trayectoria atlética cuenta con importantes participaciones en competencias estatales, regionales y nacionales. Recientemente asistió a un clasificatorio en Agua Prieta, concursó en el Nivel 8, obteniendo segundo lugar. Con esta participación se ganó su “boleto” para participar en el Campeonato Nacional de Gimnasia Artística en mayo en San Luis Potosí.

En las competencias los jueces les califican cuatro pruebas: salto de caballo, barras asimétricas, viga de equilibro y manos libres (le conocen como piso, es donde bailan y hacen rutinas). La calificación puede ser independiente o sumando todos los aparatos (all round).

Lulú platica que el año pasado, fue a su primer competencia nacional. Ahí logró coronarse como campeona en viga de equilibrio (su especialidad). Una de sus mejores experiencias: “Sentía mi estómago hecho bolita. Muy padre… porque era mi primer nacional y gané en primer lugar”, relata.

Para ella, una de las claves es ir muy concentrada en hacer su trabajo. “Tú con lo que entrenaste tienes que dar tu 100 y con eso vas a ganar”.

Tahís: adrenalina pura

Por su parte Thaís tiene ochos años de edad. A los tres años comenzó en esta disciplina deportiva. Le gustan las emociones fuertes. De hecho, platica que lo que más le gusta es saltar por el aire. Revela que en el trampolín puede llegar a dar dos giros en el aire. 

La pequeña atleta también acudió al selectivo de Agua Prieta. Ahí obtuvo primer lugar en Nivel 7, asegurando estar dentro del equipo que representará a Sonora en el Nacional que organiza la Federación Mexicana de Gimnasia.

La entrenadora platica sobre el rápido avance de Thaís. Recuerda que hace un mes en la “Copa Olympica” estaba inscrita para el nivel 5, el cual hizo sin dificultad, un día después compitió en el nivel 6, y en semanas alcanzó el nivel 7 en Agua Prieta. Es de las más pequeñas en ese nivel para su edad.

Thaís confiesa que su especialidad es la viga. Nos dice que para estar arriba de ese aparto, a 1.20 metros del suelo y con pies sobre una pequeña superficie de 10 cm, lo indispensable es “tener equilibrio, pensar sólo en ti, hacerlo sin jugar, y estar muy concentrada”.

—¿Cuántas horas al día entrenas, Thaís?

Cuatro. A veces son doble sesión.

—¿Este tipo de entrenamiento es de alto rendimiento?

¿Mamá que es rendimiento? —La mamá y entrenadora interviene para aclararle a la pequeña atleta que es cuando entrenan mucho… “¡Ah!”—.

—¿Y vas a la escuela?

Sí, voy en tres, quiero decir, tercero… (risas)

—Y tú Lulú ¿en qué grado estás?

En sexto.

—¿Y cómo le hacen para entrenar e ir a la escuela? ¿Cómo es un día normal, Lulú?

A ver, nos despertamos. Tardamos mucho eso sí… Nos vamos a la escuela. Cuando llegamos nos tenemos que apurar demasiado. Tienes que comer, alistarte, peinarte, agarrar el agua todo bien rápido para podernos ir…

Y si no estás lista, no vas —agrega Thaís—.

Si tienes tarea en la noche debes hacerla toda dormida.

O si no la haces en la escuela —complementa Thaís— (risas)

Mis amigas en la salida (de la escuela) dicen ¿puedes hablar? Y yo les digo que llego a las nueve y media y me dicen “no ya estoy dormida, mejor mañana…”.

¿Tienen algún personaje del mundo del deporte que admiren?

Alexa Moreno —dicen en coro y agrega Thaís—. Una vez vino a nuestra casa estaba jugando un jueguito y se le trabó y grito ¡No! (risas).

Ella ha entrenado acá. Tenemos un libro que ella escribió. Cuenta de cómo le ha ido. Da recomendaciones y cómo ella llegó para poder sobresalir.

¿Ustedes han soñado en llegar a competencias internacionales?

Yo me imagino a la Thaís… Es que a ella le gusta mucho.

A mí no me gusta mucho. ¡Me encanta! —remata la más pequeña—.

Finalmente las hermanas Olea le dejan un mensaje a los niños lectores:

“Que luchen por sus sueños, que en el deporte que estén, lo disfruten” —dice Thaís—.

“No se dejen. Luchen por sus sueños para que se hagan realidad. Todo está acá… En la cabeza” —añade Lulú—.